"No hay un criterio único frente a la recuperación de empresas"

Exitoso como abogado y recuperador de fábricas, Diego Gabriel Kravetz aceptó en el 2003 un ofrecimiento para encabezar la nómina de legisladores porteños del Partido de la Revolución Democrática. Una vez dentro de la Legislatura se fue a presidir el bloque kirchnerista, cosa que hace actualmente, a la vez que es el jefe del Partido para la Victoria de la Ciudad.

Para los comicios de octubre logró ubicar a dos candidatos propios en lugares de privilegio en la nómina de diputados de la Ciudad: Silvia La Ruffa (3º) y Miguel "Mope" Eviner (10º), lí­der del poderoso PJ de Lugano.

Llegó a la Legislatura porteña con una vasta trayectoria en la recuperación de empresas, y de inmediato se convirtió en el presidente del bloque kirchnerista. En diálogo con Infobae, Diego Kravetz explicó la lógica jurí­dica de las cooperativas y también el modelo de desarrollo productivo que representan.

–¿Cuál es el marco legal a través del cual un grupo de empleados puede "recuperar" una empresa?
–El artí­culo 190 de la Ley de Quiebras permite a los ex empleados de la fallida solicitar la continuidad de la explotación siempre que estén conformados como cooperativas de trabajo y bajo la supervisión de la sindicatura. Esta reforma del artí­culo 190 que data del 2002 resulta inaplicable por la metodologí­a y los plazos que impone, que no reflejan la realidad ni de una empresa en crisis ni de un trabajador que ve peligrar su fuente de trabajo. Habitualmente esto último no se realiza en la práctica, por lo que la gestión queda enteramente a cargo de la cooperativa, la cual se constituye en tenedora de los bienes muebles e inmuebles. Posteriormente, a través de un proyecto de ley de declaración de utilidad pública y de expropiación que se vota en la Legislatura de la jurisdicción donde esté la empresa o la fábrica, se le da la tenencia definitiva con cargo de devolución de los valores que deba pagar el Estado por la expropiación.

–¿Existe un criterio único de la Justicia frente a la recuperación de empresas?
–No, porque muchos juzgados nacionales donde tramitan las quiebras no son tan permeables a favorecer los derechos sociales de los trabajadores frente a los derechos de propiedad de los acreedores. Además, se plantean algunos problemas en cuanto a la jurisdicción por ser leyes provinciales o equivalentes en el caso de la Ciudad frente a la Ley de Quiebras nacional. En este momento cabe mencionar que existen en el Congreso de la Nación proyectos de modificación de la ley 24.522 que zanjarí­an estas diferencias.

–¿La cooperativa se hace cargo de las deudas, de la responsabilidad legal y de las cuestiones que dejan pendientes los ex propietarios?
–El dinero que paga el Estado en concepto de indemnización por la expropiación es depositado en los expedientes y ése es el dinero que utiliza la sindicatura para satisfacer las acreencias de la masa de la quiebra. Las responsabilidades que les pudieran caber a los ex propietarios son una cuestión exclusivamente legal, independiente del tema económico. A partir de acá, las responsabilidades legales son asumidas por la cooperativa como una nueva empresa que compite en las mismas condiciones que cualquier otra dentro del mercado económico.

–¿En la mayorí­a de los casos necesita recurrir a subsidios del Estado?
–No, la mayorí­a comienza sus actividades económicas trabajando a faí§ón hasta constituir un capital de trabajo propio que le permita independizarse económicamente.

–¿Cuál es la respuesta polí­tica frente a la recuperación de fábricas?
–La respuesta polí­tica es variada. Se podrí­a decir que los poderes Ejecutivos en las distintas provincias se mostraron a favor y en las Legislaturas respectivas se encontraron resistencias de los sectores de derecha. Respecto del gobierno de Kirchner siempre nos sentimos apoyados durante el proceso y eso ocurre asimismo al dí­a de hoy.

–¿La experiencia de las fábricas recuperadas muestra que a la larga las fábricas terminan funcionando o efectivamente queda claro por qué fueron a la quiebra?
–La mayorí­a de las empresas logran un desarrollo igual o mejor que cualquier otra de la competencia del mismo sector. Este proceso es retrasado en algunas por la falta de apoyo del Estado y del sector financiero en préstamos o subsidios.

Puntos de referencia

• Quedan por recuperar
  Hoy por hoy hay alrededor de 150 fábricas recuperadas en todo el paí­s. Y en ví­as de recuperación hay alrededor de una docena debido a que no hay la misma cantidad de quiebras que en la crisis.
  
  
• El papel de los sindicatos
  En algunos casos apoyaron el proceso para conseguir el mantenimiento de la fuente de trabajo y en otros se opusieron tajantemente porque las fábricas convertidas en cooperativas quedan fuera del régimen de sindicalización. La UOM Quilmes y el Sindicato Gráfico fueron los gremios que más apoyaron.
  
• Maderera Córdoba
  En todos los casos de expropiaciones se declara la utilidad pública sobre la totalidad de los bienes muebles e inmuebles que estaban integrados al funcionamiento de la fábrica quebrada. En el caso puntual de Maderera Córdoba hacia propiedades que estando integradas al funcionamiento de la fábrica no pertenecí­an a Maderera Córdoba S.A. sino a la señora Biglia y su hija, pero como en los clásicos manejos de algunos empresarios estos bienes terminaron a su nombre porque en algún momento pertenecieron a la quebrada habiendo cambiado la titularidad a favor de las mencionadas personas que a su vez eran presidenta y vicepresidenta de la quebrada.
  

Francisco Martirena
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