En medio de la grave crisis económica que afecta al país, una importante actividad productiva de la Provincia de Buenos Aires podría recibir un duro golpe que afectaría a la continuidad de empresas y empleos.

Se trata de la industria del tabaco, cuya labor está en riesgo de detenerse debido a un proyecto de Ley que busca establecer en el territorio bonaerense la prohibición de venta, publicidad y exhibición de productos de tabaco y otros dispositivos relacionados –como los de vapeo– en los puntos de venta.

Todos actores relacionados con el sector, entre los que se encuentran las empresas productoras, las distribuidoras, los kioscos y los gremios, se encuentran en alerta por el proyecto que se encuentra en discusión en la Cámara de Diputados de la Provincia.

"De aprobarse esta regulación, que no ha contado aún con el debido debate para analizar su impacto económico sobre todos los actores de la cadena comercial, será inevitable la pérdida de empleos y sustento para todas las familias involucradas en la actividad, en momentos en los que se profundiza la crisis económica persistente", señalaron desde la Cámara de Distribuidores de Tabacos en una carta enviada al presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Federido Otermín.

Y argumentaron: "La ley nacional 26.687 de control de tabaco ya regula sobre este aspecto, por lo que sostenemos que es innecesario y perjudicial sancionar una ley que afectaría de manera directa la subsistencia de los distribuidores en el ámbito provincial".

La Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires realiza un planteo similar y subrayó que esta iniciativa no fue dialogada con las organizaciones empresariales, las empresas del sector ni los sindicatos de las actividades afectadas. Por eso, pide ser incluida en las conversaciones que se den sobre el proyecto.

"Consideramos de suma relevancia poder manifestarles el impacto negativo que esta norma tendrá en caso de aprobarse, entre las que se encuentran no sólo la pérdida de puestos de trabajo en la producción y comercialización, sino que se afectaría directamente la recaudación del Estado y de las provincias productoras", advirtieron.

Incertidumbre entre los trabajadores

Por su parte, los sindicatos SUETRA y FTTRA manifestaron su "profunda preocupación" sobre el proyecto de Ley provincial D-2513/21-22 y su impacto negativo sobre el empleo.

"Si se llega a sancionar esta iniciativa legislativa, un número importante de personas que trabajan verían sus puestos afectados, aun en actividades comerciales no tabacaleras como son aquellas vinculadas a la publicidad", explicaron en un comunicado enviado a Diputados.

Los gremios también afirmaron que "en algunos aspectos es incongruente pues equipara y da igual tratamiento a todos los productos derivados del tabaco con aquellas de riesgo reducido".

Según argumentaron, el proyecto no tiene rigor científico y destacaron que la fabricación de productos de bajo riesgo es el futuro de la ocupación laboral en el sector tabacalero argentino.

"Una medida legislativa de tal característica va contra el futuro, pues desaliente la reconversión de la industria, que, desde hace años, viene buscando alternativas para reducir riesgos a las personas que consumen tabaco", indicaron.

Los kioscos afirman que el proyecto condenaría al cierre a una gran cantidad de locales.

Impacto en los kioscos

Si se llega a aprobar la nueva normativa, todos los kioscos deberán adaptar su mobiliario para que los productos no sean visibles de ninguna forma por el consumidor y los kioscos que se encuentran a 100 metros de distancia de establecimientos de educación básica y media tendrán prohibida la venta de tabaco.

Desde UKRA (Unión de Kiosqueros de la República Argentina) rechazaron el proyecto y manifestaron que se trata de una reforma "innecesaria y perjudicial, ya que afectaría de manera directa el ejercicio y subsistencia de los más de 26.000 puntos de venta en la Provincia".

"Nos sorprende que impulsen una iniciativa que limita aun más nuestra golpeada actividad, sobre un producto que compone una parte importante de nuestra actividad", enfatizaron.

Y agregaron: "Desde que empezó la cuarentena y durante todas sus fases, los kiosqueros nos vimos impactados con ventas que cayeron hasta un 80%. Hubo meses de facturación mínima, y detrás de esto, ahora se pretende aprobar una medida que restringe y prohíbe la venta y promoción de los productos de trabajo que va a castigar aun más las ventas".

Un proyecto sin diálogo y con impacto fiscal

Las distintas agrupaciones que salieron a manifestarse en contra del nuevo proyecto para frentar la venta de tabaco coincidieron en que la iniciativa se gestó sin diálogo alguno. Por eso, en todos los casos reclamaron ser incluidos en las conversaciones y debates, para que sus situaciones sean tenidas en cuenta.

Además, se destacó el aporte fiscal que realiza la actividad productiva y comercial del tabaco en la Provincia de Buenos Aires, que podría verse notablemente mermada de llegar a aprobarse una nueva ley.