La devolución del pago en Ganancias se hará efectiva recién en marzo próximo
El reciente anuncio de los cambios en Ganancias dejó un saldo favorable para unos 242.000 trabajadores que al dejar de pagar el tributo verán el impacto de las modificaciones directamente en su bolsillo mes a mes.
No obstante, para recibir la devolución de los importes retenidos en exceso deberán esperar hasta marzo próximo. Así lo confirmaron fuentes del Gobierno a iProfesional.com al asegurar que "los trabajadores que quedaron por debajo de los nuevos pisos de tributación podrán cobrar sus reintegros sólo cuando las empresas les efectúen la liquidación final del Impuesto a las Ganancias del año anterior".
Por lo tanto, como dicho mecanismo se realiza en febrero de cada año, el monto extra llegará a los trabajadores recién en marzo próximo al momento de cobrar el salario del mes anterior.
En este marco, el diferimiento afectará a los empleados que se encuentran entre el anterior límite de tributación y el nuevo piso dado a conocer la semana pasada. Es decir, que el retraso involucrará a los trabajadores casados con dos hijos cuyo sueldo mensual neto oscile entre $4.577 y $5.553 y, en el caso de los trabajadores solteros, aquellos con salarios netos entre $3.346 y 4.015 pesos.
Si bien las fuentes consultadas explicaron que el diferimiento se debe a cuestiones meramente administrativas; iProfesional.com pudo constatar que la decisión oficial no es casual, considerando que el retraso contribuiría a preservar, en alguna medida, la ya deteriorada "caja fiscal". De hecho, una señal de alarma es que -en lo que va del año- el superávit fiscal fue reforzado con la ayuda del Banco Central de la República Argentina (BCRA), lo cual es clave considerando que el modelo económico se apoya en la existencia de superávit gemelos -tanto comercial como fiscal- .
Clara muestra de ello es que, durante el primer semestre del año el "auxilio" del Central alcanzó los $2.500 M en concepto de adelantos de utilidades, mientras que en igual período de 2007 tales fondos extras sólo llegaban a $1.000 M. En consecuencia, de producirse la devolución de los cerca de $500 M de Ganancias retenidos "en exceso", el superávit fiscal de este año se vería afectado negativamente, lo cual explica el motivo por el cual se deberá esperar a marzo de 2009.
Esquema de devolución y efectos para los trabajadores
De acuerdo a los datos confirmados por fuentes oficiales, el esquema de devolución sería el siguiente:
- Para quienes dejen de pagar Ganancias a partir de los nuevos pisos de tributación: deberán esperar hasta marzo próximo para recibir el reintegro en concepto de lo retenido en exceso hasta agosto pasado.
- En caso de que sean trabajadores que pasen a pagar menos: el Gobierno implementará un sistema de compensaciones que, de acuerdo a su salario, tributarán menos impuesto en los restantes meses del año.
De esta manera, lo que busca el Gobierno es acotar el alivio a ambos grupos de asalariados para perjudicar lo menos posible el superávit fiscal.
Los efectos se traducen en que el primer grupo de asalariados percibirá un ingreso de bolsillo mayor en los restantes meses del año 2008 -al dejar de pagar Ganancias-, pero deberá esperar seis meses para cobrar lo retenido en exceso. En el segundo caso, si bien seguirán soportando el peso en Ganancias, se beneficiarán con la implementación de un sistema de compensaciones en base al monto ingresado en exceso.
Para tener una idea del importe que los trabajadores recibirán recién en marzo del año próximo, conviene recordar, a modo de ejemplo, que a un trabajador soltero que gana $4.000 netos mensuales le deberán devolver $330, que es lo que le retuvieron hasta agosto.
Las claves de los nuevos cambios
El Gobierno anunció la semana pasada el aumento del piso salarial a partir del cual se empieza a pagar Ganancias. En este sentido, dispuso que para los trabajadores solteros el nuevo límite se ubica en $4.015 netos mensuales mientras que para los casados con dos hijos será de 5.553 pesos.
Al ser Ganancias un impuesto anual, la suba del mínimo no imponible y de las deducciones de Ganancias rige de manera retroactiva al primero de enero pasado.
Por lo tanto, las compañías deberán recalcular los valores descontados a los empleados y devolver lo que retuvieron en exceso.
Vale destacar que hasta el momento, pagaban Ganancias los trabajadores solteros que, después de los descuentos por jubilación y obra social, ganaban más de $3.346 -incluido el aguinaldo-. Ahora pasa a $4.015. En el caso de los empleados casados con dos hijos el límite pasa de $4.577 a 5.553 pesos.

Por ejemplo, a un empleado soltero que gana $6.000 de bolsillo, hoy le retienen $5.235 por año. En adelante, le descontarán sólo $3.402 anuales.
No obstante, las medidas se completarán cuando el Gobierno busque, a través del proyecto de Presupuesto 2009, -que será enviado al Congreso el 15 de este mes- corregir las distorsiones que provoca la llamada "tablita" de Machinea al calcular el Impuesto a las Ganancias que pagarán los sueldos medios y altos.
A su vez, se prevé aumentar la presión fiscal sobre los mayores salarios elevando del 35 al 37% la alícuota máxima del impuesto a aplicar.
De aprobarse la iniciativa, las restantes modificaciones comenzarán a regir a partir del 1° de enero de 2009.
Actualmente, los trabajadores que ganan más de $240.000 netos anuales, pagan $28.500 más una tasa del 35% sobre el monto que supera los 120.000 pesos. A partir del cambio, se creará una nueva escala y los que ganen más de $240.000, pagarán una suma fija de $70.500 más un 37% sobre el excedente de 240.000 pesos.
Con respecto al esquema que limita el cómputo de las deducciones personales, actualmente a un trabajador que gana $7.000 netos le queda un ingreso de bolsillo de $6.521, después de soportar el Impuesto a las Ganancias. Y quien gana $7.001, cobra $ 6.045, es decir unos $476 menos.
Por ello, a partir del año próximo, el plan es que se beneficien quienes tengan ingresos después de los descuentos de jubilación y salud, superiores a $7.000 por mes o $91.000 anuales, que es donde empieza a operar la tablita.

Para reducir progresivamente el impacto del impuesto se creó una fórmula especial:
- Quien gana $91.000 anuales hoy pagaría $2.132 de Ganancias. Pero si pasa a $92.000, el impuesto sube a $10.157 anuales.
- A partir de 2009, el asalariado que gane $91.000 seguirá pagando $2.132, pero el de $92.000 pagará $2.438 anuales.
Así, se mantiene el principio por el cual quien gana más paga más impuestos, pero conservará un sueldo de bolsillo superior.
De esta forma, puede concluirse que el Gobierno con los cambios apunta a mantener el principio de "progresividad" del Impuesto a las Ganancias, de modo de paliar así los efectos no deseados del tributo, que conspiran contra el aumento de sueldos y favorecen la subdeclaración de ingresos con el fin de eludir la cuestionada "tablita".
Hernán Gilardo
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