El índice S&P 500 celebra sus 50 años de existencia
"Cuando el próximo lunes suene la campana que anuncia el cierre de sesión en la Bolsa de Nueva York se estará celebrando algo más que el 50 aniversario de este índice". Con esta frase, Standard & Poor’s deja constancia del papel crucial que ha jugado este indicador en el mundo financiero desde su lanzamiento el 4 de marzo de 1957.
Este índice bursátil es uno de los más seguidos por los inversores profesionales, aunque el Dow Jones –creado en 1986 por Charles Dow, fundador del diario Wall Street Journal– le hace sombra en lo que a fama respecta, sobre todo entre los particulares. Las grandes firmas financieras tienen claro que el S&P 500 es un indicador fiable de la salud financiera de la economía estadounidense y que es mucho más representativo que el Dow. De hecho, ha engendrado la creación de numerosos productos de inversión que tienen como referencia este índice.
Desde su debut, el S&P 500 ha multiplicado por cuatro casi la cota con la que empezó, los 377 puntos. En este tiempo ha ofrecido una rentabilidad anual del 8,3%. Ahora ronda los 1.400 puntos y en lo que va de año pierde cerca del 1% tras el recorte de la última semana.
Este indicador está compuesto por las 500 compañías estadounidenses de mayor capitalización. El mínimo exigido es de 4.000 millones de dólares y tener un capital libre en mercado (free-float) de, al menos, un 50% de sus acciones, según informó Expansión.com
El índice más seguido por los profesionales del sector se usa como índice de referencia para analizar la evolución de los fondos de inversión de renta variable americana. Esto se debe a que tiene dos grandes ventajas con respecto al Dow Jones, según explica Daniel Mateo, director de asesoramiento y planificación financiera de Barclays. "Está más diversificado, tanto a nivel de número de compañías (500 frente a sólo 30 del Dow Jones) como sectorialmente (todos los sectores están representados).
Por otro lado, "es un índice bien construido, lo que no ocurre con el Dow Jones. En el S&P 500 el peso de cada valor depende de su capitalización, como en la mayoría de índices mundiales. En el Dow cada valor pondera en función de su precio. Esto supone que un valor como Pfizer, que vale 25 dólares, pesa en el Dow casi cuatro veces menos que IBM, que cotiza a 92 dólares, cuando la capitalización de Pfizer es un 28% superior", explica.
El experto recalca la importancia del S&P 500 si se tiene en cuenta que representa en torno al 75% de la capitalización total de la bolsa americana, que es la más líquida del mundo. "Por eso, su evolución representa el mejor barómetro de la marcha de los mercados de valores mundiales", indica Mateo.
Los 50 años de historia del índice dejan un saldo muy rentable para los inversores, ya que en 36 de ellos el S&P 500 ha terminado con ganancias –el año que más subió fue en 1958, un 38%–. Sólo en 14 ocasiones bajó –el 29,7% en el peor de los casos, 1974–.
La mala fama que tiene octubre en los mercados bursátiles, que siempre se asocia con caídas, presenta en el caso de este índice la cara más amable y la más amarga. Fue precisamente ese mes, en 1974, cuando el indicador registró su mejor saldo mensual. Pero unos años más tarde, en 1987, el décimo mes del año cerró con una caída del 21,76%, la mayor de su historia, según informó Expansión
Es más, la volatilidad fue tal que hizo que el índice registrara el mayor retroceso diario (20,47%) y dos sesiones después la mayor subida (9,10%). El crash bursátil de 1987 fue el mayor desde el de 1929 (del que se libró el S&P 500 porque todavía no se había creado