Dólar, bonos y acciones: cómo cerró el mercado pre elecciones y las proyecciones para el día después
Luego de un cierre de semana más tranquilo que lo esperado, los operadores del mercado local y de Wall Street comienzan a palpitar cómo será la jornada del próximo lunes luego de conocidos los resultados de la elecciones nacionales de medio término del domingo.
Los analistas de bancos y consultoras locales e internacionales concentran su atención en el día después de los comicios, enfocándose en una perspectiva a dos años de plazo, hasta la finalización del mandato presidencial de Javier Milei, quien daría a conocer en la mañana del lunes su nuevo gabinete.
Por ahora, de acuerdo a lo que pudo saber iProfesional de fuentes cercanas al Gobierno, los confirmados del staff actual son Karina Milei, Luis Caputo, Sandra Pettovello, Federico Sturzenegger Mario Lugones y Pablo Quirno.
Dólar, riesgo país, bonos y acciones pre elecciones
En relación al cierre de ayer de los mercados, hay que mencionar que el índice S&P Merval consiguió estabilizarse sobre la barrera psicológica de los 2 millones de puntos, en lo más alto desde finales de agosto, si lo medimos en pesos.
En tanto que medido en dólares, el panel de acciones líderes regresó al nivel más alto desde el 8 de septiembre, la sesión posterior al triunfo de peronismo en la elección legislativa bonaerense del 7 de septiembre.
El escenario más complejo fue para los bonos y el valor del dólar oficial mayorista aunque el BCRA logró que su valor cerrara por debajo de la banda superior de 1.496,50 pesos. El tipo de cambio oficial está contenido apenas debajo del límite superior de las bandas cambiaria, por efecto de las ventas de divisas del Tesoro de los EE.UU.
El dólar mayorista terminó con alza de 13 pesos o 0,9%, a $1.492 para la venta, contenido por ventas institucionales a solo 55 centavos del límite superior del esquema cambiario, que este viernes marcó los $1.492,55.
Por su parte, el dólar oficial minorista ganó diez pesos y finalizó a $1.515 para la venta en el Banco Nación. En la última semana esta cotización subió 40 pesos o 2,7 por ciento. El BCRA informó que en las entidades financieras el dólar minorista promedió $1.517,53 para la venta (baja marginal de 54 centavos) y $1.463,37 para la compra.
Tras haberse operado a un mínimo intradiario de $1.510, el dólar blue finalizó la operatoria a $1.525 para la venta, el mismo valor del jueves y a lo largo de la semana la divisa subio ganó 40 pesos.
Los títulos públicos en dólares descontaron 8% en promedio desde la derrota del oficialismo en el distrito bonaerense, con un riesgo país que saltó casi 200 puntos, hasta la zona de los 1.100 puntos básicos.
El volumen operado en el segmento de contado alcanzó los 752 millones de dólares y en la semana que acaba de finalizar el tipo de cambio mayorista subió 42 pesos, contra 30 pesos de aumento en la semana anterior.
Por el momento, el apoyo del Tesoro estadounidense no logró disipar las tensiones del mercado y el dólar alcanzó niveles máximos históricos nominales, una dinámica que que obligó al BCRA a desprenderse de reservas por unos 1.110 millones de dólares entre el 17 y el 19 de septiembre, y otros 45,5 millones de dólares el martes de esta semana, ya que la cotización tocó la parte superior la banda superior de flotación.
Según el experto Salvador Vitelli, el BCRA estaría vendido en unos 6.900 millones de dólares en el mercado de futuros para frenar los ataques especulativos que presionaron para una devaluación del peso.
Los negocios del dólar a futuro mostraron el viernes valores de $1.541,50 por dólar para noviembre y de $1.585,50 para las liquidaciones a fin de año, y en ambos casos por encima del techo de las bandas cambiarias oficiales.
Los números de la formación de activos externos del sector privados que tienen las consultoras y bancos coinciden que en solo ocho meses hubo un desarme de posiciones en pesos superior a los 17.400 millones de dólares y se basan en el dato de el último Informe de la Evolución del Mercado de Cambios del BCRA. Esta cifra casi duplica el comportamiento observado hasta octubre en otros años en los que se votaron legisladores y es incluso superadora de períodos con elecciones presidenciales.
