Naming de las bebidas alcohólicas: ¿cómo saber el nombre correcto?
Existen dos polos en el espectro de los consumidores de bebidas alcohólicas: el "clásico" y el "experto" bebedor de cerveza o vino.
Las razones de la elección
Para la mayoría de nosotros que nos ubicamos en algún lugar dentro de estas dos figuras, la elección del producto se debe a una variedad de razones:
*Las emociones pueden ser un factor importante - elegimos una marca de cerveza porque es la que siempre se toma con amigos o familia.
*La proximidad y la distribución sin duda juegan un papel primordial: ¿Por qué cruzar toda la ciudad para conseguir un determinado six-pack cuando venden otra marca a la vuelta?
*La identificación cultural y los valores que transmite la marca puenden ser lo que marque la diferencia a la hora de elegir entre un vino y otro.
*La elección de acuerdo al sabor de la bebida es otro punto a tener en cuenta por varios de los consumidores.
*Luego está el precio - si usted es de los que se inclina hacia la frase "cerveza es cerveza" - estamos hablando de la cerveza vista como un commodity. En este caso el costo es clave en el momento de la decisión de compra.
¿Y el naming?
Muy bien. Pero, ¿qué pasa con los nombres, juegan un papel importante en el momento de la decisión de compra?
Los gigantes de la cerveza y la industria vitivinícola son nombres muy conocidos: Heineken, Corona, Budweiser, Norton, Concha y Toro, Moët & Chandon por nombrar unos pocos.
Además de la sugerencia de realeza en nombres como Corona o Imperial, los otros son mayormente indicadores de origen. Un nombre de familia en el caso de Heineken, Norton y Concha y Toro; y la localidad checa de Budweis, el caso de Budweiser.
Con la gran variedad de marcas que ofrece el mercado la elección de un buen nombre es un eje fundamental para el éxito en este sector. Los puntos de venta ofrecen una infinidad de opciones en materia de bebidas alcohólicas.
Branding público
El naming no es simplemente un nombre para un producto. Se trata del primer acto público del branding de una marca, es quien proyecta la personalidad y transmite la calidad de lo que representa.
Es un recurso que permite reconocer y recordar un producto y ayuda a diferenciarlo de la competencia o de otros similares.
En la categoría de bebidas alcohólicas, uno de los ejes más utilizados es el de un nombre que remita al origen.
Sugiere un sentido de pertenencia, hace referencia a lo local, lo propio, a un producto nacional.
Otro eje es el que hace referencia a las características del producto. Sugiere terminologías referentes a la cerveza en sí misma, tanto desde sus características identitarias (color, nombre, sabor) como desde el lugar que ocupa al lado del consumidor, desde su cercanía.
Un eje poco explorado es el del nombre alineado con la esencia de la marca que puede incluir atributos como alegría, diversión, familiaridad, optimismo.
Finalmente, en el momento de la decisión del nombre para nuestro producto, la premisa deber ser no elegir aquel nombre que nos guste más a nivel personal, sino aquel que presente un mayor potencial de cara al+ futuro para poder cumplir con los objetivos estratégicos de la marca.