El 40% de los hogares usa tarjetas telefónicas para sus llamadas
En la Argentina las tarjetas telefónicas prepagas mueven unos $210 M por año.
Telefónica y Telecom continúan llevándose la mayor parte del mercado que, según el tipo de medición, oscila entre el 70 y el 80% del total.
Un pelotón de operadores pelea por quedarse con la mayor participación del resto del mercado. Los analistas estiman que el comportamiento de los pequeños players le irá erosionando espacio a las grandes prestadoras en el futuro.
Actualmente existen unas 45 marcas de tarjetas de telefonía, soportadas por no más de diez operadores. Una cifra menor si se la compara con las registradas entre 2001 y 2002, cuando existían alrededor de 100 marcas de calling card ofrecidas por no menos de una treintena de compañías.
Sin embargo, el consumo continúa creciendo: de 2,5M que se vendían a principios de 2004, se terminaron comercializando 3,5M al cerrar ese año, de acuerdo a datos de consultoras privadas tomados en esos períodos.
Al igual que el resto del mercado de las telecomunicaciones, este segmento también tuvo su proceso de consolidación (que para algunos analistas aún no terminó) y muchas pequeñas empresas con licencia para explotar la licencia de telefonía a través de tarjetas quebraron o abandonaron el negocio.
Telecom y Telefónica alcanzan una participación alta en el mercado debido a que, cuando se miden las tarjetas para la línea control (el servicio de telefonía básica por el que no se paga abono), estas dos compañías logran monopolizar la preferencia de los consumidores que, en muchos casos, no saben que pueden recurrir a la calling card de otra compañía.
Cuando las mediciones se hacen sólo sobre el segmento de larga distancia la participación cambia.
El 36,4% de los hogares argentinos usa tarjetas telefónicas para sus llamadas. El 42% de ese total corresponde a los segmentos bajos, mientras que el 33% está concentrado en los segmentos medios y altos, según un informe de Prince & Cooke.
Se utilizan más en el interior que en la Capital porque en las provincias se realizan muchas más llamadas de larga distancia, además de que el nivel socioeconómico es más bajo que el de los porteños.
Al desmenuzar el tipo de llamadas que se realizan con las calling card, se advierte que el 53% la utiliza para llamadas locales (la famosa línea control), el 34% recurre a ellas para las comunicaciones nacionales, y el 13% las destina a las llamadas internacionales.
Lo cierto es que, detrás de las tarjetas Telecom Global y la Calling Card de Telefónica, se ubican IDT (cuyo proveedor es COMSAT), Línea (Nextel), Teletel y Llamada directa (estas dos últimas surgieron en las provincias) como las más consolidadas. Sin embargo, hay un tercer pelotón de firmas que se volcaron a este negocio durante 2004 y si bien aún no cumplieron un año de prestaciones, apuestan a ubicarse detrás de Telefónica y Telecom. antes del cierre de 2005.
Hablamos de las tarjetas Crossfone, Telemundo (Impsat), Sympático (Convergia) y Todo Bajo Control (iPlan) que a través de una agresiva estrategia que combina servicio, precio y calidad quieren subir posiciones en un mercado cuyo consumidores están aprendiendo cada vez más a moverse con este instrumento para bajar los costos de telecomunicaciones.
- En Cross Fone se apuesta al 2005 para seguir ofeciendo tarjetas a bajo precio.
- iPlan con Todo Bajo Control registró un crecimiento de 500% desde su lanzamiento, en junio de 2004 hasta fines de ese año. El consumo mínimo que ofrece esta tarjeta es de $3. Sin embargo, la compañía apostará sus fichas en 2005 al mercado pymes. "Para este segmento ofrecemos tarjetas de $50 y $100. La ventaja es que, una vez adquirida la primera tarjeta se la puede asociar a la línea telefónica. Las calling card que se adquieran después no tendrán que seguir todos los pasos para hacer una llamada (que arrancan llamando a un 0822 o 0823) sino que sólo habrá que marcar el PIN", explicó a INFOBAEprofesional Marcos Laplacette, productor manager de iPlan.
- En Convergia, en tanto, también afinan la puntería para 2005. La empresa buscará fortalecerse en los dos segmentos en los que trabaja: las marcas blancas y las marcas propias. Respecto a la primera, la compañía desarrolla las calling card de empresas de renombre, como las tiendas Ripley, de Perú, o Western Union en Uruguay. "Estamos creando dos tarjetas para empresas de la Argentina que se lanzarán al mercado en los próximos meses", señaló Marcelo Santurio, director general de Convergia.
Buenas perspectivas
Aunque el segmento de las tarjetas todavía es pequeño en el mercado de telecomunicaciones total, que alcanzó los $5100M en 2004, las previsiones son optimistas. Los referentes del sector consideran que los consumidores están aprendiendo cada vez más sobre las tarjetas. Y que ya no usan una para todas las comunicaciones, sino que están captando cuáles les conviene para las llamada locales y cuáles para las de larga distancia.
También si una empresa les cobra la "bajada de bandera" cuando hacen la primera llamada o fraccionan cada dos minutos. Estas cuestiones forman parte de las características de un sector que, al igual que la industria, necesitará afinar sus propuestas para captar la atención de los consumidores.