En lo que se refiere a los resultados del próximo domingo, algunas encuestas sugieren que el oficialismo ganaría a nivel nacional por un margen cercano a 2 puntos, aunque existe mucha dispersión entre sondeos y perdería en territorio bonaerense por entre 5 a 8 puntos de diferencia.
"En nuestra visión, los precios de los activos descuentan un escenario más negativo, por lo que una victoria del peronismo de alrededor de 4 puntos sería neutral", dice el informe de Max Capital enviado a sus clientes ayer.
Posibles escenarios que resulten de las elecciones y sus proyecciones económicas
Por su parte, el banco americano Morgan Stanley planteó tres escenarios para después de los comicios del 26 de octubre, de acuerdo a los resultados.
El escenario 1 plantea que LLA supera a FP y obtiene entre 35% y 40% del voto nacional. EL escenario 2 proyecta que LLA pierde ante FP por pocos puntos y obtiene entre 30% y 35% del voto nacional. Por último, el escenario 3 plantea que LLA pierde por al menos 10 puntos porcentuales y obtiene entre 25% y 30% de los votos a nivel nacional.
En primer lugar, señala que "la política económica probablemente requerirá un ajuste después de las elecciones de medio término; reconstruir reservas de divisas debería ser el principal objetivo, más allá del paquete de apoyo de EE.UU.".
Ademas, el banco consideró que el Gobierno argentino necesitará gestar alianzas parlamentarias para avanzar en reformas laborales, fiscales y previsionales.
"Simulamos tres escenarios, todos bajo el supuesto de que el principal opositor, Fuerza Patria (FP), obtenga alrededor del 35% de los votos a nivel nacional, y que el respaldo a LLA oscile entre niveles inferiores al 30% alcanzado en las elecciones presidenciales de 2023 y hasta el 40%", detalló Morgan Stanley.
Para el este banco de Wall Street, las políticas económicas se vuelven más viables bajo este escenario. Las autoridades podrían avanzar hacia un régimen cambiario totalmente flotante una vez que se definan los parámetros del paquete de apoyo de EE.UU.".
Un "buen resultado electoral" contribuiría a contener la salida de dólares, aunque los ingresos seguirían limitados hasta que el tipo de cambio incentive a los exportadores de granos a liquidar inventarios o tras la cosecha de trigo, estabilizando así el mercado de cambios.
Se espera un ajuste ordenado, con un dólar oficial en torno a 1.700 pesos, coherente con una cuenta corriente equilibrada, asumiendo condiciones climáticas normales y rendimientos agrícolas promedio en el próximo ciclo.
"De ese modo, el BCRA implementaría un programa de acumulación de reservas, como sugirió el FMI en la primera revisión del último programa. Con el respaldo de EE.UU., Argentina recuperaría el acceso al mercado hacia junio de 2026", considera Morgan Stanley.
Según esa institución, el tipo de cambio podría estabilizarse entre 1.800 y 2.000 pesos, lo que permitiría un pequeño superávit en la cuenta corriente (aproximadamente 0,5% del PIB), pese a menores ingresos financieros incluso con apoyo de EEUU.
Esquema cambiario y respaldo de Estados Unidos post elecciones
El último informe de Invertir en Bolsa (IEB) destaca que "evidentemente, el análisis de las variables macro está sujeto al resultado de la elección. Siguiendo con el escenario base, todo indica que la demanda de pesos se recuperará en sintonía con una menor demanda de cobertura y un paulatino aumento de la actividad, acompañada del efecto estacional de fin de año. Otra forma de verlo es que tanto los pesos como los títulos públicos serán más atractivos al despejarse la incertidumbre fiscal, ya que la capacidad de veto aseguraría el mantenimiento del ancla fiscal".
Por su parte. un informe de GMA Capital señala que "el microclima financiero de Argentina llega a una elección de medio término con mucho nerviosismo y cubriéndose de lo peor. De todas formas, entendemos la ansiedad. Es que a partir de la semana que viene se juega otro partido, y como venimos sosteniendo, el resultado del domingo tendrá cierta incidencia en el nuevo camino a recorrer".
