Suez deja la concesión del servicio de agua en Santa Fe

Era una determinación casi cantada luego del virtual quiebre de la relación entre el grupo francés y el gobernador, quien el domingo pasado admitió en su discurso ante la Legislatura provincial por el Dí­a del Trabajador que se habí­an estancado las negociaciones y que se pensaba en una rescisión contractual.

Obeid, incluso, ya envió al Parlamento santafesino un proyecto de ley de creación de una empresa pública que se hará cargo del servicio que dejará
Aguas Provinciales, la filial creada por Suez para administrar la red de agua potable en toda la provincia.

"Si la decisión de la empresa es irse, es problema suyo, pero será una acción unilateral de su parte por la que tendrá que hacerse cargo", advirtió el gobernador en el mismo escenario.

La empresa, en la que Suez tiene como socio a la española Aguas de Barcelona (AGBAR), no ha cumplido con las inversiones comprometidas al cabo de diez años de la concesión, puntualizó Obeid.

El directorio de Aguas Provinciales de Santa Fe emitió un escueto comunicado donde sostuvo que instruyó al comité ejecutivo de la empresa para procurar tratativas con la provincia que, "en el marco de la terminación de la relación contractual, permitan una salida ordenada en el corto plazo".

Incertidumbre. No será una negociación fácil si se tienen en cuenta las declaraciones del ministro de Obras Públicas provincial, Alberto Hammerly, quien dijo que la salida de Aguas de Santa Fe supondrí­a una demanda por incumplimiento de contrato.

Además indicó que se estudian varias alternativas para reemplazar a los franceses: que el estado provincial se hará cargo del servicio, que se lo divida entre los quince municipios que abarca, o se vuelva a privatizar.

En el caso del proyecto ya remitido por el gobierno a la Legislatura, se propone la creación de la empresa del Agua, que prevé la realización de obras dentro y fuera del servicio concesionado.

Su finalidad es integral y tiende a la recuperación por parte del Estado provincial de "un rol activo en esta materia", se extendió el mandatario. Suez mantiene también la concesión del servicio de agua potable para la capital de Córdoba. Se trata de un negocio secundario en el que no tiene mayores conflictos.

La salida de Suez estarí­a marcando una tendencia de las empresas francesas por abandonar la totalidad o parte de sus negocios en la Argentina.

Llega siete dí­as después de que Electricité de France (EDF) oficializó su intención de desprenderse de la mayorí­a del capital accionario de Edenor.

Es más, en estos momentos la renegociación del contrato de concesión con Aguas Argentinas no atraviesa por su mejor momento. En algunos sectores oficiales y privados se admite que es el proceso más duro que le tocó al Gobierno hasta ahora.

Todaví­a no hubo acuerdo sobre ajustes de las tarifas y los planes de inversión. Aguas Argentinas administra en concesión el servicio de agua y cloacas de la Capital Federal y 17 partidos del Gran Buenos Aires.

Suez controla el 39,9% de la operadora; AGBAR otro 25,01%; el personal un 10%; el Banco Galicia, 8,26%; Vivendi, 7,5%; la CFI, 5%, y Anglian Water, 4,5 por ciento.

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