Acciones de empresas familiares, más rentables en el largo plazo
En general, cuando se habla de empresas familiares en la Argentina, se piensa automáticamente en Pyme que arrastran durante años conflictos de familia hasta que la tercera generación liquida la compañía.
Pero pocos recuerdan que varias de las mayores multinacionales del mundo –y algunas pocas argentinas- nacieron como empresas familiares, y aún hoy las familias fundadoras conservan una participación accionaria importante.
Nombres ilustres como John Rockefeller, Arnold von Siemens, Friedrich Bayer, Amschel Rothschild o Armand Peugeot, o más cerca nuestro Agostino Rocca (Techint), son representantes de un capitalismo familiar que apostó a crecer a través de los mercados bursátiles, y que de acuerdo con un reciente estudio del banco Crédit Suisse, alcanza una mayor rentabilidad en el largo plazo que en compañías con una base accionaria más fragmentada.

De acuerdo con el estudio, en los últimos 10 años, las acciones de compañías con una participación mayor al 10% de descendientes de las familias fundadoras lograron superar en rendimiento en un 8% en promedio a sus índices de referencia, tanto en Europa como en los EEUU.
"A diferencia de las compañías que tienen una base accionarial más diversificada, las compañías con una fuerte presencia familiar tienden a centrarse menos en la próxima presentación trimestral de resultados y por lo tanto pueden implementar estrategias creadoras de valor, no en el corto plazo, sino sobre un horizonte mucho más amplio", sostiene el informe.
Tenaris
Si bien el estudio se concentra en Europa, cuando uno se fija en la performance de Tenaris en la Bolsa porteña, desde su inicio de cotización en diciembre de 2002 hasta hoy, la compañía controlada por la familia Rocca obtuvo una rentabilidad del 935% (ver infografía). Mientras tanto, el índice Merval de acciones líderes ganó un 325%, es decir que la acción de Tenaris casi triplicó el rendimiento del índice líder.
Si bien la Argentina contaba hasta hace unos años atrás con muchas empresas familiares cotizantes en la Bolsa porteña y con muy buenas rentabilidades, las sucesivas crisis económicas forzaron a las familias controlantes a ir vendiendo sus participaciones accionarias.
Este es el caso de compañías emblemáticas del capitalismo nacional como Pecom, Loma Negra, Acindar o Quilmes, que en los últimos años fueron vendidas a multinacionales.
Causas
Para los analistas del Crédit Suisse, se identificaron tres características principales de esta clase de empresas que explican esta mejor performance:
- Management enfocado en el largo plazo. Los accionistas familiares exigen una estrategia de largo plazo a sus managers. Como la mayoría de las familias desea transmitir la empresa a sus descendientes, tienen fuertes razones para conservarlas saludables. Esta clase de empresas se focalizan menos en el resultado del próximo trimestre y por lo tanto pueden poner en marcha estrategias que generan beneficios en lapsos más largos.
- Mejor adaptación de los intereses del management y de los accionistas. En general, las familias controlan un número limitado de empresas y estos activos representan una parte importante de sus fortunas. Por eso tienden a focalizarse mucho más en la administración de una sociedad y no es extraño que nombren un representante (muchas veces es un miembro de la familia) en el consejo de administración, como forma de participar en las decisiones estratégicas de la firma. Esto ayuda a alinear los intereses del management y de los accionistas.
- Concentración en el core business. Este es uno de las mayores ventajas de estas empresas. De esta forma, se enfocan en nichos de mercado como estrategia de largo plazo. Esto reduce la política de adquisiciones a través de apalancamientos financieros (leverage buy out), que tienen un nivel de riesgo mayor y que es muy común en empresas no familiares. En el mismo sentido, las empresas familiares limitan la diversificación de sus managers y los obligan a concentrarse y especializarse en el core business.
Riesgos
Sin embargo, esta clase de modelos de negocios también conlleva sus riesgos, que no son menores. En una entrevista con el diario español Expansión, Hervé de Montlivault, consejero delegado del Crédit Suisse, explica que sobreconcentrar los activos puede ser peligroso, así como los problemas que conllevan las disputas familiares.
Pero en la visión del especialista Jorge Hambra, Director del Club Argentino de Negocios de Familia, una de las principales claves del éxito de las empresas familiares es la capacidad de profesionalización de estas compañías, lo que permite resolver los conflictos internos que ponen en riesgo la vida de la firma.
"Cuando una empresa como Techint ya llegó a tal grado de profesionalización, estos conflictos se resolvieron durante el transcurso de la vida de la empresa. Se trata de empresas que están abiertas al mercado, que tienen que responder ante sus accionistas y que ya han resuelto un montón de cuestiones formales y de legislación interna", afirma Hambra.
Para el especialista, a veces, antes de convertirse en sociedades anónimas, algunas empresas familiares prefirieron vender una parte a una multinacional, que se convierte en socio y le pide a la familia una serie de formalizaciones que hacen que la empresa se fortalezca. "Porque lo que ataca a la empresa familiar es la informalidad", agrega.
Family Index
Junto con el estudio, el Crédit Suisse anunció que próximamente lanzará al mercado el Family Index, un índice que seguirá la performance de 40 empresas familiares de EEUU y Europa. Dentro de este índice hay empresas de sectores tan diversos como BMW (automóviles), Swatch (relojes), Carrefour (hipermercados), Mittal Steel (siderurgia) y Ericsson (telecomunicaciones).
Martín Burbridge
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