El informe señala que "lo cierto es que el mercado descuenta modificaciones el esquema cambiario y monetario. Esta afirmación está basada en lo que dicen las curvas: el tipo de cambio breakeven a diciembre con Lecaps se encuentra cercano a los $1.600, mientras que aquel a mediados de febrero supera los $1.700. Estos son los valores que dejan la estrategia de carry trade neutra. Y como están por encima del techo proyectado de la banda, implicaría que los bonistas esperan calibraciones en el valor del dólar ofcial".
Entre los riesgos futuros que señalan bancos y consultoras locales e internacionales está la figura del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scot Bessent.
Algunos analistas sostienen que el riesgo reside en la credibilidad del propio Bessent. El objetivo declarado del swap de monedas que es evitar el derrumbe del peso, podría verse comprometido por el hecho de que la moneda argentina, según los principales indicadores, de acuerdo a algunos analistas estaría sobrevaluada en hasta un 20 por ciento.
"Si el paquete de ayuda financiera fracasa en estabilizar el mercado argentino, el golpe no solo lo sentirá Milei, sino también Washington", expresa el informe de Morgan Stanley y además destaca que "la incertidumbre de cara a las elecciones del domingo y la posibilidad de que el eslogan Make Argentina Great Again termine cuestionando, más que fortaleciendo, la propia imagen del secretario del Tesoro del Gobierno de Donald Trump".
Por último el banco estadounidense Wells Fargo expresó en su último informe sus dudas sobre el actual esquema cambiario argentino y mencionó los posibles errores que a su criterio se podrían cometer al respecto luego de las elecciones de medio término y además vaticinó cómo seguirá el respaldo del Tesoro norteamericano.
En ese sentido, vale recordar que ante la creciente demanda de divisas que pone en jaque al esquema cambiario antes de las elecciones, EE.UU. y el BCRA confirmaron esta semana un swap por 20.000 millones de dólares, en el marco de un acuerdo para estabilizar el tipo de cambio.
Bajo ese contexto, Wells Fargo indicó en su último reporte: "Esperamos un mayor grado de depreciación del peso en adelante respecto de nuestras proyecciones anteriores. El respaldo del Tesoro de Estados Unidos puede otorgar algunos días de estabilidad -o incluso de fortaleza- al peso argentino, pero no creemos que dicho apoyo sea una política cambiaria sostenible en Argentina".
El informe explica que "el acceso a la línea de swap estará disponible, aunque defender una moneda sobrevaluada después de las elecciones parece una política cambiaria inadecuada".
Además, afirma que "la Argentina no se ha caracterizado por decisiones tecnocráticas consistentes, pero estimamos que el peso será dejado flotar libremente, con solo intervenciones cambiarias esporádicas por parte de Estados Unidos".
Según las proyecciones de la entidad, el peso registraría la mayor depreciación entre todas las monedas del mundo hacia fines de 2026, del 29,2%.
Según el Financial Times, la intervención del Tesoro estadounidense en la Argentina pretende no solo brindar apoyo directo a la economía argentina, sino también contrarrestar la creciente influencia de China en América Latina y asegurar el acceso a los minerales estratégicos del país sudamericano. Sin embargo, la medida ha generado resistencia tanto en el ámbito doméstico estadounidense como internacional.
Steve Bannon, ex estratega jefe de la Casa Blanca, señaló ayer que "entre los seguidores de Donald Trump casi la mitad rechaza el plan, ya que lo consideran más orientado a salvar a Wall Street que a fortalecer a un aliado regional. Esta confusión -afirmó Bannon- proviene de la falta de claridad en torno a la importancia estratégica de Argentina y el vínculo con Milei".
"Los escépticos hablan ya del acrónimo 'Mada' -Make Argentina Default Again-, planteando si realmente Milei podrá evitar una crisis financiera e incluso con el paquete estadounidense y un cuantioso préstamo adelantado del FMI, el temor a un incumplimiento aún flota en los mercados", expresó el ex estratega de Donald Trump.