Por qué la dueña de Mantecol retoma su plan de expansión regional

Tras haber logrado sortear un conflicto gremial con un grupo ligado a partidos de izquierda que hasta llegaron a cortar el acceso a su planta, Georgalos retomó sus operaciones con el lanzamiento de una línea de productos que incorporó a sus activos.

En realidad, la dueña de la tradicional marca Mantecol desembarcó en una nueva categoría bajo el concepto "Georgalos activa el modo helado", con la producción inicial de 1,5 millones de unidades, negocio que le demandó una inversión cercana a u$s1,5 millones.

De esta forma, comenzó a competir en este segmento con sus marcas más icónicas como son Mantecol, Palitos de la Selva, Flynn Paff, Toddy y Full Maní, que se venden en kioscos, tiendas de cercanía, supermercados y también a través de los canales digitales.

La estrategia forma parte de un plan de expansión que la compañía que dirige Guillermo Rimoldi lanzó en mayo pasado y que se apuntala en una inyección de capital de aproximadamente u$s100 millones a partir de diferentes alternativas para poder recaudar esos fondos en los próximos años.

Con ese objetivo, el directorio de Georgalos contrató al Banco Santander para explorar esas variantes de fondeo, incluyendo alianzas, joint ventures o hasta la incorporación de nuevos socios sin que ese proceso tenga en cuenta vender nuevamente Mantecol.

Tiempos difíciles para Georgalos

Sin embargo, la empresa había decidido suspender esa estrategia debido al contexto inestable que mostraba el país antes de las elecciones del 26 de ocutbre pasado. En ese marco, puso en "stand by" su plan, por lo menos hasta que las señales de distensión se consoliden y el gobierno del presidente Javier Milei pueda reperfilar de manera positiva y constante el escenario macro de la Argentina.

Pero, luego de que los mercados reaccionaron positivamente al triunfo del Gobierno, y con una economía más calma, sus ejecutivos decidieron volver a trazar el camino de obtener fondos para financiar la estrategia de crecimiento doméstico y de regionalizar Georgalos,

De todos modos, desde la empresa consideran que los plazos deben ser más cautos a la hora de analizar las diferentes variantes para concretar esos objetivos.

De este modo, es poisble que se retome la iniciativa de obtener fondos frescos a partir de un nuevo endeudamiento que apalanque futuras compras de activos, en especial en países que forman parte de la región del Pacto Andino y del Cono Sur, que se había congelado a la espera de un contexto más sano tanto desde el punto de vista político como económico de la Argentina.

En ese sentido, otra de las alternativas que ahora se pusieron de nuevo en el tapete es la de abrir el capital de Georgalos a la bolsa para tomar fondos del mercado de capitales suficientes como para lograr esa inserción regional.

En concreto, los ejecutivos de la empresa habían decidido esperar para poner en marcha cualquiera de estos dos planes como son los de vender parte del capital de la empresa a un nuevo socio estratégico, o de prepararla para cotizar parte de sus acciones en el mercado bursátil.

La dueña de Mantecol busca despejar la incertidumbre

En la empresa entienden que la incertidumbre política causó un revuelo económico que desacomodó algunas variables de la macro economía que causaron efectos negativos en parte del contenido de ese proceso de expansión, que también se ve perjudicado por el escenario internacional de mayor inestabilidad.

A partir de un regreso a la normalidad de los mercados, se comenzó a tomar el proceso "con más calma" hasta que "todo se acomode" en especial si se tiene en cuenta que parte de la estrategia depende de tomar endeudamiento o de buscar capital fresco.

En la actualidad, las condiciones de mercado para transitar por ese camino han cambiado al punto que, tras haber lanzado dos exitosas series de Obligaciones Negociables (ON), la empresa también se tomará su tiempo para volver a emitir este tipo de títulos.

Volver al plan original 

Pero en la empresa aseguran que el freno fue temporal y que la incorporación de un nuevo accionista se retomará a la brevedad debido a que la estrategia contempla sumar un partner externo para encarar el proceso de regionalización y de incorporación de tecnología de punta para poder llevar a la empresa a otro nivel de productividad.

La idea se complementa con sumar una o varias empresas extranjeras que le permitan a Georgalos pisar fuerte en otros mercados de la región y, al mismo tiempo, modernizar sus actuales plantas locales para ponerlas a la vanguardia para competir con el ingreso de competencia importada, que cada vez es más creciente y notoria.

Además, desde Georgalos se piensa en cuidar la salud financiera de la compañía que, en volúmen, logró crecer en ventas con relación al año pasado, aunque con una caída de su rentabilidad, en especial la del negocio.

Esto obliga a sus ejecutivos a "tener que hacer los deberes puertas adentro, ajustar las cuentas a esa rentabilidad propia del negocio, ya que el resto de las ganancias son propias del proceso inflacionario que todavía atraviesa la Argentina.

En este sentido, se considera que la inflación siempre oculta la ineficiencia de las empresas y que se hace más sencillo no buscar esas falencias teniendo en cuenta que la rueda inflacionaria permite abaratar los fondos que se pagan con las tasas, pero generando que la rentabilidad caiga dos o tres puntos como consecuencia de no ajustar los valores de los productos a la realidad del mercado.

