• 27/3/2025

El dólar que usan las empresas volvió a subir y se ubicó por encima de los $1.200

El CCL trepó otro 0,2% este viernes y se negoció a $1.202. El MEP también subió y operó en $1.194, mientras que el blue retrocedió $10
07/02/2025 - 18:20hs
dólar

En la última rueda de la semana, el dólar blue se vendió este viernes con una baja de diez pesos, a $1.205 en las cuevas del microcentro porteño. En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación (CCL) se negoció a $1.202 (+0,2%), mientras que el dólar MEP operó en $1.194 (+0,3%).

Los expertos prevén que dólares financieros seguirán presionados al alza, aunque no esperan una disparada descontrolada porque el consideran que el Gobierno seguirá interveniendo para mantener a raya al CCL y MEP, tal como ya se evidenció a principios de esta semana. De hecho, el CCL en los primeros días del mes sube casi 1,3%, superando la pauta mensual de crawling peg que fijó Caputo para febrero. 

En un contexto de incertidumbre económica y desafíos cambiarios, el Gobierno implementó una reducción de tasas con miras a acumular reservas y poder hacer frente a la primera mitad del año. Fuentes de mercado relevadas por iProfesional interpretaron la medida como parte de una estrategia deliberada para eliminar el cepo cambiario, la cual se ejecutó mediante ajustes impositivos en el comercio exterior y maniobras orientadas a acumular divisas.

La baja de retenciones impulsada desde el Ministerio de Economía favoreció al sector agropecuario, que se benefició de la baja temporal de retenciones y de la mejora en el tipo de cambio. Los analistas afirmaron que esta acción recuperó el flujo de dólares, sobre todo tras la merma observada en la compra de divisas y ayudará a contrarrestar la cuenta corriente negativa acumulada en meses anteriores.

Asimismo, se constató que la estrategia fiscal otorgó a los productores una ventaja competitiva, aun cuando implicó un costo estimado en u$s 800 millones para el primer semestre. Los expertos aseguraron que dicho sacrificio, equivalente a un modesto porcentaje del PIB, se tradujo en beneficios a mediano plazo y en el fortalecimiento de la confianza del mercado. En sus palabras, "la acción permitió generar un efecto positivo en el sector sin desequilibrar por completo la balanza fiscal."

Finalmente, se interpreta la medida como un paso intermedio que allanó el camino para futuras modificaciones en el régimen cambiario. En este sentido, los analistas manifestaron que la recaudación perdida se compensó con ingresos de otras partidas y que la estrategia estimuló la entrada de dólares, lo que marcó un hito en la política monetaria reciente y proyectó un escenario de mayor estabilidad económica para el futuro.

Baja de tasas: ¿Preparando el terreno para la salida del cepo?

Los analistas de la sociedad de bolsa GMA Capital destacaron que el Gobierno implementó una reducción del 3% en las tasas con el objetivo de acumular reservas para afrontar la primera mitad del año. Sus expertos interpretaron la medida como parte de un proceso deliberado para eliminar, de una vez por todas, el cepo cambiario. La estrategia se centró en la acumulación de divisas mediante ajustes en impuestos al comercio exterior, lo que mejoró la competitividad de los productores.

El sector agropecuario se vio beneficiado por la baja temporal de las retenciones, medida que permitió mejorar el tipo de cambio en un contexto de apreciación cambiaria y precios internacionales a la baja. Los expertos afirmaron que esta acción se enmarcó en la recuperación del flujo de dólares comerciales, en especial luego de la merma observada en la compra de divisas a través del MULC en enero. Según los analistas, esta maniobra había sido necesaria para contrarrestar la acumulación de una cuenta corriente negativa que alcanzó seis meses.

Se constató que, mediante la devaluación fiscal, el Gobierno otorgó a los productores una ventaja competitiva, al lograr mejorar el tipo de cambio real. Los expertos destacaron que, aunque la medida implicó un costo fiscal estimado en u$s 800 millones para el primer semestre, se trató de un sacrificio calculado, equivalente al 0,13% del PIB, para obtener beneficios a mediano plazo. En palabras de los analistas de GMA Capital, "la acción permitió generar un efecto positivo en el sector sin desequilibrar por completo la balanza fiscal."

