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Franquicia low cost: cuánto hay que invertir en un salón de belleza especializado en uñas y pestañas

Con 10 locales propios y 40 franquicias, KaWirth apuesta a crecer en el interior del país con un modelo rentable y rápido de implementar
17/05/2025 - 08:13hs
Invertir en belleza: cuánto cuesta y qué ofrece una franquicia de KaWirth

Con 50 puntos de atención entre franquicias y locales propios, Ka Wirth se posiciona como una de las cadenas de estética especializada en uñas y pestañas con mayor crecimiento del país. Fundada en 2016 por Karina Wirth y su pareja Ariel Godoy, la marca nació de un sueño personal que tomó forma en un pequeño local oculto en una galería de Villa Lugano (CABA). Con trabajo sostenido y visión estratégica, logró consolidarse como una oportunidad de inversión en el sector de la belleza, con presencia en la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense y la provincia de Mendoza.

La historia de Ka Wirth está marcada por la resiliencia y la reinvención. Karina Wirth era jugadora profesional de básquet e integró la selección nacional, pero para pagar las cuentas trabajaba como administrativa en el sector de la salud. "Ese trabajo no me gustaba, era lo que me servía para tener un sueldo a fin de mes, pero no me hacía feliz, por lo tanto, me constaba mantener cierta estabilidad", cuenta. Su verdadera pasión estaba en otra parte: desde chica soñaba con dedicarse a la belleza de manos.

El punto de inflexión llegó cuando la despidieron y, aunque fue traumático, ese momento fue el empujón que necesitó para animarme a cumplir su sueño. Tímidamente, empezó atendiendo a algunas clientas en el living de su casa y fue allí donde Ariel, su marido, notó el potencial del emprendimiento:

"Me acuerdo de que me tomé una licencia en el trabajo, durante una semana estuve en mi casa y noté con sorpresa lo bien que Karina estaba trabajando y entendí que ahí había algo, que había que salir a vender un servicio", recuerda. Peleando el precio y llevando muebles que tenían en su casa, inauguraron su primera sucursal Ka Wirth en un pequeño local escondido en el tercer piso de una galería en Lugano.

En esos años, los centros de uñas no eran comunes. El servicio se ofrecía solo en peluquerías, por lo que, aun sin vidriera a la calle, las clientas llegaban igual, incluso desde otros barrios. "Muchas venían de Mataderos, así que fui a ver por qué. Claro, no había nadie que ofreciera ese servicio. Le dije a Karina: ‘Gorda, vamos a poner más locales’", cuenta Godoy.

Antes de la pandemia, Ka Wirth ya contaba con cuatro locales propios. El crecimiento era sostenido, pero un episodio inesperado marcó el inicio de una nueva etapa. "Una clienta me llamó y me dijo que nos preparemos, que a las 19 nos pasaba a buscar una camioneta. No sabíamos si nos estaban secuestrando, - acota entre risas-. Llegamos al centro de Laferrere hasta la puerta de un local. No podía creer lo que estaba viendo era todo hermoso, todo en negro y rosa, muebles de diseño, varios espacios para atender a la vez", relata Wirth. La clienta había invertido en un centro de estética y les ofrecía asociarse: ella tenía el local, pero necesitaba el know how del matrimonio.

A pesar del entusiasmo, la respuesta fue no. "Entendimos que la diferencia entre esa mujer y nosotros era la plata. Ella la tenía, nosotros no. Pero sabíamos cómo convertir una idea en un negocio", dice Godoy. Así fue como decidieron lanzar su modelo de franquicias. Se contactaron con el consultor Jorge Bliman, desarrollaron los manuales operativos, estandarizaron procesos y profesionalizaron la gestión. Fue una solución win-win: ellos ponían el know-how y el franquiciado, el capital.

Cuánta plata necesitas para abrir una franquicia Ka Wirth

Desde entonces, y en cinco años, pasaron de 4 a 10 locales propios y de 0 a 40 franquicias operativas. Este año ya tienen dos más próximas a inaugurar y esperan cerrar entre cinco y seis nuevas ventas. La marca tiene presencia en CABA, Gran Buenos Aires y, desde hace poco, también en Mendoza. "Este año es complicado, la gente no sabe qué hacer con sus ahorros. Pero este es un negocio sencillo y que funciona muy bien. Nos interesa llegar a grandes ciudades como Rosario o Córdoba", afirma Godoy, responsable de la expansión.

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En cinco años pasaron de 4 a 10 locales propios y de 0 a 40 franquicias operativas.

Ka Wirth ofrece un modelo de franquicia "llave en mano". Para abrir un local de 45 metros cuadrados, la inversión estimada es de u$s28.000. "En 35 días entregamos el local listo para operar", asegura Godoy. 

El tiempo de recupero está estimado entre 16 y 18 meses y se necesitan unos cuatro empleados por local. Además, cuentan con una academia propia donde capacitan tanto al franquiciado como al personal.

En cuanto al perfil de franquiciados, son flexibles: pueden ser franquiciados activos o inversores puros. "Tenemos modelos de trabajo para ambos casos", señala Godoy. Sin embargo, el proceso de selección es riguroso. "No tercerizamos la elección del franquiciado. Somos nosotros personalmente quienes, tras varias entrevistas, decidimos a quién confiarle o no la marca", destaca Wirth.

El diferencial, explican, está en los precios accesibles y las promociones constantes. Hoy, el ticket promedio ronda los $22.000, lo que garantiza un flujo de clientas permanente. "Nos enfocamos en que el negocio esté siempre en movimiento", dice Wirth. De hecho, varios de sus franquiciados ya abrieron segundos y hasta terceros locales. ¿La mayoría mujeres? No necesariamente: el 50% de los franquiciados son varones.

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Hace unos pocos meses, lanzaron perfumes, body splash y productos de marroquinería

Este año, además, sumaron nuevas unidades de negocio a Ka Wirth: dos líneas de perfumes y body splash y una línea de marroquinería que venden en sus locales, las franquicias y en su tienda online. "Es muy reciente para hablar de resultados, pero seguramente estos productos ayudarán a acortar aún más los tiempos de recupero de la inversión", dice Godoy. Y no se detienen: trabajan para lanzar su propia línea de insumos profesionales, actualmente abastecidos por proveedores locales.