La mayor distribuidora de gas logra reperfilar su deuda antes de ser privatizada
El proceso de privatización de la mayor distribuidora de gas de Argentina, que actualmente se encuentra bajo control de la petrolera estatal YPF, acaba de dar otro paso más hacia su concreción.
Se trata de Metrogas, que fue fundada en 1992, para participar del proceso de privatización de los servicios públicos que en esa década organizó el gobierno del expresidente Carlos Menem.
Actualmente, brinda servicios a 2.250.000 clientes y también es considerada como la tercera distribuidora de Sudamérica.
Su concesión abarca una superficie de 2.150 kilómetros cuadrados, y comprende las redes de distribución de Capital Federal y de varios partidos del Gran Buenos Aires como Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora, Quilmes, Berazategui, Almirante Brown, Florencio Varela, Esteban Echeverría, Ezeiza, Presidente Perón y San Vicente.
Metrogas: tarifas y concesión
La empresa viene recibiendo "ayuda" de parte del gobierno libertario que encabeza el presidente Javier Milei a partir de medidas que permitieron comenzar a recomponer su ecuación financiera mediante el proceso de revisión tarifaria dispuesto desde el desembarco de las nuevas autoridades a la Casa Rosada.
Ocurre que, durante los casi 15 años de gobiernos kirchneristas, la caja de la empresa y su situación financiera se fue deteriorando a partir del congelamiento tarifario y de un escenario de creciente inflación que la obligó a operar en un contexto de ingresos pisados y gastos en aumento.
De hecho, su liquidez se fue deteriorando, y durante los últimos años la sociedad ha tenido que refinanciar el capital de las deudas financieras a su vencimiento, incluyendo las refinanciaciones acordadas en 2024.
Pero, a partir de la implementación efectiva de los aumentos tarifarios otorgados por las autoridades nacionales desde el año pasado, junto con los ajustes periódicos realizados, si bien siguen estando aún por debajo del aumento general de precios en la economía, han contribuido a mejorar las expectativas financieras y de sus resultados.
Al mismo tiempo, Metrogas se encuentra a punto de lograr ampliar sus plazos de concesión, por lo menos hasta el 2032, a partir de un pedido de la propia compañía que las autoridades nacionales acompañan y que sería oficializado antes de que finalice este 2025.
La mayor distribuidora de gas recibe ayuda bancaria
Ahora, la empresa acaba de poder cerrar otro importante capítulo orientado a recomponer su situación y poder ser privatizada en un mejor contexto que el que venía sufriendo hasta la llegada de los libertarios a la Casa Rosada.
En ese marco, logró regularizar su deuda comercial y financiera mediante la toma de un préstamo en pesos a 26 meses que le permite saldar parcialmente dos compromisos importantes con la empresa estatal ENARSA y con su controlante, YPF.
El proceso de reestructuración de sus cuentas tiene como objetivo robustecer la salud financiera de la compañía para lo cual accedió a un préstamo sindicado por $88.770 millones que le fue otorgado por los bancos Galicia e ICBC Argentina, que se pagará en nueve cuotas trimestrales hasta noviembre de 2027.
Los fondos se destinaron a saldar deudas anteriores con ICBC y Banco Macro y a cancelar parcialmente obligaciones comerciales con ENARSA y con YPF.
Esos préstamos habían sido tomados en dólares en 2018 y reestructurados, en una primera etapa en 2020, cuando la deuda inició un proceso progresivo de pesificación.
Reperfilamiento de deuda: punto de inflexión
El nuevo compromiso, informado por Metrogas este jueves 4 de septiembre a la Comisión Nacional de Valores (CNV), considera condiciones de mercado en cuanto a moneda, tasa de interés y plazos, ya que será en pesos —la moneda en que se maneja la empresa— y en un plazo mayor a dos años.
De acuerdo al documento, el monto del préstamo resulta inferior al EBITDA obtenido en 2024, "lo que refleja la capacidad de repago y la sostenibilidad de su estructura de capital".
Además, la operación refuerza la solidez financiera de Metrogas y le otorga mayor previsibilidad en un contexto de regularización y crecimiento para el sector energético.
Al respecto, Sebastián Mazzucchelli, CEO de Metrogas, calificó al acuerdo como "un paso clave para consolidar la estabilidad financiera de la empresa, ya que regularizar y dar previsibilidad a nuestra deuda y hacerlo a través de un préstamo en pesos demuestra la fortaleza de la compañía y nos permite enfocarnos en seguir invirtiendo para brindar un servicio seguro, eficiente y de calidad a nuestros más de 2,5 millones de clientes y generar valor para nuestras partes interesadas".
Para el ejecutivo, "este hito no solo marca un punto de inflexión en la estrategia financiera de la compañía, sino que también refuerza su control como actor clave en el sector energético argentino".
Ocurre que, al reducir su exposición a deuda en moneda extranjera y reperfilar los vencimientos, la empresa fortalece su balance y se posiciona con mayor solidez para acompañar los desafíos del mercado energético y garantizar el suministro a millones de hogares e industrias.
En concreto, el informe enviado a la CNV asegura que el directorio de la sociedad aprobó el contrato de préstamo sindicado que será cancelado en nueve cuotas trimestrales a partir de noviembre próximo y hasta noviembre del 2027.
Dicho préstamo sindicado se encontrará garantizado por un Fideicomiso de Garantía en virtud del cual se instrumentará la cesión fiduciaria a favor de TMF Trust Company (Argentina) y en beneficio de los bancos, de ciertos derechos de cobro derivados de la prestación del servicio de la empresa, presentes y futuros.
Además, la sociedad asume varios compromisos tanto de información como financieros, entre los cuales se incluyen mantener ciertos índices y ratios financieros y limitaciones para el pago de dividendos.