A las telcos, la suba de tarifas no les alcanza: antes de invertir en el paí­s, piden cambio de reglas

La cosa es así. El Gobierno quiere que las empresas de telecomunicaciones aceleren sus inversiones, que este año superarán los $30.000 millones. Las compañías quieren que el Gobierno vaya más rápido y que tome básicamente dos decisiones cuanto antes: que se establezca una norma que permita instalar antenas en todo el territorio nacional y que parte del espectro radioeléctrico para dar 4G por el que ya pagaron más de US$ 1.700 millones les sea entregado para poder mejorar la calidad de servicio.

La demanda por agilizar inversiones se escucha de boca del propio ministro del sector, Oscar Aguad, desde que asumió en su cargo. Y a casi cuatro meses de ese hecho esta vez las operadoras de telecomunicaciones también dieron su visto.

Algo así como: "Ok, está todo bien. Nosotras queremos invertir porque la demanda de los usuarios es tremenda. Pero también necesitamos que el Gobierno haga su parte". Este entrecomillado no es real, es pura interpretación, pero resume muy bien lo que sí dijeron las compañías durante el foro El Ecosistema móvil en Argentina", organizado por la GSMA, una organización que fomenta el desarrollo de la infraestructura móvil y los servicios a nivel mundial.

Cuando las empresas de telecomunicaciones dan su diagnóstico sobre el marco son duras. Juegan fuerte. Y también exponen el tema en términos de falencias de infraestructura, el concepto que hoy se escucha en cada foro empresario que aborde a cualquier sector.

"Argentina es un caso dramático en lo que es infraestructura. Somos la capital de los agujeros negros en el despliegue de infraestructura. Esto es porque cada municipio dispone dónde hay que colocar una antena o dónde no. Y esto es un tema de agenda", disparó, para comenzar a sazonar el encuentro, Alejandro Quiroga, director de relaciones institucionales y asuntos públicos de Telecom Argentina.

"Argentina tiene que dar un paso gigantesco para resolver esto, para poder hacer un despliegue de infraestructura rápido. Venimos con un déficit de arrastre pero estamos urgidos por poder ser más veloces en el despliegue. Lo que necesitamos es un plan con medidas claras, concretas, porque lo que resuelve los problemas son las acciones. Esperamos conseguir las medidas porque Argentina tiene que hacer un cambio radical en esto", agregó el ejecutivo de Telecom.

El guante que tiró Quiroga fue tomado por su tocayo de Telefónica de Argentina, Alejandro Adamowicz, director de regulación de la compañía. "Para que las compañías invirtamos tiene que haber espectro y sitios. Hoy más del 40% de nuestro tráfico circula por las redes 4G. Y hay por lo menos 50 municipios donde hay normativas que prohiben la instalación de antenas", advirtió el ejecutivo.

Lógicamente, Claro siguió la línea. "Necesitamos espectro, antenas y equipos. Pero cada municipio tiene su librito, sus tasas municipales. Es un tema que hay que encarar con el regulador. Es necesario que se alineen (criterios a nivel nacional) porque el usuario pide que el servicio funcione bien pero no quiere la antena y eso es una contradicción. Es un trabajo difícil, pero se debe tratar de facilitar esta cuestión", sostuvo Tomas Mihura Gradin, director de relaciones institucionales de Claro Argentina.

Desde Telecom, Quiroga, insistió: "La calidad es el resultado de las decisiones que se toman antes. Acá es fundamental tomar decisiones que la Argentina necesita para acelerar medidas de decisión innovadoras y audaces para aprovechar todos los recursos. Hay que cambiar lo que se venía haciendo", disparó el ejecutivo.

Una de esas medidas que piden es que haya procedimientos abreviados para instalar antenas. Que las habilitaciones salgan rápido y que, además, se puedan construir redes en dos capas, como en otros países del mundo. Es decir, utilizando azoteas de edificios y los postes de las luminarias, especialmente cuando se trata de zonas densamenta pobladas.

"La Argentina debería duplicar como mínimo la cantidad de sitios que hoy tiene en los próximos tres años. La ley Argentina Digital dice que el servicio móvil es de interés público y para eso se necesita hacer un trabajo de infraestructura enorme", amplió.

¿Acaso mi plata no vale?

El foro fue aprovechado por las empresas de telecomunicaciones para pedir sin tapujos. Cuando se licitó el espectro para dar el servicio 4G, las empresas participantes se adjudicaron porciones en dos bandas distintas.

Una de ellas es la que está soportando los actuales servicios de 4G, pero la restante -en la jerga técnica, la de 700 Mghz- aún no fue entregada. Y eso porque esa parte del espectro está siendo utilizada por dos empresas que brindan servicios de televisión, a las que el Gobierno les ha pedido que dejen de operar en esa frecuencia pero no les termina de indicar a cuál deben pasarse.