Finalmente, se señaló que la recaudación perdida se compensaría con ingresos provenientes de otras partidas, probablemente ligadas a la recuperación de la actividad económica. La medida se interpretó como un paso intermedio, en el que el Gobierno apostó por una mejora inmediata en el flujo de dólares, mientras sentaba las bases para eliminar el cepo en un futuro próximo.

Eliminación de retenciones y recortes en Exportación En la misma línea, la consultora económica 1816 informó la baja de retenciones se realizó en el contexto de un recorte transitorio del 20% en las alícuotas de derechos de exportación a cereales y oleaginosas. Se precisó que, para el agro, esta noticia representó un alivio en un sector que había sufrido debido a la falta de precipitaciones y a las altas temperaturas recientes.

La decisión se fundamentó en la necesidad de ajustar la política de retenciones en un momento de desafíos climáticos para el sector agropecuario. Los especialistas de 1816 indicaron que la reducción en las alícuotas se aplicó de manera transitoria en lo que restaba del primer semestre de 2025. Se estableció que la soja pasó a tener una alícuota del 26%, mientras que el maíz y el trigo se situaron en el 10%. Los analistas enfatizaron que la medida se orientó a mitigar el impacto negativo en un sector que había mostrado signos de debilidad.

La consultora explicó que la eliminación de retenciones se había convertido en una medida de gran relevancia, dado el deterioro que el sector agro había experimentado en los dos meses anteriores. Los expertos manifestaron que la falta de precipitaciones desde diciembre se había agravado por las altas temperaturas de las últimas semanas. Los analistas afirmaron que el sector agro se encontraba en una situación complicada y que la medida respondía a esa necesidad de alivio.

Los expertos de 1816 concluyeron que la decisión contribuía a restablecer la confianza en el sector exportador. Y señalaron que el recorte en las alícuotas de exportación resultó especialmente oportuno en un contexto de tensiones climáticas. Los analistas destacaron que la medida fue implementada de forma inmediata y puntual, lo que marcó un hito en la política de retenciones vigente.

Baja de tasa en pesos, suba de tasa en dólares

A su turno, los expertos de la sociedad de bolsa GMA manifestaron que la decisión de disminuir las retenciones se integró a una estrategia financiera orientada a estimular la entrada de dólares, incentivando la prefinanciación de exportaciones. Se observó que la medida fue bien recibida por el mercado, que había anticipado una consolidación en las expectativas de baja de la inflación. La acción se ejecutó en el marco de una estrategia del Banco Central, que valoró positivamente el entorno de estabilidad esperado.

Se constató que, hasta el día anterior, la tasa de LEFI se ubicó en 32% TNA, mientras que a partir de la nueva medida operó en 29% (2,45% TEM). Los analistas indicaron que esta reducción reafirmó la consolidación observada en las expectativas de inflación, lo que había permitido al mercado adelantarse al anuncio gubernamental. La disminución en la tasa se consideró un factor clave para favorecer la toma de deuda en dólares por parte de los exportadores.

Los expertos de GMA Capital destacaron que la medida tuvo un doble impacto: por un lado, facilitó el financiamiento para los exportadores, y por otro, benefició al Gobierno al propiciar la liquidación de divisas en el mercado de liquidación cambiaria (MLC). En este contexto, se entendió que el diferencial de tasas se amplió, haciendo que el financiamiento en dólares resultara aún más atractivo. "La estrategia resultó coherente con el objetivo de estimular la entrada de divisas en el país", aseguraron los analistas.

Finalmente, se evidenció que la política adoptada no sólo redujo el costo de financiamiento en moneda extranjera, sino que también generó un ambiente de mayor confianza en el mercado. El efecto fue percibido de manera positiva tanto por exportadores como por inversores, lo que fortaleció la posición del Gobierno en su intento de manejar la acumulación de divisas. Así, se cerró un capítulo que, según la interpretación de GMA Capital, preparaba el terreno para futuras modificaciones en el régimen cambiario.

Política Monetaria y el spread entre LEFI y el crawl Los analistas de 1816 informaron que, a partir de febrero, el Banco Central bajó el ritmo del crawl a 1%. Los expertos señalaron que, de mantenerse la tasa sin modificaciones, la TPM pasaría a correr 1,7% TEM por encima del spot. Se destacó que este spread no se había visto desde mayo de 2024. Los analistas explicaron que este diferencial marcó la diferencia en el costo de endeudamiento entre dólares y moneda local.

