Crece el conflicto en un ícono de sweaters y jeans: promueve cientos de suspendidos y meses de parálisis

La situación de crisis que atraviesa el sector textil, derivado de la caída del consumo y la invasión de productos importados a través de plataformas online como Temu y Shein, sigue complicando a las compañías nacionales de ese rubro. En ese marco, Textilana, dueña de la marca Mauro Sergio y proveedora de Kosiuko, y su controlada Hilamar, es epicentro de conflictos tras informar que aplicará un cronograma de suspensiones de personal que se extenderá hasta bien entrado 2026. En un primer momento, la firma anticipó que frenaría el desempeño de 170 empleados, pero luego ese número se amplió hasta los 250 operarios. En torno a la compañía señalan que Textilana y Hilamar recortaron 150 puestos de trabajo entre despidos y retiros, sólo en los últimos años. La compañía podría entrar en fase de quiebra si no cambia la perspectiva comercial en el corto plazo.

Según indicaron fuentes de la Secretaría Adjunta de la Comisión Interna de Textilana, la semana pasada el plantel de empleados de la firma fue convocado por la empresa a una reunión en el Ministerio de Trabajo bonaerense.

Textilana propuso suspensiones masivas por al menos 6 meses

En ese contexto, la compañía "comunicó la decisión de la firma de paralizar la producción durante 6 meses y suspender al 80% del personal de Textilana y de Hilamar; en total unos 250 operarias/os".

"Junto a esta medida, quiere implementar la polifuncionalidad de tareas para quienes sigan trabajando. El día jueves 13 se realizó una asamblea en la fábrica donde participó casi la totalidad de los trabajadores, se puso a consideración el pedido de suspensión de la empresa", precisó la secretaría.

Al parecer, Textilana detalló que implementaría la suspensión de unos primeros 175 trabajadores, por el lapso de 6 meses y fijando tanto el cobro del 75% de los salarios de bolsillo como la división del aguilando en tres cuotas.

"Además estos cobros serían no remunerativos, sin los aportes a la seguridad social (jubilación)", indicó. Pero, tras arduas negociaciones, finalmente se llegó a un acuerdo para que "el pago de los meses de suspensión sea del 85% también para acortar la cantidad de meses y achicar las cuotas del aguinaldo".

"Basados en asambleas masivas de trabajadoras y trabajadores discutió se logró acortar los plazos a 4 meses y medios, el 78% del salario de bolsillo y el pago del aguinaldo en dos cuotas, la primera el 28 de diciembre y la segunda el 8 de enero y se rechazó en forma contundente la polifuncionalidad de tareas", afirmaron las fuentes.

Desde la Secretaría se subrayó la brutal caída del consumo como el aspecto que talla en crisis como la que atraviesa Textilana. También se señaló que la "avalancha importadora afecta a todas la industria y en particular a la textil".

Textilana ya aplicó despidos

Durante la primera mitad del año, Textilana, un ícono de los hilados de Mar del Plata, desaceleró su labor casi un 20% y aplicó una primera ola de 50 cesantías.

En torno a Textilana reconocen que, además de las importaciones, la comercialización también bajó por "la caída en el poder adquisitivo de la población, el cual impacta especialmente en el rubro textil".

"Esto nos obligó a hacer una reestructuración y bajar los niveles productivos un 18% por la falta de demanda. Hoy la planta continúa operando, enfocada en sostener los niveles de producción", indicaron fuentes ligadas a la firma durante el semestre inicial de 2025.

"Hubo un cierre de temporada, que como todos los años implica ciertos ajustes, y también una readecuación del equipo en función de los niveles actuales de producción, que este año fueron más bajos por la caída general de la demanda. Fue un proceso necesario para poder seguir trabajando con foco en la sostenibilidad de la empresa", añadieron.

Según trascendió en agosto de este año, la compañía redujo su personal de 400 a 350 empleados entre enero y julio, y estacionó su nivel de fabricación en las 4.800 prendas diarias. Esto es, a un ritmo del 80% en términos de capacidad instalada operativa.