"Pedimos que nos dejen usar el espectro que compramos", insistió Quiroga. Esto resulta fundamental para zonas de alta densidad de población, como Buenos Aires, donde hay muchos edificios y donde el servicio llega bien hasta el octavo piso. Pero luego, la señal se debilita, con todas las dificultades que eso genera, comenzando por el corte de las llamadas.

Que pueda usarse la banda de 700 Mghz que, con justicia, reclaman las operadoras móviles, podría resolver el problema de la debilidad de la señal en edificios luego del 8° piso y mejorar la calidad del servicio. Básicamente, que no se corte.

Luego fue el turno de los CEO de esas mismas compañías. Como en los viejos tiempos (es decir, antes del kirchnerismo), coincidieron en la necesidad de contar con reglas claras y un marco jurídico estable porque es la manera de garantizar inversiones. Especialmente porque la demanda por servicio de parte de los usuarios crece de manera exponencial cada año.

Elisabetta Ripa, directora general ejecutiva de Telecom Argentina, destacó que era la primera vez que estaban las tres empresas de telecomunicaciones juntas en un encuentro de este tipo, y se mostró sorprendida por la velocidad con que los argentinos adoptan los servicios.

Rippa es italiana -ejecutiva proveniente de Telecom Italia que acaba de desprenderse de su participación en esta compañía a manos de Fintech- y resaltó que el consumo de internet en pantalla móvil en el país es con 4,2 horas diarias, dos veces más alto que el promedio de los países desarrollados.

Por eso quiso "reafirmar el compromiso de inversión y de desarrollo de servicios para el cliente. Esto implica que la calidad sea un tema de agenda, para también brindar servicios de valor agregado. La industria móvil genera empleo y aporta a la economía. Por eso el desarrollo de las telecomunicaciones necesita de un marco regulatorio claro, reglas bien definidas y cooperación entre el sector público y el privado", dijo Rippa.

A su turno, Julio Carlos Porras Zadik, director general de Claro Argentina, pidió "reglas de juego claras y equitativas que garanticen la sustentabilidad de los operadores, y los derechos del consumidor. Los cambios de consumo avanzan a un ritmo vertiginoso y nos dejan atrás. La demanda de datos y de requerimientos de inversiones son ilimitados y necesitamos que el Estado nos acompañe en esto. El desarrollo de la infraestructura móvil es sinónimo de desarrollo y exige un trabajo conjunto entre todos".

Finalmente, Federico Rava, presidente de Telefónica de Argentina, indicó que "la industria pretende reglas de juego estables y dar respaldo a la innovación. En estos últimos 10 años hemos sido desafiados por un aluvión de datos. Lo que antes era un teléfono móvil en 2020 se preguntarán por qué lo llamábamos teléfono. El tráfico de datos se duplica año a año y es necesario dar respueesta a ese aluvión de datos". Y propuso trabajar en tres frentes: infraestructura, cobertura y calidad de servicio.

Hasta acá, las posturas de las telcos. Y llegó el turno del Gobierno. El ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, expresó que estamos, a nivel de nuevas tecnologías, en un momento de cambio a nivel mundial y que si el país se queda rezagado en la materia se estará "condenando a nuestra gente. Hoy las comunicaciones influyen en el desarrollo del país. Y conectar con banda ancha al país es el desafío de este ministerio".

El funcionario invitó a los operadores a invertir y a competir sanamente. "Estamos dispuestos a fijar reglas y un marco regulatorio estable, y a cumplirlas. Conectar al país con banda ancha es un desafío de todos", enfatizó.

En el tono campechano que caracteriza al ex diputado insitió en la necesidad de trabajar en conjunto y en destacar que esa cartera se moverá en tres ejes: transparencia, competencia y derechos del usuario.

Luego de su exposición, tanto Aguad como Miguel de Godoy, presidente del Ente Nacional de las Comunicaciones (Enacom) ampliaron sus posturas.

Y así como señalaron que cuando se ponga en marcha el Plan Canje no se resolverán todos los problemas de las comunicaciones móviles "limpiar el espectro no significa que sólo no esto vayan a haber mejoras", dijo Aguad. "Si no, parece que todos los reclamos vienen para este lado -alertó de Godoy- Pero las empresas tienen que acelerar sus inversiones".

Sobre las antenas, también se mostraron sorprendidos por los reclamos. Señalaron que ya están trabajando con las empresas de manera conjunta. "Entendamos esto. La clave es la inversión", concluyó Aguad. Como para que quede claro.