Crece la necesidad de cobertura tras viernes negro para acciones y bonos: qué recomiendan desde la City
El viernes negro que azoto al Merval y a los bonos soberanos en dólares, explicado en parte por el coletazo político generado en el Congreso, la incertidumbre internacional y una creciente especulación sobre la posible salida anticipada de Jerome Powell de la Reserva Federal, reactivó el temor a una nueva ola de volatilidad tanto local como internacional.
Desde la City porteña, distintas consultoras, sociedades de bolsa y gestoras de fondos comenzaron a delinear alternativas para proteger portafolios en pesos y en dólares sin resignar rendimiento.
Con foco en preservar capital real, evitar duration excesiva y minimizar la exposición política, el consenso del mercado gira en torno a instrumentos que combinan cobertura, liquidez y solidez crediticia.
Inversiones para el perfil conservador
Quienes priorizan la protección del capital por sobre el retorno tienen en el radar a los Bopreales. Emitidos por el Banco Central, pagaderos en dólares y con vencimientos dentro del mandato presidencial actual, se destacan por su baja volatilidad, su relativa liquidez y la ausencia de exposición electoral a largo plazo.
Tanto GMA Capital como First Capital y el equipo de renta fija de IEB los señalan como herramientas ideales para cubrirse ante eventuales tensiones en el mercado cambiario. En las últimas operaciones, los BPY26 y BPOD7 ofrecieron tasas cercanas al 2,1% – 7% anual, respectivamente, en moneda dura y con menor dispersión de volatilidad que los Globales tradicionales ya conocidos (AL30/GD30).
Otro segmento clave para el inversor conservador está en los bonos ajustados por CER de vencimiento corto y medio. Consultoras como Parakeet Capital, Criteria y Facimex Valores coinciden en que títulos como el TZXO5 y el TZX26 permiten seguir la evolución del índice de precios sin quedar atados a escenarios de tasa real excesiva. En un entorno de desinflación gradual, donde la inflación núcleo sigue cediendo y la economía opera con menores pass-through cambiarios, estos bonos ofrecen una tasa real efectiva que supera el 10% anual. En números:
• TZXO5 paga CER (inflación) + 9%
• TZX26 paga CER (inflación) + 11,1%
En paralelo, First Capital suma una capa adicional de cobertura crediticia al recomendar Obligaciones Negociables (ONs) corporativas con calificación AAA que, en las últimas licitaciones, estos papeles cortos arrojaron rendimientos de entre 7% y 8% anual en dólares, y se presentan como una opción atractiva para diversificar emisor y evitar la exposición soberana.
Para aquellos inversores más reacios a asumir cualquier tipo de volatilidad, IEB sugiere una alternativa aún más conservadora: su fondo money market IEB Corto Plazo B, que rinde aproximadamente 2,5% anual y garantiza disponibilidad inmediata. Pensado para cubrir necesidades operativas o preservar liquidez sin riesgo de precio, aparece como una herramienta táctica para momentos de mayor sensibilidad política y financiera.
Inversiones para quienes toleran algo de riesgo
Los perfiles moderados, que aceptan cierta exposición con vistas a mejorar el retorno real, encuentran en los bonos duales como el punto de equilibrio perfecto. Tanto Facimex como Criteria y Parakeet recomiendan papeles como el TTJ26 y el TTS26. Estos instrumentos pagan el mayor valor entre la tasa variable TAMAR y una tasa fija ya licitada.
En la misma línea, Facimex propone construir un portafolio balanceado que incluya Lecaps con vencimientos en el corto plazo —como las S31L5, S15G5 o S29G5—, combinadas con Bonos CER intermedios y Duales.
Según sus estimaciones, si la inflación mensual se mantiene por encima del 1,6% promedio, como marcan las expectativas del mercado, estos bonos podrían batir incluso a las tasas fijas actuales, sin exponerse al riesgo de rollover.
Otra estrategia moderada está en la deuda soberana corta. GMA Capital sugiere una rotación táctica hacia bonos como el AL29 y el AL30, que pagan en los próximos seis meses y permiten capturar tasas atractivas con riesgo algo contenido.
Inversiones para los más agresivos
Los perfiles con mayor tolerancia al riesgo apuntan a bonos de larga duration (vencimiento más largo), que podrían capitalizar una eventual normalización del frente externo. En ese sentido, tanto Facimex como IEB y GMA destacan a los Globales GD35 y GD41, que rinden cerca del 11,5% anual en dólares y cotizan con paridades cercanas al 65%.
Según IEB, un resultado electoral favorable podría generar una compresión de entre 100 y 150 puntos básicos en la curva, lo que implicaría un retorno total de entre 30% y 33% en estos bonos hacia fin de año.
Facimex suma a la lista de favoritos provinciales de largo plazo como el Córdoba 2032 (CO32) y el Santa Fe 2027 (SF27D), que aún conservan spreads elevados a pesar de sus sólidos fundamentos fiscales. En el universo corporativo, recomiendan Vista 2035, YPF Luz 2032 y Telecom 2031, todos con rendimientos en dólares superiores al 7% y bajo riesgo crediticio.
Desde Parakeet Capital, en tanto, se enfatiza el análisis de tasas reales implícitas, inflación esperada y comportamiento monetario. La ALyC observa que la inflación breakeven -que empata- entre CER y tasa fija comprimió hasta un 1,6% mensual y que el spread entre Boncer y Duales podría ampliarse si los bancos liquidan masivamente LEFI en julio.
Qué inversiones evitar y cómo prepararse
Si bien el mercado mantiene cautela respecto al frente cambiario, todas las consultoras coinciden en que la segunda mitad del año estará signada por riesgos políticos y tensiones preelectorales.
En ese marco, se desaconsejan bonos soberanos con cupones bajos y vencimientos posteriores a 2027 (como el GD46 o el AL41), acciones y ONs de empresas con números blandos y estrategias apalancadas sin cobertura.
Con tasas altas, inflación que sigue presente y un escenario político incierto, hay que elegir bien dónde invertir. Todos los expertos coinciden en lo mismo: armar carteras que cuiden el capital y permitan adaptarse. Bonos CER, Duales, Bopreales y ONs sólidas aparecen como las opciones más seguras. Hoy, más que ganar, el objetivo es no perder, y por eso la cobertura vuelve a ganar protagonismo en la City.