La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) prevé un fortalecimiento de la economía argentina para este año y el próximo.

La institución, en su informe semestral de Perspectivas difundido este martes, considera que habrá una creciente demanda interna, una caída progresiva de la inflación y mayores inversiones en infraestructura.

La entidad destaca en el estudio que el Producto Bruto Interno (PBI) argentino crecerá 2,9% este año y 3,2% en 2018, lo que supone un alza del 0,4% y del 0,1%, respectivamente, comparado con lo proyectado seis meses atrás.

La inversión será un factor clave para el crecimiento tanto el próximo año como en 2019, donde también se prevé un aumento del 3,2%, según el documento de la OCDE citado por EFE.

"Una mejora del clima de negocios y mayores flujos de inversión extranjera aportarán un estímulo adicional, mientras que la caída de la inflación, que se espera que llegue al 17%, dará un empujón al consumo", indicó.

En relación con el mercado laboral, según el informe de la OCDE "ya ha experimentado una mejora destacada en la construcción", y prosperará "a medida que el resto de factores vayan al alza".

En cuanto a las exportaciones, que tuvieron una caída tras el impulso inicial de principios de año por la caída del precio de la soja y factores climáticos adversos, la OCDE prevé una recuperación.

La organización calculó también que las exportaciones argentinas se beneficiarán de una recuperación económica de Brasil.

Sobre políticas macroeconómicas, el organismo alentó a que sigan reduciendo los desequilibrios del pasado, y a que la estrategia monetaria se mantenga restrictiva para que la inflación, que en 2016 superó el 40%, se reduzca de forma sostenida.

En referencia al desarrollo del trabajo, rebajar las barreras al emprendimiento, fortalecer la competitividad y mejorar la normativa del mercado laboral, "estimularán la inversión y facilitarán la creación de trabajo y empresas", estimó la OCDE.

Reducir la informalidad y ampliar el acceso a una educación de calidad, fueron considerados por la OCDE como factores necesarios para lograr "un crecimiento más inclusivo".

Alerta mundialPor otra parte, la OCDE confirmó el martes la continuación en 2018 del repunte económico que comenzó este año, pero alertó sobre los riesgos de un alto endeudamiento de las empresas para el crecimiento mundial.

"Los créditos son necesarios para sostener la actividad económica y la innovación, pero éstos pueden aumentar los riesgos, reducir el crecimiento y aumentar las desigualdades", afirmó Catherine Mann, economista de la OCDE, durante una presentación de perspectivas de crecimiento de esta institución en París.

"La deuda privada sigue a la alza", apuntó Mann, haciendo hincapié en las empresas "zombis" que encuentran financiamiento en los mercados gracias a las tasas actualmente bajas pero que podrían colapsar si éstos suben.

Por otra parte, la OCDE prevé que la economía mundial, impulsada por sus tres motores principales - Estados Unidos, la Eurozona y China - seguirá creciendo el próximo año. Pronostica un crecimiento de 3,7% en 2018, después de 3,6% este año.

La institución aumentó ligeramente sus previsiones para Estados Unidos este año, a 2,2% (+0,1% en comparación a las previsiones de septiembre), y prevé un robustecimiento del crecimiento a 2,5% en 2018 (+0,1%).

La Eurozona obtendría mejores resultados este año que la primera economía mundial, con un crecimiento de 2,3% (+0,2%), antes de caer ligeramente a 2,2% (+0,2) el próximo año.

Sin sorpresa, el principal impulso de la economía europea es Alemania, que según la OCDE crecerá 2,5% en 2017 (+0,3). El organismo prevé, no obstante, un ligero retroceso de la economía de ese país en 2018 (2,3%).

Entre los países emergentes, China crecerá, según las previsiones, a un ritmo de 6,8% este año y el próximo. Brasil alcanzaría 0,7% en 2017 (+0,1%) y 1,9% en 2018 (+0,3%).

En cuanto a India, la OCDE confirma un crecimiento de 6,7% este año, pero lo revisa a la baja para 2018 a 7% (-0,2%). Mientras que la economía rusa crecerá por su parte a un ritmo de 1,9% este año (-0,1) y en 2018 (-0,2%).