La consultora explicó que el diferencial permitía identificar cuánto más barato era el financiamiento en dólares. Los expertos manifestaron que aquellas empresas que accedían a dicho financiamiento se beneficiaban de condiciones favorables. Los analistas destacaron que el crédito en moneda extranjera seguía en alza, evidenciado por los u$s 1.549 millones otorgados en los primeros 27 días de enero. Se precisó que esta dinámica se vinculaba con las compras del BCRA en el spot desde agosto de 2024.

Los especialistas de 1816 indicaron que se esperaba observar si el Banco Central mantendría el alto spread entre la tasa de LEFI y el crawl. La consultora explicó que la medida respondía a la necesidad de ajustar la liquidez en Pesos. Los expertos señalaron que se encarecía el crédito para no-exportadores y se apostaba por la remonetización en dólares. Los analistas precisaron que cada decisión se tomó en función del equilibrio entre la liquidez y el endeudamiento.

La consultora concluyó que la licitación del Tesoro de ayer representó una oportunidad para que el BCRA redujera la tasa. Los expertos afirmaron que la reunión del Directorio, que se celebraba cada jueves, ofrecía un espacio para ajustar la política monetaria. Los analistas indicaron que las últimas decisiones se tomaron después del IPC y el REM, lo que evidenció el carácter reactivo de las medidas. Se enfatizó que, a pesar de la incertidumbre, se confiaba en que la desinflación permitiría bajar la tasa nominal en Pesos para evitar que la tasa real alcanzara dos dígitos.

Debut de los nuevos duales

Los analistas de GMA Capital afirmaron que la aparición de los nuevos instrumentos duales representó un hito relevante en el mercado de deuda. Se constató que estos bonos se ubicaron por debajo de la curva de tasa fija, debido a la cobertura que ofrecía su componente de tasa variable. La dualidad del instrumento fue valorada como un elemento diferenciador en un entorno de incertidumbre.

Se observó que el rendimiento de los duales se mostró muy similar al de las típicas Lecaps y Boncaps. Los expertos señalaron que, aunque el Boncap de fines de junio operara en 2,14% TEM, su par Dual registró un 2,09% TEM, lo que implicó un spread inferior al 1% anual. Esta diferencia reflejó la moderada prima que el inversor estaba dispuesto a pagar por la opcionalidad del componente variable.

Los analistas destacaron que, a pesar de las similitudes en los rendimientos, la estructura dual ofrecía una protección adicional ante escenarios de desinflación menos pronunciados o una reducción más lenta de las tasas. Se enfatizó que el componente de tasa variable podría ser valorado en contextos en los que la salida del cepo se materializara de forma anticipada, protegiendo al inversor ante tasas en pesos elevadas. "El nuevo instrumento se presentó como una alternativa interesante en un mercado en transformación", aseguraron los expertos.

Finalmente, se concluyó que la introducción de los duales reflejó la continua adaptación del mercado financiero a las condiciones económicas actuales. Los expertos de GMA Capital manifestaron que la opcionalidad ofrecida, aunque relativamente barata en el momento, podía constituir una cobertura estratégica en caso de cambios repentinos en la política cambiaria. La operación se cerró en un clima de cautela, en el que el futuro se mantenía incierto debido a la proximidad de las elecciones y la posible salida de los controles cambiarios.

A cuánto cotiza el dólar blue hoy

El dólar blue se ubicó en $1205 para la venta y a $1185 para la compra.

Cómo operan los dólares financieros

En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación (CCL) se negoció a $1.202 (+0,2%), mientras que el dólar MEP operó en $1.194 (+0,3%).

Cuál es el precio del dólar oficial

  • La cotización del dólar minorista del Banco Nación cerró a $1074,50.
  • El dólar mayorista se negoció un promedio de $1055,55.
  • Por su parte, el dólar turista se ubicó en $1.396,85.

La brecha cambiaria

Por último, la brecha cambiaria entre el dólar mayorista y los diferentes tipos de cambio, se encuentra de la siguiente manera:

  • Blue: 14%
  • CCL: 14%
  • MEP: 13%
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