El auge de la escalada en Argentina: cuánto sale aprender este deporte y dónde hacerlo
La escalada dejó de ser un deporte extremo, reservado para aventureros experimentados y hoy suma adeptos de todas las edades en Argentina. Según la Federación Argentina de Ski y Andinismo (FASA), el 69% de los escaladores son hombres, aunque la participación femenina crece año a año. Mientras que Capital Federal, Gran Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires concentran la mayor cantidad de escaladores amantes de la montaña y la naturaleza, provincias como Mendoza y Salta también viven un auge en la actividad.
Las redes sociales y el ingreso de la escalada en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 fueron clave para disparar su popularidad. "El boom es innegable", afirman Lucas Flores y Federico Rogosz, fundadores de El Templo, una palestra indoor en Berazategui, Provincia de Buenos Aires. "La visibilidad que obtuvo la escalada la convirtió en un deporte más atractivo. Además, se produjo un cambio de concepto enorme: se dejó de pensar en la escalada como un deporte exclusivo para unos pocos dotados y pasó a ser una actividad accesible para todos los que quieran probarla".
Desde su fundación en 2023, El Templo cuenta con alrededor de 90 clientes inscriptos que van desde los 5 años hasta adultos mayores de 60. "Muchos llegan buscando una alternativa al gimnasio tradicional y encuentran una forma divertida de entrenar", cuenta Rogosz.
La escalada mejora la fuerza, el equilibrio, la coordinación y la resistencia, pero también impacta en lo emocional. "Te enseña a manejar la frustración, a concentrarte y, sobre todo, a confiar en vos mismo. Superar un reto que parecía imposible es una sensación única", afirma Flores.
En El Templo se especializan en boulder, una modalidad sin cuerdas ni arneses que se practica en muros bajos protegidos por colchones de espuma de alta densidad. "Para ampliar la experiencia, este año tenemos proyectado incorporar un muro de dificultad que sí requiere elementos de seguridad como cuerda, arnés y casco", adelantan.
Cabe aclarar que los profesores están capacitados por FASA y otros entes reconocidos, y cuentan con entre 7 y 20 años de experiencia escalando en muros y en la montaña.
Escalada en la naturaleza: adrenalina y paisajes
Para quienes buscan aventura al aire libre, Terreno Mixto ofrece expediciones a destinos icónicos. "La Patagonia es el paraíso de la escalada y el trekking, pero hay también lugares espectaculares en Córdoba, Mendoza y Buenos Aires", cuenta Mónica Cutullé, cofundadora del proyecto dirigido a personas sin experiencia o con poca experiencia que deseen vivir una aventura en la montaña.
Las salidas de bautismo en roca suelen realizarse en Sierra la Vigilancia (Balcarce), el centro de escalada más grande de la provincia de Buenos Aires, mientras que las excursiones de trekking se realizan al Cerro Tres Picos (Sierra de la Ventana), el pico más alto de Buenos Aires con 1239 metros sobre el nivel del mar. "Diseñamos experiencias completas: escalada, trekking, rappel, cena con charla bajo las estrellas y dormir en un refugio. Queremos que se lleven algo más que un día de deporte, que vivan la montaña", destaca Cutullé.
La escalada en roca y el trekking suelen combinarse en las salidas a la montaña. Mientras que escalar implica trepar paredes verticales utilizando manos y pies y requiere elementos de seguridad específicos (cuerda, casco, arnés, entre otros), el trekking consiste en caminar por terrenos con desnivel, donde las manos solo se usan ocasionalmente para sortear zonas más escarpadas.
Sin embargo, las excursiones de Terreno Mixto ofrecen algo más que deporte. "Viene mucha gente a la que le gusta la aventura, pero no encuentra compañeros para estas salidas, y acá los encuentran. Es mucho más que escalar: es la gente, la naturaleza, las risas, los recuerdos. Hay todo un mundo alrededor. Además, uno vuelve con otro concepto de sí mismo, porque se da cuenta de que puede lograr cosas que creía difíciles o imposibles", sostiene Cutullé.
En El Templo también fomentan el compañerismo: "Nos enfocamos en crear comunidad. Ver cómo los escaladores se apoyan entre ellos es increíble", dice Rogosz.
Además, celebran la creciente participación femenina. "Cada vez vienen más mujeres y escalan muy fuerte", afirma Flores. Proyectos como Escaladoras de Zona Sur refuerzan esta tendencia con actividades y capacitaciones exclusivas.
Accesible y seguro: barreras que se caen
A diferencia de lo que muchos creen, iniciarse en la escalada no requiere una gran inversión. "En la palestra podés empezar con las zapatillas que tengas. Si te gusta, después vas sumando equipo de a poco", explica Rogosz.
Para las salidas a la roca, desde Terreno Mixto destacan que tampoco es necesario comprar equipo propio. "La idea es que puedan venir con lo que tienen en casa o con cosas fáciles de conseguir. Todo el equipo técnico lo ponemos nosotros e incluso prestamos abrigo, mochilas u otros elementos si hace falta", detalla Cutullé.
En cuanto a costos, El Templo ofrece mensualmente clases con profesor por $30.000 o acceso libre al muro por $20.000. También hay opciones por clase: $8.700 con profesor o $6.000 por día para escalar sin instructor. Además, tienen promociones para grupos familiares y lanzan ofertas especiales en fechas determinadas, como 2x1.
Terreno Mixto cobra entre $180.000 y $220.000 por fin de semana, con reprogramación en caso de lluvia. El precio incluye equipo técnico, comidas, alojamiento, seguro y cobertura fotográfica (se entregan fotos digitales). Los grupos son reducidos —de hasta 20 personas— con un instructor cada 4 o 5 participantes, para asegurar atención personalizada. "Nos gusta charlar, conocer a cada uno y llamarlos por su nombre", resalta Cutullé.
Todo indica que la escalada llegó para quedarse. "La comunidad crece día a día y el interés no baja", afirma Rogosz. Para Cutullé, la clave está en la conexión con la naturaleza: "Todo lo que es actividad al aire libre explotó con la pandemia. Surgió una necesidad de salir, respirar aire puro y moverse. Además, con las redes sociales, muchos descubrieron que esto es accesible y que hay opciones para todos. Es contagioso: ves que otro pudo y te dan ganas de probar".
Ya sea en un muro indoor o colgado de unas de las tantas rocas argentinas, la escalada se consolida cada vez más como un deporte que desafía cuerpos y mentes, pero sobre todo, invita a descubrir nuevas alturas.