iProfesionaliProfesional

Las estafas que parecen obvias son las más rentables

Según un estudio, a los estafadores les alcanza con que sólo les hagan caso los internautas más crédulos y desinformados para obtener ganancias
30/07/2012 - 22:35hs
Las estafas que parecen obvias son las más rentables

Es bien sabido que un buen porcentaje del total de correos electrónicos que circulan por la red son spam. Y muchos de ellos contienen estafas, muchas de las cuales pueden parecer demasiado siemples como para funcionar.

Sin embargo, un estudio muestra que a los estafadores no les hace falta que mucha gente caiga en su trampa para que el "negocio" resulte lucrativo. Por eso, muchas veces esos engaños que resultan tan obvios son los más rentables.

Un ejemplo de una estafa evidente es la que en España llaman la "carta nigeriana",  que está escrita por una supuesta eminencia que solicita ayuda para sacar una gran fortuna de su país a cambio de una jugosa comisión.

Si algún incauto accede, se le exige primero una pequeña cantidad de dinero para "facilitar" el trámite. Y luego más y más hasta que el inocente se da cuenta de que no hay tal fortuna, sino que está siendo engañado, informa ABC.

Pero esta trampa, también conocida como el "timo 419" -por el número de la ley nigeriana que prohíbe esta práctica-, no es nueva sino que se puede calificar como "de antigua escuela". Incluso, precede al correo electrónico y antes se llevaba a cabo por correo postal.

Lo curioso es que, aunque la estrategia ya es conocida por un gran número de personas, aún funciona.

De hecho, en mayo de este año la policía detuvo a una red de 23 nigerianos que había estafado más de dos millones de euros mediante este procedimiento.

¿Y quién cae en esta trampa cuando es tan obvia? ¿Por qué no han cambiado de método en tantos años? Estas preguntas inquietaron lo suficiente a un investigador de Microsoft como para relevar el asunto.

A raíz de ello, descubrió un dato muy curioso: los fraudes obvios benefician a los estafadores.

¿Cómo puede ser esto? Para "ganarse la vida" con el "timo 419" hace falta engañar a un cierto número de víctimas. Cuantos más correos se envían, más probable es que aparezcan potenciales víctimas.

Pero, como contrapartida, también crece el número de "falsos positivos". Es decir, aumenta la cantidad de gente que hace gastar tiempo y esfuerzo a los estafadores, pero de la que no se obtiene recompensa económica ninguna.

¿Cómo evitan esta traba los tramposos? Precisamente, haciendo absolutamente obvio para el usuario normal que se encuentra ante una estafa. Así, sólo los más crédulos y desinformados responden.

El autor del estudio lo explica así: "Como la credulidad no se puede deducir, la mejor estrategia es conseguir que ellos mismos se identifiquen. Un e-mail con cuentos sobre fabulosas cantidades de dinero y corrupción del África Occidental les sonará mal a todos, excepto a los más crédulos. Aquellos que respondan son los objetivos ideales de los estafadores, que en el fondo representan una fracción mínima del total de la población".