Sigue la crisis de Garbarino: sindicato de comercio exige la intervención judicial
El titular de la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECyS), Armando Cavalieri, interpuso una denuncia ante la Inspección General de Justicia (IGJ) contra el grupo económico Garbarino, que integra esa empresa y Compumundo, y requirió "su inmediata intervención judicial".
El argumento que presentaron fue el de "desmanejo empresario" por parte de la firma.
En una denuncia elevada a la IGJ, Cavalieri sostuvo que a ese organismo "le compete el contralor de las sociedades comerciales de la Capital Federal".
Además, pidió que por su intermedio la justicia "tome debido conocimiento y arbitre las medidas y peticiones para remover a los administradores y designar interventores judiciales, por ser estos responsables directos de la crisis producida por el desmanejo empresario".
"Esto se suma a la gran cantidad de acciones concretas que la Faecys realizó en defensa de los derechos e intereses de los trabajadores de Garbarino", aseguró.

Incumplimientos e ilícitos laborales
En la presentación ante la IGJ, se informó que el gremio ya obtuvo una medida cautelar administrativa para reincorporar a los despedidos (conciliación obligatoria).
"También se reconoció que la empresa y sus directivos cometieron incumplimientos e ilícitos laborales que vulneraron el DNU 329/20", aseguró, y añadió que los gremios adheridos intermediaron, representaron y asistieron a los trabajadores en sus presentaciones individuales ante el concurso preventivo recientemente abierto.
En la carta elevada a la IGJ, el líder sindical fundamentó la denuncia y petición en "los graves desmanejos societarios" y dijo que "se sumará a las gestiones que se realizarán para hallar soluciones a la grave situación que viven esos mercantiles".
Cavalieri reseñó que "se celebró e implementó un convenio marco de cooperación con Trabajo para el reingreso del personal afectado mediante el Programa de Inserción Laboral (PIL), y se lograron estímulos para aquellos que los contraten, lo que significó la reducción del 95 por ciento de las contribuciones", puntualizó.
"Ello incluyó una ayuda económica de la cartera laboral, que se hizo cargo de una parte importante de los haberes equivalente al mínimo, vital y móvil", enfatizó.
"La FAECyS continuará adoptando todas las medidas pertinentes en defensa de los derechos y apoyará de forma incondicional a los trabajadores, y hará acciones para que los directores y socios de las empresas responsables de esta crítica situación sean condenados por la gravedad de sus actos contrarios a las leyes", concluyó el documento citado por Gestión Sindical.

El corte del puente Pueyrredón
Trabajadores despedidos de la empresa Garbarino cortaron el lunes el Puente Pueyrredón junto a militantes del Partido Obrero para visibilizar el reclamo de pago sueldos adeudados e indemnizaciones y exigir una reunión con el ministro de Trabajo, Claudio Moroni.
La protesta, que se extendió por varias horas, se llevó a cabo luego de los despidos masivos por parte de la empresa de electrodomésticos, la cual según los trabajadores desafectados "no cesó su actividad" a pesar de la convocatoria de acreedores a la que se presentó.
En ese marco, tras varios meses de reclamos los manifestantes apuntaron contra Pablo Rosales, el dueño de la firma, por haber despedido a más de tres mil trabajadores de todas las sucursales del país sin pagar sus correspondientes indemnizaciones ni los salarios de los últimos nueve meses de trabajo.
Luis Rodríguez, uno de los despedidos de la sucursal Escobar aseguró en diálogo con Radio Rivadavia que la firma se presentó convocatoria de acreedores declarando crisis, pero señaló que "no cesó su actividad".
"La idea de la empresa es volcarse a la venta digital, y como para ellos sobraban empleados, nos despidieron con un artículo infundado sin justificación y sin pagarnos nada", afirmó Rodríguez.
Al respecto, el delegado señaló que "ellos se apoyan en el artículo 247 para pagar tan solo la mitad de la indemnización, que además no la pagaron".
"La situación que declara Garbarino no es real porque la empresa cesó la actividad para justificar quiebra. En marzo, que fue el último mes que se trabajó, fue el mes récord de ventas de la empresa. Después se negaron a vender y eso derivó en más pasivos", subrayó Rodríguez.
En la misma línea, el vendedor contó que atravesaron la pandemia sin contar con el derecho a la obra social y señaló que varios de sus compañeros en tratamiento oncológico fallecieron por no poder continuar con la atención médica.
Para noviembre, la empresa cerró todas las sucursales del país con el objetivo de volcarse a la plataforma digital. Sus trabajadores vienen llevando a cabo medidas de fuerza en reclamo de sus salarios. El viernes pasado realizaron un tuitazo con el Hashtag "#GarbarinoNoPaga".