Una empresa a cargo del empresario argentino Enrique Pescarmona presentó una convocatoria de acreedores con el fin de evitar la quiebra, según se informó ante la Comisión Nacional de Valores (CNV).

Se trata de Wind Power Energía SA, controlada por IMPSA.

Juan Mihanovich, responsable de Relaciones con el Mercado de Industrias Metalúrgicas Pescarmona, envió una carta al organismo que preside Cristian Girard para dar precisiones sobre una firma del grupo.

IMPSA había acordado la semana pasada la venta de participaciones en cinco parques eólicos en Brasil al desarrollador local Grupo Salus como un paso previo para reestructurar su deuda, según indica la agencia Noticias Argentinas.

La compañía se encuentra en un crítico momento: el 18 septiembre último cayó en cesación de pagos al no poder afrontar el vencimiento de un bono por $42 millones y u$s23 millones.

El motivo de la falta de dinero se debió a la demora en los pagos de trabajos realizados en Brasil y Venezuela, por u$s5.500 millones, y al estar marginada de la obra pública en la Argentina durante casi una década.

La empresa mendocina dirigida por Enrique Pescarmona apostaba a la presa de Chihuido como su salvación en la Argentina pero la semana pasada no logró ser preseleccionada en el primer lugar para encarar esa obra, a pesar de haber presentado la oferta más baja entre cinco proponentes.

Ahora, en su carta a la CNV, Mihanovich explicó la situación de la energética Wind Power Energía SA (WPE Brasil), una sociedad anónima constituida bajo las leyes de la República Federativa del Brasil, controlada por Venti S.A. (sociedad controlante de IMPSA).

"WPE nos ha informado que el pasado día 5 de diciembre ha realizado una presentación ante el Cuarto Juzgado Civil del Cabo de Santo Agostinho, Pernambuco, Brasil, solicitando la apertura de un proceso de recuperación judicial bajo la Ley 11.101", dijo.

Esa presentación implica el llamado a convocatoria de acreedores para la justicia argentina. De acuerdo a lo informado por WPE, la decisión se adoptó con el objeto de proteger a la compañía de acciones legales iniciadas por un número menor de proveedores y asegurar así la continuidad de sus futuras operaciones.

De aprobarse por el Juzgado, este proceso tendrá por objetivo iniciar una instancia que permita superar las dificultades económicas y financieras de WPE Brasil y arribar a un acuerdo con sus acreedores, dijo el empresario.