Pasó de recargar matafuegos en un local a crear una empresa de ingeniería contra incendios
En sus inicios, 45 años atrás, Ranko era un pequeño local de venta y recarga de matafuegos, fundado por el padre de Pehuen Cittadini, hoy CEO de la empresa, y un ex socio. "En 2015 me uní y detecté en el mercado una oportunidad de mejora para el negocio. A partir de ello, fue evolucionando y creciendo", cuenta a iProfesional. "Las normativas y la seguridad contra incendios empezaban a exigir algo más que simplemente recargar extintores", recuerda.
Además, sigue, "en el sector había – y sigue habiendo - mucho desconocimiento e informalidad de las empresas que instalaban los sistemas contra incendios por lo que vi la oportunidad de convertir a Ranko en una empresa especializada en ingeniería contra incendios certificada".
Uno de los grandes hitos para la empresa fue la decisión de desarrollar diferentes procesos e incorporar tecnología. Según recuerda Cittadini, en ese momento el negocio estaba estancado. "Con procesos mínimos, decisiones postergadas y una visión que apenas iba más allá de lo necesario para mantenerse a flote. Y si queríamos hacer ingeniería contra incendios, había que empezar a ordenar procesos, a profesionalizar cada área y, sobre todo, a cambiar la visión", relata
El difícil camino hacia la profesionalización de la empresa
"En 2019 pasé a ser socio de la empresa y tomamos la decisión de incorporar colaboradores que permitan profesionalizar cada sector. Ya teníamos diferentes unidades de negocio y necesitábamos ir generando desde los mandos medios una profesionalización diferente a la que veníamos haciendo", detalla.
"En ese contexto, comenzamos a gestionar la organización de la empresa, a ofrecer soluciones a medida y anticiparnos a las necesidades del mercado, cumpliendo con las normativas de GCBA e IRAM", comparte. "Para hacerlo posible, debíamos contratar profesionales especializados, como ingenieros, arquitectos, técnicos", completa.
Este proceso no fue fácil porque, según expresa el CEO, había resistencia al cambio. "Recuerdo cuando compartí la idea de contratar a un ingeniero, algunos decían: "¿Para qué?, ¡Si ya está inventado el matafuego! Gracias a la constancia y a los resultados que estábamos obteniendo prevaleció mi visión. Finalmente, mejoramos los recursos, aprendimos y nos apalancamos de profesionales que saben del tema, generando confianza".
Así lograron darle la impronta que buscaban y pasaron de ser solo "la tienda de matafuegos" a lo que es hoy Ranko: una empresa especializada en ingeniería contra incendios certificada.
El core del negocio sigue siendo el mantenimiento de todos los sistemas de protección contra incendios. "Hoy hay mucho desconocimiento en lo que es protección contra incendio, tanto desde lo legal como también de la protección propiamente hecha, la prevención", explica Cittadini. "Creemos que la primera prevención es la capacitación, entonces estamos tratando de darle mucha fuerza en capacitar y generar conciencia", explica.
A su vez, comparte el ejecutivo, "venimos creciendo en reparaciones de obras y desarrollos de ingeniería, y ofrecemos otro tipo de servicios como limpieza de tanques de agua y de campanas gastronómicas".
En la empresa hoy trabajan de forma directa 50 personas, algunos profesionales licenciados en la administración de empresa, ingeniería, técnicos y arquitectos y maestros mayor de obra.
Luego, agrega, "de forma indirecta 30 personas más, por contratos, por proyectos, nos apalancamos mucho con profesionales externos, también asesores que dan capacitación y acompañamiento al equipo. Tratamos de construir una red de profesionales del rubro de protección del incendio que nos acompañen en proyectos y que puedan cumplir y tener una previsibilidad en cada proyecto.
La actualidad del segmento
Desde la mirada del ejecutivo, "hoy hay muchos comerciantes que quieren incursionar en el rubro de reutilización contra incendios que desconocen y no tienen el expertise, la información o el profesionalismo para acompañar a sus clientes sobre todo en el desarrollo y en el diseño de un sistema de protección que requiere mucho conocimiento".
En este sentido, destaca para concluir: "Vemos mucha oportunidad en la capacitación, en explicar al cliente, en transformar una experiencia, que no lo piensen como un impuesto o un gasto más, sino como una inversión. Queremos seguir apostando al desarrollo de sistemas de protección de incendios a nivel nacional y también, por qué no, internacional".