"Hay lugares donde uno se queda y hay lugares que quedan en uno", dice la famosa frase. Los lugares que visitamos o en los que vivimos marcan nuestra vida de muchísimas maneras posibles. Por quienes lo habitan, por lo que transmiten sus paisajes o por las experiencias que vivimos en ellos.

Esa emocionalidad queda almacenada en nuestro corazón y nos acompaña por siempre, dejando una marca en nuestro verdadero ser. Similar a cuando tenemos un color preferido, los paisajes favoritos de cada uno también pueden revelar las características de las personas.

Elegí un paisaje

Para conocer qué significa tu relación con tu paisaje de elección, elegí uno de los cuatro que figura en la imagen debajo. Intentá pensar con qué asociás esa vista única y por qué te resulta mas llamativo que el resto. Luego, encontrá su significado oculto en la sección de respuestas de abajo.

¿Qué paisaje te gusta más? El que elijas va a revelar características de tu ser interior

¿Qué representa tu elección?

1. Sos una persona enérgica y optimista

El bosque otoñal con cascadas que se asemeja al paisaje de un cuento de hadas te muestra como una persona que, con mucha visión, orienta sus acciones al logro gracias a que tiene bien en claro qué es lo que quiere en la vida. Tu optimismo tiene el filtro de positividad que te permite ver oportunidades donde otras personas ven problemas. Esta actitud es acompañada por un fuerte sentido de la honestidad.

Tu meta para este año es desarrollar la paciencia, ya que tu hambre por cumplir con tus metas a veces te hace querer que sucedan ya, y no siempre pasa. Aprendé a ir despacio, al ritmo natural de la vida para también llegar a ser una persona más tranquila y feliz.

2. Sos una persona creativa y orientada al logro

El atardecer nevado representa a quienes tienen permanentemente sus ojos en la meta. En búsqueda de marcar lo que está hecho con tu esfuerzo y de distinguirte de los demás, sacás toda tu creatividad a flote.

Las recompensas por tus logros que recibiste en el pasado te incentivaron a ser una persona que resalta entre la multitud, aunque también potenció tu competitividad. Deberías aprender a lidiar con esa carrera que corrés en contra de los otros y enfocarte en tu camino. Podrías dedicar un tiempo moderado al ocio para relajarte y darle un enfoque distinto a tus días.

3. Sos una persona innovadora y perceptiva

Racionales, perceptivos, reservados e independientes son los que eligen el tercer paisaje de la imagen. La tranquilidad del lago los hace reflexionar seguidosobre  cómo funciona el mundo. Eso parte de tu gran curiosidad y capacidad de observación, que también los empujan a querer entablar conversaciones interesantes con quienes puedan aportarte algo de conocimiento.

Acostumbrados a analizar al resto, la expresión de sus emociones los hacen sentir vulnerables. Es esa la clave que sus ojos no están viendo: la expresividad nos permite conectarnos con el otro en niveles más profundos, a partir de los cuales podrían adquirir experiencias más valiosas como las que suelen buscar.

4. Sos una persona naturalmente entusiasta

Multifacética y activa, tu gran energía te lleva por el lado del optimismo y la ambición. A veces el exceso de entusiasmo te lleva a evitar expresar tus sentimientos negativos, que se almacenan en tu interior y se convierten en resentimiento difícil de eliminar. Tus ganas de compartir no coinciden con tu falta de compromiso, y por lo general terminás abandonando la mayoría de las actividades que emprendés.

Para el futuro, intentá canalizar la actividad en menos cosas para así poder completar tus elecciones con éxito y felicidad, así amigándote con el compromiso y los triunfos que vienen con él.