La decisión de la Cámara laboral que desafía a la Corte Suprema y podría disparar la litigiosidad
La Cámara de Apelaciones del Trabajo resolvió dejar sin efecto los criterios unificados que, hasta el momento, se usaban para calcular los intereses en las sentencias por juicios laborales.
Cuál fue la decisión de la Cámara de Apelaciones del Trabajo
La medida quedó registrada en el acta 2788/2024 y brinda a cada sala del tribunal la potestad de aplicar la tasa de interés que considere más justa. Esta medida podría ser leída como un acto con intenciones de desafiar a las directrices de la Corte Suprema.
Esta decisión de la Cámara Laboral se genera en medio de una serie de reveses recibidos por parte de la Corte Suprema, que ha descalificado, a través de los últimos fallos, los métodos de ajuste usados por la Cámara, a los que calificó como "arbitrarios" y "desproporcionados", por generar incrementos de hasta 20.000% en las indemnizaciones.
En ese sentido, uno de los casos que impulsó la medida fue el fallo "Oliva". Allí la Corte anuló la sentencia de la Cámara Laboral que permitía aplicar tasas de interés activas con capitalización anual desde la fecha de notificación del traslado de la demanda, argumentando que este método no estaba respaldado por el Código Civil y Comercial, y arrojaba resultados económicos irrazonables.
Luego, la Cámara Laboral intentó establecer un nuevo criterio con el uso de la tasa CER más un 6% anual, medida que también fue rechazada por la Corte por considerarla igualmente desproporcionada.
Ante la ausencia de una alternativa que aceptable, la Cámara Laboral optó por abdicar de su rol unificador, permitiendo que cada sala determine sus propios criterios. Esto generó un gran desconcierto entre los jueces de primera instancia, que ahora carecen de un marco de referencia claro para sus fallos.
Gabriela Vázquez, María Cecilia Hockl, Enrique Catani, entre otros, son algunos de los jueces que suscriben esta decisión.
Además de generar un marco de incertidumbre, esta medida podría incrementar la litigiosidad en los juicios laborales, donde las partes ahora deberán desempeñarse en un escenario carente de un criterio unificado que también podría afectar a miles de trabajadores y empleadores.