• 4/12/2025
ALERTA

Golpe final al turismo online: ¿por qué la nueva IA de Google destrona a Despegar y TurismoCity?

Google lanzó un "agente de viajes" con IA que amenaza a Despegar y TurismoCity. Te arma el viaje, caza ofertas y hasta reserva.
27/11/2025 - 10:50hs
viajes

Planificar un viaje siempre fue un ejercicio agotador: comparar precios, abrir pestañas, revisar fechas, mirar mapas, volver atrás, pensar si conviene esperar o comprar ya mismo. Esa experiencia está llegando a su fin. Con el avance de Gemini 3, la nueva IA integrada en Google Travel, el gigante tecnológico dejó de ser un simple buscador para convertirse en un agente de viajes completo que entiende lo que querés, analiza precios, arma itinerarios y hasta ejecuta algunas reservas. El turismo global, acostumbrado a depender de intermediarios, acaba de entrar en otra era.

La novedad sacudió a todo el sector porque esta herramienta no solo responde, sino que decide. Mientras Despegar o TurismoCity te muestran opciones, Google empieza a ofrecer soluciones cerradas, comparaciones inteligentes y optimización automática de rutas. Para el usuario promedio, representa más comodidad y más ahorro. Para las empresas del sector, es un golpe directo al corazón de su negocio. Las funciones que antes eran exclusivas de las agencias ahora están integradas dentro de la búsqueda más usada del mundo.

El verdadero impacto está en la experiencia. Lo que antes implicaba horas, ahora se resuelve en segundos: escribir "viaje barato a Europa en mayo" y recibir un itinerario completo, con distancias reales, tarifas históricas, alertas de precios y opciones alternativas. La combinación entre Google Maps, Google Flights y Gemini 3 genera un ecosistema donde el usuario prácticamente no necesita salir de Google para decidir. La plataforma aprendió a ser más que un buscador; ahora actúa como un asistente con criterio propio.

Por eso Wall Street ya mira este movimiento como otro paso de Google hacia la integración total: dominar búsqueda, mapas, videos, productividad y, ahora, planificación de viajes. Alphabet —la empresa matriz— acumula un fuerte avance en 2025, impulsado justamente por las herramientas de IA que están transformando industrias enteras. Para los inversores, es el signo perfecto de lo que viene: menos intermediarios, más automatización y un futuro donde planear un viaje será tan simple como enviar un mensaje.

La revolución del viaje digital: cuando Google dejó de buscar y empezó a decidir

La nueva función que provoca temblores en el sector se llama Agentic Booking, el primer paso de Google hacia una experiencia de reserva autónoma. Antes, Google mostraba precios y redirigía al usuario a terceros. Ahora, la IA analiza preferencias, detecta disponibilidad, sugiere combinaciones eficientes y, progresivamente, puede gestionar la operación de compra con mínima intervención humana. Es una transformación profunda del rol de Google dentro del turismo.

A esto se suma la expansión de Canvas, una pizarra virtual donde el viajero puede mezclar ideas, ciudades, hoteles y actividades. La IA no solo ordena: propone. Si escribís "quiero un viaje barato de dos semanas por Italia", no aparecen links azules; aparece un recorrido armado día por día, con recomendaciones, mapas y costos estimados. Para el usuario, es como tener un agente de viajes personal sin pagar comisión. Para las agencias, es perder el control del proceso inicial.

Otro salto importante es la función de Ahorro Agresivo, que identifica oportunidades, errores tarifarios y caídas bruscas de precio que antes solo detectaban expertos en foros. Esta herramienta democratiza el acceso al precio realmente más conveniente, y lo hace antes de que desaparezca. Con un solo clic, el usuario puede activar notificaciones inteligentes que alertan cuando una ruta está en "precio mínimo histórico", una ventaja que complica aún más a las plataformas tradicionales.

Todo esto está impulsado por Gemini 3, que analiza millones de combinaciones y sugiere cuándo conviene comprar. En mercados seleccionados incluso ofrece devoluciones si el precio baja después de la compra. El miedo a "comprar caro" —un clásico del turista argentino— se reduce drásticamente. Y con esa ansiedad eliminada, Google se convierte no solo en buscador, sino en aliado financiero del viajero.

Cómo usar la nueva IA para viajar más barato (y sin intermediarios)

La clave para aprovechar estas funciones es cambiar la manera de buscar. Ya no sirve escribir "Buenos Aires - Madrid, marzo". Lo correcto es usar lenguaje natural: "viajar a España por menos de 800 dólares en abril". Con esa frase, Google despliega opciones exactas, filtradas por precio, clima y rutas eficientes. No hay suposiciones ni prueba y error: la IA transforma tus palabras en escenarios concretos.

