La increíble historia del hombre más temerario del mundo
El zoológo sudafricano Kevin Richardson tiene la costumbre de entrar en el territorio de varios clanes de leones salvajes, y convivir y jugar con ellos como uno más. Podría estar loco, pero al cierre de este artículo Richardson seguía vivo.
A sus 39 años, este amigo de los animales alcanzó la fama por ese don suyo de mezclarse con animales a los que el resto les tiene terror.
"Un león es un ser que siente, de modo que uno debe prestar atención y desarrollar un lazo afectivo con él como en cualquier otra relación afectiva", dice Richardson, que se ha dado a conocer como "The Lion Whisperer", o "encantador de leones".
Lo malo es que los leones no son como la gente: cuando están contentos se dan manotazos, se revuelcan encima de los otros, se muerden. Y a Kevin lo han mordido decenas de veces, aunque nunca ha sentido que se lo quieran comer. Según él, se acerca a ellos o no según corazonadas: si siente que algo anda mal no se acerca.
Richardson usa la misma lógica con otros animales salvajes: también es amigo de panteras negras y de hienas, a las que describe como “adorables”, “amistosas”, “bellas”, y de “gran personalidad".
Amante de los animales, al fin y al cabo, Richardson se ha embarcado en varias campañas por la preservación de los leones y otras especies en extinción, a través de su sitio web.
¿Su mayor secreto? No tenerles miedo. "Los leones pueden oler tu miedo", dice Richardson en un video en el que una leona se come su cámara, pero no a él. Lo cierto es que tenerle miedo a un león parece lo más sensato y lo más lógico, aunque para Richardson la lógica que nos ha mantenido a salvo del rey de la selva no funcione.