El sector automotriz anunció inversiones de al menos u$s 5.500 millones para los próximos cinco años en Brasil.

Se trata de ocho automotrices: Scania, Mercedes Benz, General Motors, Volkswagen, Toyota, Volvo, Renault y MAN.

Uno de los motivadores fue que, el mercado brasileño, batió récords en sus exportaciones este año, con un crecimiento de 55,7% en ventas, según BAE.

Argentina, principal socio del Mercosur, según datos de Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos (Anfavea), aparece en primer lugar como comprador.

Desde septiembre de 2016 hasta setiembre de 2017, Argentina elevó sus compras de vehículos livianos y pesados en Brasil un 41,5%, que pasó de adquirir 279.000 unidades a 395.000 este año.

Volkswagen, que perdió el liderazgo en la última década en ventas en Brasil (donde lideró GM) invertirá u$s800 millones en la producción de los modelos Novo Polo y Virtus en el estado de San Pablo, la planta más importante que posee la marca alemana fuera de Alemania.

El mismo valor que anunció Scania.

Hace pocas horas, la multinacional alemana Mercedes Benz anunció una inversión por unos u$s775 millones entre 2018 y 2020 destinados a modernizar las fábricas brasileñas.

Desde 2013, la caída del sector automotriz se reduce al ritmo de una economía en recesión: en aquel año produjo 3,7 millones de unidades; en 2016, 2,2 millones, una caída del 42%, con el cierre de 35.000 puestos de empleos registrados.

"El gobierno adoptó una política económica más correcta, con inflación baja y tasa de interés menores. Si existe credibilidad en la situación fiscal, existen buenas chances para el sector", dijo el presidente de Mercedes Benz para Brasil y América Latina, Philipp Schiemer.

De las inversiones informadas por las empresas, GM es la más ambiciosa en Brasil, invertirá u$s1.500 millones en las fábricas en Sao Caetano do Sul, estado de San Pablo; Joinville, Santa Catarina; y Gravataí, Rio Grande do Sul.

La japonesa Toyota aportará unos u$s350 millones en la fábrica de Sorocaba.

Renault y MAN anunciaron el desarrollo de nuevos modelos para el mercado brasileño y la exportación.