Kabbalah y liderazgo: el poder de cambiarlo todo y la importancia de estar siempre "despiertos"

Como parte de una gira por Latinoamérica, Yehuda Berg, el kabbalista que seduce a famosos y empresarios de todo el mundo y que ya causó sensación en Punta del Este, visitó la Argentina y destacó el potencial de liderazgo que tienen todas las personas, al tiempo que resaltó el rol de la responsabilidad como motor del cambio.

En una mega conferencia brindada en La Rural porteña, una de las principales consignas que tramistió a los seguidores locales fue la importancia de no seguir centrándose en el pasado.

Cambiarlo todo
La consigna del encuentro fue "El poder de cambiarlo todo". Ese es, justamente el título de su libro de reciente aparición. Sin duda, una propuesta por demás atractiva para cualquier ser humano que esté preocupado por darle un sentido a su vida.

Líder singular
Lejos de la figura de un pastor o de un maestro espiritual, Yehuda Berg parece el prototipo de un empresario de la nueva camada, como si viniera del mundo de Internet o de la publicidad.

Con una gorrita con visera, jeans y camisa holgada, el líder kabbalista mantuvo en vilo a la audiencia por más de una hora discurriendo sobre temas nada banales.

Yehuda Berg es hijo de Rav Philip Berg, otro maestro kabbahlista que fundó el Kabbalah Centre que funciona en California, EE.UU., y que tiene una filial local porteña en Palermo, y dos centros en el interior, ubicados en Córdoba y Corrientes.

En 2007 fue reconocido como "la principal autoridad del movimiento de la Kabbalah" por la revista Newsweek,que lo nombró como uno de los cinco rabinos más importantes de EE.UU.

A su vez, en 2009, el Gentlemen´s Fund de la revista GQ lo condecoró por ser un "Agente de Cambio" en el ámbito de la educación.

Además de su actual libro "El poder de cambiarlo todo", también es autor de "El Poder de la Kabbalah" y "Los 72 Nombres de Dios", que han sido traducidos a 20 y 14 idiomas respectivamente.

Sabiduría con imán
Antes que nada, los representantes de la Kabbalah, una corriente que cautivó a figuras como Madonna a nivel internacional y a fieles como Reina Reech, en el plano local, se ocupan de declarar que no se trata de una religión ni de una filosofía, sino de una "sabiduría".

La Kabbalah, que también fue una disciplina dilecta para las reflexiones de Jorge Luis Borges, es un "camino espiritual universal". Pretende dar respuesta a los grandes interrogantes de la humanidad, quiere indagar acerca de la creación y de los "por qué".

En el website de la organización se detalla que la Kabbalah es un cuerpo de conocimientos espirituales que "contiene las llaves para abrir los secretos del universo" que develan los misterios del alma y el corazón humano.

Es una de las principales corrientes de la mística judía y su foco de atención es el análisis del Arbol de la Vida como emblema de los misterios de "la creación". Implica tener mayor noción del control de "nuestra vida" en vez de ser testigos de lo que pasa al alrededor.

Lejos de la superstición
Sin duda, este tipo de abordaje está lejos de la acepción popular que habla de hacer tal o cual cosa "por cábala".
Allí el concepto queda reducido a una cuestión mágica o de superstición que impone seguir con ciertos rituales de tal modo que la realidad sea de tal o cual manera.

En cambio, el camino que proponen los kabbalistas tiene que ver con la responsabilidad de asumir actitudes concretas ante la vida. Supone ejercitar el libre albedrío y actuar en consecuencia.

El interés por la Kabbalah, un saber ancestral, tuvo un reflorecimiento en estos últimos años. En la medida que la vida moderna impone mucha presión y genera grandes cuadros de incertidumbre, el hombre busca también una via espiritual.

El interés de los hombres de negocio
Es conocido el rol cada vez más fuerte que tienen los guías espirituales, no sólo entre el público en general, sino particularmente en el mundo de los negocios.

Hace ya casi diez años, en agosto del 2001, el rabino Laibl Wolf , visitó el país y congregó a no menos de 500 empresarios dispuestos a escuchar sus enseñanzas sobre la Kabbalah. 

Uno de los cultores a nivel local es Eduardo Elsztain, presidente de IRSA y dueño de los principales shoppings del país.

Congeniar los mundos
Es que el management necesita valerse cada vez más de las enseñanzas de los líderes espirituales. Uno de los grandes dilemas es lograr amalgamar la vida laboral con la espiritual.

El tema preocupa, tal como lo expresa Yehuda Berg en su libro: "Estamos en una encrucijada en la historia de la humanidad, en la cual podemos escoger el Cielo o el Infierno. Ya casi hemos alcanzado el punto más bajo posible. Ahora es nuestra decisión hasta dónde queremos aguantar"

Para estar atentos y despiertos
Ante la audiencia de La Rural, Berg enfatizó los puntos clave que definen la actitud de la Kabbalah.

"Hay que dejar de estar dormidos y despertarse. Es necesario pasar de víctimas a líderes", dijo.

El maestro kabbalista destacó a su vez que "todos estamos inmersos en una dualidad entre el bien y el mal, entre la divinidad y el egoísmo, esa es una batalla interna".

http://www.youtube.com/watch?v=1G30lojMzPQ

Lo importante, según Berg, es tomar en cuenta el "cuadro completo" de las situaciones. Ni lo bueno es siempre bueno, ni lo malo es siempre tan malo.

Pero Berg enfatizó la importancia de reaccionar bien ante las cosas, eso de algún modo va generando un efecto positivo a largo plazo.

"Siento que muchos argentinos hablan del pasado de grandeza pero sólo tenemos que ver el futuro y creer que será mucho mejor que el pasado, tengo que creer que hoy es mi peor día así sigo creciendo", señaló.

Un nuevo liderazgo es posible
En cuanto al nuevo modo de liderazgo, el maestro kabbalista aseveró que "se necesitan líderes de naturaleza diferente que representen a los demás".

Pero la cuestión no es deslindar responsabilidades, sino por el contrario, asumirlas plenamente. "Todos deben ser líderes", destacó Berg.

En su opinión, "todos afectamos a otros en nuestra cotidianeidad, todos influimos a alguien y el mundo necesita líderes para mejorar y para ayudar a los demás, hay que estar dispuestos a hacer sacrificios".

Y otro punto crucial de la charla de Berg pasó por indicar que "todos tienen a alguien esperando que le brinden ayuda, siempre hay alguien esperándonos pero también siempre hay alguien al que nosotros esperamos y que podemos recurrir para buscar ayuda".

Por último, el guía espiritual hizo hincapié en el valor del compartir, esa es parte de la sabiduría que transmite la Kabbalah.