Invertir en Estados Unidos: claves para no cometer errores y evitar pagar más impuestos
Para crecer exponencialmente en los negocios es necesario trabajar con una estrategia apuntando hacia los mercados internacionales más grandes. La globalización impulsa las oportunidades con escala global, algo que todo empresario o emprendedor debería aprovechar.
Estados Unidos es hoy la mayor potencia económica global y, sin dudas, en los próximos años se consolidará como un aliado estratégico de la Argentina por las actuales relaciones bilaterales y el acuerdo comercial de libre comercio anunciado recientemente.
La actualidad se presenta como una situación única para los argentinos. No obstante, realizar negocios en el exterior no es algo simple ni sencillo, y demanda un análisis serio con el objetivo de evitar problemas legales y fiscales, tanto en la Argentina como en el exterior.
Elegir la sociedad correctamente
Por empezar, los Estados Unidos tiene una manera de hacer negocios diferente a lo que sucede en la Argentina, con otra idiosincrasia y visión, más ágil y dinámica. Por eso, para aprovechar todas las ventajas que ofrecen las leyes modernas y promercado, se debe prever la sociedad que se elegirá (lo que los abogados llamamos "vehículo jurídico").
Existen varias opciones para elegir al momento de comenzar un negocio, aunque las Limited Liability Company (LLC) y las Corporation (indistintamente denominadas Corp o Inc) son las estructuras más elegidas.
Las primeras son consideradas por el organismo de recaudación estadounidense (la Internal Revenue Service o IRS) como entidades transparentes que en inglés se las conoce como "pass-through entity".
El dato clave es que estas sociedades no pagan impuestos, sino que los ingresos se imputan directamente a los socios y son ellos quienes deben presentar las declaraciones juradas de manera personal.
En cuanto a la gestión de la empresa, son más fáciles de tramitar. No requieren de presentación de balances formales y auditados, tampoco un directorio, actas societarias y pueden tener un solo socio.
Por todos estos motivos, las LLC son ideales para inversiones inmobiliarias pequeñas, freelancers, profesionales o negocios iniciales, y posiblemente sean las más conocidas por los inversores de todo el mundo.
Por su parte, las Corp tienen una carga tributaria mayor, ya que pagan el impuesto corporativo y luego, cuando distribuyen las utilidades a los socios, también los dividendos quedan alcanzados por el gravamen.
Además, deben tener directorio, emitir acciones y obligaciones formales más estrictas. Por esto, son óptimas para negocios que buscan escalar con captación de capital público o negocios de gran envergadura.
Real state e impuestos
El real state es otra de las alternativas que existen en el mercado norteamericano y son muchos los argentinos que deciden invertir para diversificar su patrimonio y obtener rentas en dólares comprando inmuebles.
Pero ojo. Existen dos impuestos muy onerosos que recaen sobre estas operaciones que hay que tener muy presentes: el gift tax y estate tax. En el caso de extranjeros, estos tributos se aplican a las personas que no tengan residencia, pero sí bienes.
Si bien el primero grava las donaciones y el segundo las sucesiones, lo cierto es que ambos tienen una alícuota 40% sobre el valor de mercado de la propiedad, con una exención de tan solo 60.000 dólares.
Esta cifra contrasta fuertemente con la exención para ciudadanos norteamericanos, cuyo mínimo asciende a u$s13 millones. Por eso, es clave comprender que quien adquiere un inmueble a su nombre puede exponerlo a él y a su familia a una alta carga de impuestos.
Lo bueno es que existen mecanismos legales que permiten mitigar o eliminar el pago de estos impuestos, como los trusts, que son contratos muy utilizados para la planificación patrimonial, protección de activos y optimización fiscal.
¿Qué son los trust?
Los trust no son ni una sociedad, ni una persona jurídica, ni un fideicomiso con las reglas que conocemos en la Argentina. Es un acuerdo legal entre las partes que puede tener efectos muy diferentes dependiendo de su diseño y organización.
Una manera de ahorrar impuestos es constituir un trust de modo tal que el propietario original de los bienes -denominado grantor o settlor- transfiera dichos activos para que sean administrados por un tercero independiente -el trustee-.
Al momento en el que fallece el grantor, la titularidad de esos bienes se distribuye a los beneficiarios designados. Este tipo de situaciones pueden variar dependiendo de las cláusulas que contenta el contrato, pero evitan el pago de impuestos tan gravosos.
Los riesgos de FATCA
Por último, no hay que olvidar que existe un acuerdo de intercambio de información financiera entre la Argentina y los Estados Unidos denominado Foreign Account Tax Compliance Act (FATCA) que está operativo desde septiembre de 2024.
FATCA es una ley federal que contiene un acuerdo marco para suscribir con países que establece el intercambio automático y reciproco de información, con el objetivo de mitigar la evasión tributaria.
Como es de esperar, las operaciones de inversores argentinos pueden ser informadas si se cumplen determinados requisitos, por lo que se debe considerar que muchos de los negocios comentados se encuentran sujetos a estas normas.
El mecanismo es simple: el IRS recaba información y la envía a ARCA, lo cual puede generar inspecciones y riesgos fiscales en la Argentina en los casos en que las inversiones, sociedades o bienes situados en Estados Unidos no hayan sido correctamente declarados.
Por ese motivo, es importante conocer bien qué operaciones son las que quedan dentro de la órbita de FATCA para evitar sobresaltos a la hora de presentar las declaraciones juradas de Ganancias y Bienes Personales ante el fisco nacional.
La expansión internacional es un paso importante para la vida económica de cualquier empresa o persona y las oportunidades que brindan las conexiones existentes son mucho más amplias que las de hace un lustro atrás.
Sin embargo, queda claro que sin el asesoramiento profesional que permita una planificación fiscal, legal y patrimonial adecuada, todo puede naufragar y generar dolores de cabeza.
Por Daniel Ricardo García, socio de Lex Tax Advisory