BBVA se lanza a vender autos y electrodomésticos
El grupo español BBVA ha puesto en marcha un plan estratégico a tres años centrado en la innovación y que tiene entre sus objetivos la captación de 8,5 millones de clientes en España, Portugal y Latinoamérica, hasta alcanzar en 2010 los 51 millones de usuarios.
Así lo explicó hoy el presidente de la entidad, Francisco González, en una conferencia de prensa previa a la convención con 2.000 directivos del grupo, en la que anunció que en España se pretende captar 1,5 millones de clientes (un millón de inmigrantes y 500.000 jóvenes); en México, 4 millones, y en América del Sur, 3 millones. Al tiempo, se duplicará la cartera de créditos en América, entre otras iniciativas.
El plan de innovación desarrollado por el BBVA, tiene como principal objetivo "facilitar el acceso a nuevos segmentos de la población a los servicios financieros y ampliar la oferta a otros productos y servicios no financieros". Para diferenciarlo de cualquier campaña promocional temporal, González recalca que "este plan es una cultura y una estrategia para innovar de forma continuada que nos va a diferenciar y a permitir crear valor", afirmó.
Todo ello se logrará con importantes planes de innovación en todas las áreas de negocio y con la comercialización de productos que no sean estrictamente financieros, que conjuntamente representarán el 25 por ciento del margen de intermediación del grupo en 2010.
El BBVA ofrecerá todo tipo de viajes, coches, motos, bicis, chequeos médicos, tratamientos dentales y ópticos, residencias para ancianos, instalaciones fotovoltaicas, cursos on-line, televisiones, teléfonos móviles, cámaras de fotos, joyería, relojes, electrodomésticos, colchones, así como pisos en venta y alquiler.
González se comprometió a que para 2010, el número de clientes aumente un 20%, es decir, 8,5 millones. En España quieren captar 500.000 inmigrantes más y un millón de jóvenes. En México cuatro millones y en América del Sur tres millones más.
Además, la productividad debe elevarse un 15% y la eficiencia (que mide lo que gasta el banco por cada cien euros que ingresa) debe mejorar hasta una cifra inferior al 35%, por delante de los grandes bancos mundiales. También se quiere duplicar los créditos en México y América del Sur e invertir 5.600 millones, de los que 2.500 millones son extraordinarios.
El presidente de la entidad se mostró convencido de que este proyecto "va a crear mucho más valor que las aproximaciones convencionales de nuestros competidores" y va a permitir al grupo "ser el ganador del sector financiero y de servicios del siglo XXI". En el caso de México, la entidad quiere pasar de 14 a 18 millones de clientes, multiplicar por 2,5 veces el crédito al consumo y triplicar el volumen de hipotecas para la compra de vivienda, entre otros objetivos.
El director del área, Ignacio Deschamps, explicó que en este país se abrirán 245 oficinas hasta las 2010, se fomentarán las transacciones electrónicas para que pasen a representar el 88 por ciento del total, se pasará de 4.876 cajeros a 7.500 y se incrementará el número de comercios afiliados hasta alcanzar los 150.000.
En el caso de América del Sur, el plan estratégico contempla la captación de 3,3 millones de clientes hasta alcanzar los 12 millones, triplicar el saldo de tarjetas y consumo, abrir 240 oficinas hasta tener una red de 1.600 sucursales e instalar 2.000 nuevos cajeros para elevarlos hasta 5.600.
En este área, la entidad hará un especial esfuerzo en planes de acción social, para luchar contra los "graves déficit estructurales" que sufre la región, que, según el responsable del BBVA en esa zona, Vicente Rodero, son el alto índice de pobreza (el 38 por ciento de la población), la economía informal (el 40 por ciento del Producto Interior Bruto) y los bajos índices educativos.
Las dos iniciativas principales serán la creación de la Fundación para las Microfinanzas con una dotación de 200 millones de euros (260 millones de dólares) y el compromiso de dedicar el 0,7 por ciento de los beneficios de cada país a la mejora de la educación de los sectores más desfavorecidos de la población.