Al igual que los en paí­ses del primer mundo, en donde los avances tecnológicos en comunicación e informática están al alcance de gran parte de la sociedad, esta tendencia en nuestro paí­s comenzó a generar desde hace algunos años la posibilidad del desarrollo del teletrabajo.

El trabajo a cuestas o Home Office o Teletrabajo es un fenómeno que ya forma parte de la realidad de los argentinos; vino para quedarse y esconde mucho más que no concurrir a una oficina. Estudios recientes estiman en un millón la cantidad de oficinas en hogares de todo el paí­s

Se considera teletrabajo a toda tarea laboral que no requiera la presencia de la persona en la oficina o planta de la empresa, de acuerdo con la comisión de teletrabajo del Ministerio de Trabajo de la Nación.

El teletrabajo no necesariamente es desde casa, "hay mucha gente que, dependiendo de su situación familiar, trabaja en un bar, o de vacaciones", asegura Gabriela Españon, Gerente de Selección de Consultores de Empresas SRL.

El Ministerio de Trabajo presentó en julio un proyecto de ley del régimen jurí­dico del teletrabajo en relación de dependencia para ser tratado por el Senado. El proyecto hace hincapié en la igualdad de derechos respecto del resto de los trabajadores, de la preservación de la identidad y del domicilio del empleado, y del equipo de trabajo y las condiciones generales en que se desarrolla la tarea.Muchos de los que empezaron a teletrabajar son personas que se quedaron sin trabajo en la crisis y buscaron alternativas. También algunas empresas decidieron enviar a los trabajadores a sus casas "para ahorrar costos de instalaciones". Si bien la mayorí­a de los teletrabajadores hoy son independientes, muchas empresas de tecnologí­a ya se volcaron a esta tendencia.

Una idea que se tiene del teletrabajo es que es más cómodo, porque es difí­cil que a uno lo controlen cuando el jefe no está a mano. Pero no es tan así­. Una combinación de tecnologí­a y buena búsqueda de personal son claves.

El empleado que trabaja desde su casa, debe poseer grandes dosis de responsabilidad, organización y fijación en los objetivos. Además, debe estar comunicado con diversas plataformas que permitan su rápida localización.

Aunque parezca cómodo, este sistema también presenta desventajas ya que el horario de trabajo invade la vida cotidiana. Por otro lado, los empleadores no pueden exceder sus capacidades ni ocupar el tiempo libre del trabajador, sólo porque éste puede realizar su tarea desde cualquier lado. Es importante que jefes y empleados pongan lí­mites al tiempo que usan para trabajar".

En general, la tendencia del teletrabajo se relaciona con el bienestar de los empleados y la flexibilidad laboral es hoy por hoy un valor agregado que las empresas pueden ofrecer. La mayorí­a de las personas valoran mucho esta posibilidad y en muchas oportunidades se encuentra en un factor decisivo al momento de ingresar a trabajar en una compañí­a

El trabajo remoto requiere un gran compromiso y responsabilidad de quien lo utilice. La experiencia dice que los resultados son excelentes y que se difundirá mucho más en los próximos años

Por Lisandro Gioda, Jefe de Personal de Consultores de Empresas SRL.