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ALERTA

Aburrirse en el trabajo es peor que tener muchí­simas tareas

No tener nada que hacer causa una sensación de angustia. No sólo porque se pierde el tiempo sino porque además se convierte en un elemento de bloqueo vital
19/07/2008 - 13:24hs
Aburrirse en el trabajo es peor que tener muchí­simas tareas

Sólo hay una cosa peor que tener muchí­simo trabajo. Es no tener nada que hacer. El aburrimiento es una sensación angustiosa. No sólo porque se pierde el tiempo entre bostezo y estiramiento, sino porque, además, se convierte en un elemento de bloqueo vital. Normalmente, el aburrimiento atraviesa varias etapas.

Hay estudios que aseguran que el aburrimiento puede ser causa de errores graves porque la mente se bloquea y el cerebro se desconecta. Sin embargo, hay algo de encantador en el hastí­o.

Pero sólo si se cumplen determinados factores. Seguramente, muchos analistas y brokers de bolsa echan de menos durante estos dí­as aburrirse un poquito en el trabajo, tal como destaca un artí­culo publicado por el diario español Expansión.

La misma sensación que, muy probablemente, pueden estar experimentando en este instante los responsables financieros, los abogados y los accionistas de las empresas inmobiliarias españolas. Para ellos, según Expansión, el aburrimiento es sinónimo de tranquilidad.

Pero si el hartazgo y el bostezo se convierten en rutinas, el problema ya se incluye en la categorí­a de grave. Sufrir una sensación de hastí­o durante ocho horas diarias no es, en absoluto, recomendable.

Si se tiene en cuenta que pasamos trabajando tres cuartas partes de la vida, aburrirse en el puesto laboral significa que nos aburrimos durante la mayor parte de nuestra vida.

Ante esta ssituación, no caben demasiadas soluciones. Según cuenta Expansión, la cadena hotelera Crowne Plaza propone, por ejemplo, salas diseñadas para que ese enemigo que hace bostezar no entre en las reuniones.

Evitar el tedio, en cualquier caso, depende exclusivamente de cada empleado. Si no se puede encontrar una motivación en en el trabajo, el aburrimiento será inevitable y en estos casos no hay diferencias entre sacar fotocopias o ser ministros.