Cartellone se retira del negocio de los alimentos
El grupo Cartellone decidió hacer efectiva su retirada del negocio de los alimentos y concentrarse en la construcción. Así, se desprendió esta semana de su división de tomates enlatados, donde se había ganado una posición y titilaba entre las diez primeras firmas de un mercado liderado por La Campagnola, de Arcor.
La marca Molto, la planta de tomate y de secado y varias fincas de su natal Mendoza fueron vendidas a Polo Industrial, publica Clarín en su edición de hoy.
Esta empresa, mendocina de San Rafael, es propietaria de Bodegas Santos de la Rosa, que comercializa los vinos Cavas San Julián.
Con este paso, Cartellone conducida por la tercera generación de la familia que fundó la compañía hace 90 años, da una vuelta de página al proceso de diversificación industrial que había iniciado en 1969 hacia los alimentos y las bebidas, consigna el matutino.
Esa división se dedica a la producción, comercialización y exportación de vinos embotellados, mostos concentrados y productos, como el rubro tomates que acaba de transferir.
En la construcción, Cartellone lleva adelante la línea H de subterráneos y entre sus pergaminos se cuenta la represa de Piedra el íguila, autopistas, puentes, tendido de redes eléctricas, minas y obras en Ecuador y otros países de la región.