Baker & McKenzie, el plus de ser una organización internacional
Baker & McKenzie es una marca registrada. Es una organización internacional que interactúa desde hace más de medio siglo en asesoramiento legal. Sus orígenes fueron en 1949, en Chicago, Estados Unidos, y desde allí se expandió hasta integrar hoy alrededor de 4.000 abogados distribuidos en más de 60 oficinas en todo el mundo, incluso en países como Uzbekistán o Azerbaiján, y que tiene entre sus logros ser la primer firma internacional en atravesar la antigua "cortina de hierro" y echar raíces en China.A la Argentina llegó meses después del mundial de fútbol de 1978. Se inició con tres abogados y hoy ya tiene cerca de 70. Su managing partner local, Avelino Rolón, resaltó la importancia de contar con una "red global" al momento de acompañar grandes proyectos. Esa situación les permitió obtener "una ventaja competitiva" respecto de otros estudios locales.Así, al momento de asesorar a una empresa que adquiera a una multinacional con presencia en gran cantidad de países, la compañía "preferirá que la operación sea acompañada por un estudio que tenga la mayor cantidad de conexiones locales", aseguró Rolón.A nivel global, el estudio hace muchos años se focalizó en prácticas "con valor agregado", explicó el socio Alexis Kook-Wescott. En ese aspecto, remarcó la interacción regional y mundial, donde hay un "gran intercambio de conocimientos y experiencias" entre los estudios y, de acuerdo a las oportunidades y al background de los abogados se replican las áreas de práctica.En Buenos Aires, se repiten las más generales: M&A, banking y finanzas, laboral, impuestos, aduanero y propiedad intelectual, entre otros. Según la revista norteamericana The American Lawyer, Baker & McKenzie fue en 2004 la firma con más abogados en el mundo, con 3.053, y con presencia en más países, en 38. Esos números se incrementaron actualmente, sobre todo por la reciente absorción de la oficina de Nueva York del estudio Coudert Brothers.
Dentro de esta "auténtica federación", existen lineamientos globales, sobre todo en cuestiones sensibles que hacen a la ética profesional, y en otros conserva su autonomía. En ese sentido, las políticas individuales "no son consultadas", indicó Juan Martín Jovanovich, socio de la firma.Nuevas áreasDentro de esas decisiones particulares se encuentra la apertura del departamento de derecho penal económico, un práctica que prácticamente "no la tienen los demás estudios en el país", dijo Kook-Wescott. Fue hace tres meses, con la incorporación del especialista Vicente Palacios, debido a la necesidad de los clientes "que percibimos a partir de la cantidad de asuntos que representaban un volumen interesante, dada la mayor litigiosidad en áreas no tradicionales como penal tributario, cambiario, aduanero, previsional y societario", agregó.De esa manera, se terminó con el "tabú de que penalistas en general no podían convivir bajo un mismo techo en este tipo de estructuras", aseguró.Algo similar ocurrió con la incorporación de Marcelo Aquino, ex De Diego & Asociados, que hace diez meses se sumó al área de derecho del trabajo. Esta decisión permitió darle al asesoramiento "una presencia más local, dado que venía de un estudio netamente laboral", explicó Rolón.Más allá de la independencia de decisiones operacionales de cada oficina, Aquino resaltó que los recursos que son comunes en toda la organización "son los abogados, en la medida en que el cliente tenga necesidad de encarar proyectos que abarque a más de una". Esa situación se manifiesta en todas las áreas, aunque desde el estudio destacan la práctica tributaria, que globalmente cuenta con destacados profesionales. En ese sentido, Rolón destacó el rol que tiene Jovanovich en el sector, especialista en precios de transferencia.Para Jovanovich, Baker & McKenzie se distingue de otros estudios por la integración de los ámbitos tributario y aduanero. Así, explicó que "la capacidad que tenemos de integrar ambas prácticas nos llevó a captar muchas cuentas, especialmente sobre precios de transferencia. El mercado local no analiza profundamente esta cuestión, sino que lo hacen en forma separada y lamentablemente habrán sorpresas, porque de hecho la mayor parte de las soluciones sobre el valor en aduanas de las mercaderías tiene un impacto directo en cuestiones tributarias y los únicos que creo que vimos esto fuimos nosotros". Agregó que "además de hacer estudios, de la misma manera que las big four, como somos abogados, los defendemos".Cambios de prácticaEl pertenecer a una red global no los mantuvo ajeno a los cambios profesionales que vivieron todas los estudios del país. "La crisis generó un montón de consecuencias que repercutieron en nosotros", aseguró Rolón; hubo una "reconversión de las prácticas, aumentó la litigiosidad, aparecieron nuevos viejos temas como el control de cambios", indicó. Este escenario poscrisis se caracteriza porque "las reestructuraciones están dejando de tener protagonismo, los despidos masivos también, hay mayor presión tributaria y empieza a asomar una tendencia inversora interesante", explicó el socio administrador de la oficina argentina. En ese sentido, "las consultas hoy son más bien exploratorias, no hay proyectos reales", explicó Jovanovich y agregó que "empezaron a surgir chispazos, no una inversión real. En los grandes inversores comenzó a haber un apetito que empezó por los Boden en pesos y luego por las ON, comenzó un apetito que siempre se inicia por el lado financiero y detrás vienen los largoplacistas y los inversores estratégicos".
Pablo Méndez