El plan de tres pasos de Georgalos

Pero, si bien el escenario macro ha cambiado desde que Georgalos anunció el lanzamiento de su plan de crecimiento doméstico y regional, desde la empresa sostiene que se trata de una decisión que se irá manejando con mayor calma..

Por lo menos, hasta que el horizonte político y el económico se muestren más estables para que los capitales internacionales tengan confianza en inyectar fondos en una empresa argentina o que sea más estable arriesgar capital propio para apuntalar nuevos proyectos.

Es más, la estrategia ideada apunta a tres objetivos clave como son modernizar su infraestructura industrial, lanzar nuevas líneas de productos y fortalecer su presencia productiva en Latinoamérica.

En este sentido, contempla mejoras en la planta de Río Segundo, una de las más antiguas, además de sumar tecnología para eficientizar procesos, especialmente en el área de chocolates, donde tenía prevista una inversión cercana a los u$s25 millones.

Además, busca expandirse más allá de lo comercial y establecer operaciones productivas en países como Chile, Uruguay, Paraguay, Perú, Ecuador y Colombia.

En forma paralela, se mantiene la mirada optimista con respecto a las operaciones comerciales durante este 2025, en las cuales anticipan que alcanzarán una facturación cercana a los u$s230 millones, lo que representaría un crecimiento a nivel de dos dígitos respecto de 2024.

Volver a casa

Los planes de expansión se habían retomado en julio de 2022, cuando Georgalos le compró al grupo internacional Mondelez la marca Mantecol y, de ese modo, volvió a tomar el control sobre una etiqueta emblemática y que con el paso del tiempo se se convirtió en un genérico para el sector al estilo del Paty y la Savora para los alimentos; la Gillette para los artículos de afeitar o la Bayaspirina para calmar un dolor de cabeza.

La "vuelta a casa" se logró después de 21 años desde aquel 18 de enero del 2001 cuando la había vendido a la filial local del grupo británico Cadbury Schweppes debido a la situación económica del país y al sabor amargo que le dejó a la familia Georgalos el efecto tequila.

En ese momento, el grupo europeo pagó u$s22,6 millones, dinero que le sirvió a Georgalos para cancelar gran parte del pasivo que había acumulado, capitalizarse y producir nuevos productos.

Pero la operación también le impidió competir en el mercado del postre de maní por siete años, luego de los cuales, en el 2008, lanzó Nucrem que ahora convive con Mantecol y que se producen en la planta que perteneció a Mondelez, ubicada en la localidad bonaerense de Victoria.

En ese establecimiento también se fabrican otras tradicionales golosinas como Jirafa, Lengüetazo, Bazooka y Palitos de la Selva, que también formaron parte del regreso de la operación retorno de Mantecol a la empresa que en 1939 fundó Miguel Georgalos, un inmigrante llegado en la década del 30 proveniente de la isla griega de Chios y cuya primera creación fue el postre de maní derivado del halvá.

Origen de un mito

El nombre de Mantecol proviene de los dichos de una vecina de este empresario, que sostenía que por la forma en que presentaba el postre envuelto en papel aluminio se parecían mucho a los panes de manteca.

Luego, Georgalos comenzó a producir en 1939 en la Capital Federal, más precisamente en el barrio de Floresta, adonde se mudó junto a su esposa a una casa en la esquina de las calles Segurola y Elpidio González.

Unos años después compraron la vieja cancha de All Boys en esa misma esquina para emplazar la primera planta de la empresa que en un primer momento fue bautizada como La Greco Argentina hasta convertirse en Georgalos Hnos.

A fines de los años '50, la familia comenzó a buscar un campo en Córdoba para autoabastecerse de maní y avanzar en el negocio y llegaron a la localidad de Río Segundo, que pasó a ser la sede de la empresa y de su marca insignia que era cada vez más conocida entre los consumidores argentinos.

Pero más allá de ese reconocimiento, el nombre de Mantecol se reforzó por la amistad de Miguel Georgalos con Manuel García Ferré, el creador de Anteojito y quien durante años le cedió a la empresa la contratapa de la revista infantil, estrategia que le sirvió para encarar un fuerte proceso de crecimiento hasta que la marca fue vendida.

Sin embargo, en el 2022, la compañía pudo recuperar su emblema que marcó el cierre del segundo deal de la compañía en nueve meses ya que en octubre del 2021 había comprado el 100% de las acciones de Alimesa S.A, una planta que era propiedad de Pepsico ubicada en la provincia de La Rioja y en la cual se elaboran Toddy y Zucoa, que se sumaron al portfolio de Georgalos al igual que Flynn Paff; Nucrem; Namur; Full Maní; Tokke y a las que se estarían sumando Mantecol; Bazooka; Lengüetazo y Palitos de la Selva.

Georgalos posee además una línea de chocolates sin azúcares agregados, otra de repostería y turrones, confituras y panificados navideños, junto a las barras Flow Cereal y cereales para desayuno tras la adquisición de General Cereals.