El presidente Alberto Fernández eligió para tener sobre su escritorio de trabajo en su despacho de la Casa Rosada dos fotografías que le recuerdan momentos de su gestión como Jefe de Gabinete del kirchnerismo: una conversando distendidamente con Néstor Kirchner en ese mismo recinto y otra que refleja una visita que hizo a la sede gubernamental el músico Luis Alberto "El Flaco" Spinetta.

Las fotos fueron tomadas por el histórico fotógrafo presidencial Víctor Bugge, y ahora, debidamente enmarcadas, "traen al presente dos figuras muy caras para el nuevo presidente", comentaron fuentes de la Casa de Gobierno.

La evocación de Néstor Kirchner siempre está presente en Alberto Fernández: en su discurso de esta noche a la multitud reunida en Plaza de Mayo dijo que "voy siempre a darle gracias a Dios porque un día la vida, el destino, me cruzó con él en el camino, y jamás pensé que mi vida iba a cambiar como cambió".

Con respecto de la otra fotografía, durante el gobierno de Kirchner, Fernández fue uno de los promotores del ciclo "Música en el Salón Blanco", donde se encontró con Spinetta, uno de sus músicos preferidos. La imagen recuerda el momento en el que el flamante presidente subió al escenario para decir unas palabras en honor del fundador de Almendra, Pescado Rabioso e Invisible.

Hace poco el jefe de Estado había señalado que, cuando llegara al poder, impulsaría nuevamente los recitales en el Salón Blanco, un histórico recinto que "estará abierto para todos los músicos".

Es sabida la inclinación que tiene Fernández por el rock, que muchas veces interpreta en su guitarra, una afición que hoy tampoco estuvo ausente, ya que invitó a Lito Nebbia, el líder de la legendaria banda Los Gatos, quien actuó en el festival de Plaza de Mayo, a visitar su despacho.

Nebbia recorrió el lugar de trabajo y tuvo el privilegio de sentarse en el "Sillón de Rivadavia", como se denomina el sillón que usan los presidentes argentinos, de pana celeste, frente al escritorio de madera maciza y con la bandera argentina detrás.