El Dow Jones opera al alza, siguiendo la tendencia global
Las acciones estadounidenses abrieron al alza el lunes, con los inversionistas más optimistas por la posibilidad de que la Reserva Federal (Fed) vuelva a tomar decisiones como la del viernes en que bajó la tasa de descuento.
El promedio industrial Dow Jones subía 28,04 puntos, o un 0,21 por ciento, a 13.107,12 unidades. El índice Standard & Poor's 500 trepaba 1,47 puntos, o un 0,10 por ciento, a 1.447,41. El índice compuesto Nasdaq ganaba 6,68 puntos, o un 0,27 por ciento, a 2.511,71 unidades.
Los funcionarios y los inversionistas estaban más tranquilos el lunes, ya que la acción de la Reserva Federal estadounidense llevó calma a los agitados mercados financieros, aunque los expertos advertían que era muy pronto para descartar una crisis del crédito. Mientras las bolsas europeas subían, la ministra francesa de economía Christine Lagarde dijo que ella creía que los mercados del crédito ya pasaron su peor momento. Pero también sostuvo que algunos fondos aún podrían sufrir problemas.
"Pienso que hemos dejado atrás lo peor de la crisis. No excluyo la posibilidad de que, particularmente en Estados Unidos, algunos fondos puedan encontrarse en dificultades, pero esto es un fenómeno clásico de las finanzas estadounidenses, que suelen pecar con excesos", según lo consigna Reuters.
El banco central alemán, el Bundesbank, dijo que el panorama para la economía mundial aún era positivo a pesar de la reciente tensión de los mercados, que reflejó como una "normalización bienvenida", aunque haya sido abrupta.
"Sin embargo, los riesgos para la economía global se han incrementado con el proceso de corrección en el mercado de las propiedades de Estados Unidos", dijo el banco central en su reporte mensual.
Los mercados de acciones de Asia repuntaron fuertemente el lunes después de que el viernes la Reserva Federal estadounidense redujera la tasa de descuento que aplica a sus préstamos directos a las entidades financieras, en medio punto porcentual, a 5,75 por ciento.
El lunes, el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio ganó 3,0 por ciento, el mayor aumento diario en 13 meses, recuperándose de la caída del viernes, que había sido la mayor en un día en casi seis años.
Las acciones europeas también mostraban avances. El índice FTSEurofirst 300 de acciones europeas en general exhibía alzas de 0,7 por ciento. La crisis del crédito se ha agudizado en semanas recientes, a medida que los incumplimientos de pagos en el mercado hipotecario de baja calificación de Estados Unidos, conocido en inglés como el segmento "subprime", se extiende a los bancos.
Esto ha alimentado temores de inestabilidad financiera y un corte del crédito, lo que llevó a que los bancos centrales inundaran de fondos los mercados de dinero.
En Europa, una portavoz de la Comisión Europea expresó el beneplácito de este organismo ante la aparente calma de la turbulencia del mercado después de la intervención de la Fed. No obstante, los bancos centrales seguían en alerta el lunes.
De cara a las turbulencias financieras, los inversores han alterado fuertemente sus proyecciones para la política monetaria. Ahora, se prevé que la Fed rebajará su meta para la tasa de interés clave de los fondos federales, y los analistas ya no descuentan un nuevo aumento de tasas del Banco de Inglaterra.
El lunes, el banco central australiano volvió a inyectar una cantidad considerable de liquidez en el sistema bancario, para atenuar la presión alcista sobre alguna tasas de interés de corto plazo.
El mercado de dinero interbancario de la zona euro seguía más tranquilo. Los operadores esperaban el anuncio del Banco Central Europeo de las 1330 GMT sobre su subasta semanal de refinanciamiento.
Son pocos los inversores que confían que se hayan arreglado todos los problemas del mercado de hipotecas de Estados Unidos, por lo que existen temores de que si se producen nuevas turbulencias financieras, puedan afectar al crecimiento económico.
"La acción de la Fed ha dado un impulso psicológico. Pero es una cosa de corto plazo, no aborda la cuestión de largo plazo, el problema estructural de la desaceleración del sector de la vivienda en Estados Unidos", dijo Song Seng Wun, economista de CIMB en Singapur.