Cómo trabajar en Vaca Muerta: cuáles son los requisitos para ingresar y qué perfiles se buscan

Vaca Muerta se afianza como uno de los principales núcleos de actividad económica y generación de empleo del país. El avance de obras, pozos y plantas operativas mantiene un nivel sostenido de incorporación de personal por parte de operadoras y empresas contratistas.

En ese contexto, los perfiles solicitados abarcan áreas técnicas, operativas y administrativas, y las compañías establecen requisitos mínimos para el ingreso de nuevos trabajadores.

Formación básica: el punto de partida para acceder a empleos iniciales

El título secundario completo es la condición de ingreso más extendida dentro del mercado laboral de Vaca Muerta. Las empresas lo exigen para cubrir puestos vinculados con tareas de apoyo, servicios generales, logística básica y actividades operativas de baja complejidad. Esta exigencia rige tanto para compañías de servicios como para operadoras de mayor escala que participan en las distintas etapas de la actividad hidrocarburífera.

A partir del nivel secundario, los requerimientos se diversifican según la responsabilidad del puesto. En muchos oficios, las compañías valoran formación técnica o profesional básica, especialmente en especialidades relacionadas con electricidad, mecánica y mantenimiento industrial. También se toma en cuenta la experiencia previa en entornos operativos y el cumplimiento de normas de seguridad, dado que los equipos de campo deben acreditar conocimientos específicos para realizar las tareas asignadas.

Entre los oficios con mayor demanda se encuentran soldadores, mecánicos, choferes profesionales, operadores de equipos de perforación o bombeo, chapistas y técnicos instrumentistas. En la mayoría de estos casos, se requiere experiencia comprobada en campo y certificaciones vinculadas con el manejo de herramientas, vehículos o equipamiento industrial.

Perfiles técnicos y profesionales: formación terciaria y universitaria

Las posiciones de mayor especialización requieren formación terciaria o universitaria. Las áreas técnicas orientadas a ingeniería y geociencias concentran la mayoría de las búsquedas profesionales. Entre los perfiles más solicitados se encuentran ingenieros en petróleo, mecánicos, industriales y civiles, además de geólogos y técnicos en perforación, reservorios y mantenimiento avanzado.

También se incorporan perfiles administrativos y de soporte vinculados con logística, sistemas, comunicación organizacional y recursos humanos. Estas funciones complementan la estructura operativa de las empresas que participan en la cadena energética, y su demanda crece a medida que los proyectos amplían su capacidad instalada y sus equipos de gestión.

Dónde se publican las búsquedas laborales de Vaca Muerta

Las compañías que operan en la cuenca neuquina publican sus procesos de selección a través de plataformas digitales. Las vías más utilizadas son LinkedIn y los portales oficiales de empleo de las operadoras y contratistas. En estos sitios, los postulantes pueden cargar currículum, certificaciones y cursos.

En algunos casos, los procesos derivan a sistemas internos de cada empresa, diseñados para gestionar postulaciones y filtrar búsquedas según formación, experiencia y requisitos técnicos. El acceso a estas convocatorias se actualiza de forma periódica, especialmente en momentos de ampliación de obras o incorporación de nuevas etapas productivas.

Capacitación: programas para acompañar la expansión del sector

El crecimiento del complejo energético neuquino impulsa iniciativas destinadas a formar trabajadores en especialidades vinculadas con la industria. Con ese objetivo, el Gobierno de Neuquén anunció en septiembre la creación del Instituto Vaca Muerta (IVM), desarrollado junto a la Fundación YPF. El nuevo centro funcionará en el Polo Científico Tecnológico de la capital provincial y ofrecerá capacitación anual para entre 2.000 y 3.000 personas.

El proyecto se orienta a reforzar la disponibilidad de mano de obra calificada ante la expansión prevista del sector. Según proyecciones oficiales, Neuquén podría triplicar su producción de petróleo y duplicar la de gas hacia 2030. Esa proyección implicaría la incorporación estimada de alrededor de 17.000 trabajadores adicionales si la actividad mantiene el ritmo de crecimiento previsto.

Los programas del IVM estarán organizados en módulos trimestrales. Su objetivo es capacitar tanto a estudiantes técnicos como a trabajadores en actividad que busquen actualizar conocimientos o insertarse en áreas específicas de la cadena productiva. El esquema formativo incluirá contenidos vinculados con seguridad, operación de equipos, mantenimiento, logística y tecnologías aplicadas a la industria.

La combinación entre inversiones en infraestructura, ampliación de pozos y fortalecimiento de servicios asociados sostiene la demanda de personal en diferentes segmentos del sector. El ingreso a estos empleos depende de la formación mínima obligatoria, la certificación de competencias técnicas cuando el puesto lo requiere y la experiencia comprobable en actividades operativas. La oferta de capacitación oficial y privada se presenta como un factor que puede facilitar la inserción laboral en los próximos años, especialmente en roles vinculados con oficios y asistencia técnica.