Una vez elegido un destino, el paso más importante es activar el seguimiento de precios, especialmente en "Cualquier fecha". Esta función permite que Gemini detecte variaciones reales y te avise únicamente cuando aparece una oportunidad verdadera. Se eliminan así las alertas inútiles y se priorizan las caídas importantes, algo especialmente útil para quienes no tienen flexibilidad total para viajar.

Los filtros avanzados son otra herramienta clave. Muchos viajeros ignoran que pueden filtrar no solo por aerolínea y escalas, sino por equipaje permitido, emisiones de carbono o políticas de reembolso. Estos detalles suelen encarecer el precio final, y Google ahora los destaca de forma clara. Además, la plataforma puede sugerir "hacker fares": combinar aerolíneas distintas para obtener el precio mínimo sin que el usuario tenga que analizarlo manualmente.

Finalmente, antes de comprar, es fundamental revisar el método de pago. Aunque Google muestra precios finales estimados, el usuario argentino debe confirmar si el pago se procesará en pesos o dólares, ya que eso modifica impuestos e impuestos PAIS. Aun así, la precisión del sistema reduce mucho el riesgo de sorpresas, ofreciendo una experiencia más transparente que la de muchos buscadores tradicionales.

Despegar y TurismoCity en alerta: el nuevo enemigo se llama Gemini 3

La diferencia clave entre Google y las agencias tradicionales es el modelo de negocio. Google es un metabuscador, cuyo objetivo es organizar información y derivar tráfico. Despegar y TurismoCity son agencias: intermedian, cobran comisiones y dan postventa. Esa postventa —teléfono, chat humano, gestión de cancelaciones— es lo que las mantiene vivas frente a la automatización de Google.

Pero el diferencial histórico de las agencias está siendo erosionado. Con Canvas, Agentic Booking y Gemini 3, Google se mete directamente en la parte más valiosa del proceso: la planificación. Si el usuario ya no entra a Despegar o TurismoCity para comenzar su búsqueda, el costo de adquisición de clientes para ellas se dispara. Si Google "resuelve todo" antes de derivar, las agencias pierden su rol protagónico.

Aún así, las plataformas locales conservan algunas ventajas. Despegar tiene acuerdos financieros, cuotas, promociones bancarias y soporte local en español. TurismoCity, por su parte, es muy fuerte en rastrear ofertas de agencias argentinas que Google a veces ignora. Pero la tendencia es clara: Google está ganando el primer paso del viaje, y quien domina el primer paso domina casi todo el proceso.

Lo que empieza a preocupar en el sector no es la competencia directa, sino la invisibilidad. Si el usuario no sale de Google, el buscador se queda con la experiencia completa. Y cuando eso sucede, las plataformas pierden tráfico, ventas y relevancia. El juego no es solo por precio; es por la relación con el cliente. Y en ese terreno, la IA de Google avanza más rápido.

Invertir en Google desde Argentina

Para quienes quieren estar del lado del ganador, la vía más simple es invertir en Alphabet (GOOGL) a través de CEDEARs. Este instrumento permite comprar la acción en pesos, con cobertura del dólar Contado con Liquidación (CCL). Si sube el CCL, el CEDEAR sube. Si sube la acción en EE.UU., también.

Además, Alphabet es una de las empresas más sólidas del planeta. Lidera publicidad digital, computación en la nube, hardware de IA, y ahora también turismo automatizado. La empresa avanza fuerte en verticales donde recién está empezando a monetizar y, por eso, muchos inversores la consideran una apuesta estratégica para los próximos años.

La operación es simple: abrir una cuenta comitente en una ALyC, fondearla con pesos y buscar el ticker GOOGL. El ratio de conversión permite entrar con montos bajos, incluso desde una sola unidad. Para quienes buscan dolarizarse de forma indirecta, es uno de los métodos más eficientes.

En 2025, Alphabet acumula un fuerte avance anual, impulsado por la adopción masiva de Gemini 3 y por la mejora de sus ingresos en búsquedas con IA, publicidad y nube. El mercado interpreta esta etapa como el inicio de un nuevo ciclo para Google, donde la inteligencia artificial no es una promesa, sino una herramienta de monetización concreta.

Conclusión

Google acaba de encender la chispa de una revolución en el turismo. Su IA no solo encuentra precios: arma itinerarios completos, caza oportunidades, sugiere cuándo comprar y empieza a reservar por vos. Para el usuario, es una bendición. Para las agencias, una señal de alarma. Para Wall Street, una confirmación de que Alphabet está capturando mercados enteros con cada nueva actualización tecnológica.

El turismo online está cambiando y la batalla ya no es por tener el mejor precio, sino por tener al usuario desde el primer segundo. En ese terreno, Google ya tomó la delantera. Y para los inversores, entender esa tendencia puede marcar la diferencia entre ver el cambio… o aprovecharlo.