Enfermedad de Alzheimer: rumbo a encontrar una cura
Las noticias son alentadoras. Las conclusiones del reciente Congreso Mundial de Alzheimer -llevado a cabo en julio pasado en Chicago, Estados Unidos- afirman que se vislumbra una luz de esperanza en la aparición de un tratamiento que modificaría el curso de esta enfermedad. Actualmente, hay un avance en el diagnóstico precoz con estudios conocidos como biomarcadores. Esto significa que ya existen estudios para mejorar la precisión diagnóstica del Alzheimer. Es importante destacar que el diagnóstico precoz es de vital importancia para mejorar esta enfermedad, que es neurodegenerativa y cuyo mayor factor de riesgo reside en el transcurso de los años, es decir, en el envejecimiento.
El Alzheimer es de curso progresivo, y es causado -en parte- por la acumulación de una proteína anormal en el cerebro conocida como amiloide. Si bien es irreversible desde el punto de vista fisiopatológico, existen diversos tratamientos que ayudan a mejorar los síntomas.
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En la actualidad, la presunción de padecer esta patología representa uno de los principales motivos de consulta al médico neurólogo. Un síntoma que aparece habitualmente durante la consulta es la pérdida de memoria para hechos recientes, tales como olvidar citas o dónde se dejan los objetos, preguntar muchas veces lo mismo o no recordar a personas que se acaban de conocer. Es que la enfermedad de Alzheimer involucra áreas del cerebro que controlan la velocidad de pensamiento, la memoria y el lenguaje, entre otros aspectos.
En líneas generales un paciente con Alzheimer tiene anosoagnosia, es decir no reconoce ni va a reconocer nunca su propia enfermedad. No concurren por motivación propia al médico, sino que suelen ser llevados a la consulta. Entender esta situación ayuda a que la familia logré aceptar y entender esta enfermedad.
Es frecuente que el paciente, por miedo a ser internado o como mecanismo de negación, tienda a minimizar sus síntomas o ignorarlos mientras que los familiares, angustiados, pueden llegar a exagerar la intensidad y frecuencia de sus manifestaciones. Ahora bien, existen indicios de alarma que hay que tener en cuenta a la hora de hacer la pesquisa: disminución de la memoria reciente, dificultades en la ejecución de tareas que realiza habitualmente, problemas con el lenguaje y la comunicación, desorientación en tiempo y lugar, disminución en las capacidades de razonamiento y juicio, problemas con el pensamiento abstracto, extravío de objetos o colocación en lugares erróneos, cambios del ánimo o del comportamiento, cambios en la personalidad, y disminución de la iniciativa.
Ante la presencia de estos indicios, es importante consultar con un neurólogo experimentado en este tipo de problemas. Durante la entrevista, el profesional formulará preguntas, realizará diferentes pruebas y, en caso de ser necesario, solicitará estudios complementarios -análisis clínicos, imágenes del cerebro y evaluación cognitiva-.
El Alzheimer no es una enfermedad hereditaria y los factores de riesgo son muy diversos. Uno muy importante es el corazón. Actualmente es sabido que lo que es bueno y efectivo para proteger al corazón también es útil para el cerebro. De esta manera, el diagnóstico temprano y el control adecuado de la hipertensión arterial, de la diabetes, colesterol y sobrepeso, así como el abandono de hábitos perjudiciales como el tabaquismo ayudarán a que nuestro cerebro se encuentre más saludable en el futuro.
En cuanto al tratamiento, los tratamientos farmacológicos específicos disponibles en la actualidad incluyen medicamentos que demostraron mejoría de aspectos cognitivos, conductuales y funcionales. Por otro lado, también se recomienda derivar al paciente para que realice “estimulación cognitiva”, particularmente para casos leves de reciente comienzo. Esta práctica es coloquialmente conocida como talleres de memoria y consiste en un programa terapéutico que tiene por finalidad mejorar o mantener el funcionamiento cognitivo.
Dr. Galeno Rojas. Médico neurólogo. MN 108.382
El Doctor es integrante del Departamento de Neurología del Sanatorio de la Trinidad Mitre, a cargo de la Jefa Dra. Emilia Gatto.
El miércoles 19 de septiembre de 9 a 13 hs. se realizará una charla abierta y gratuita. “Talleres de Memoria: su importancia para los adultos mayores”. En el Sanatorio de la Trinidad Mitre (Larrea 140 CABA). Informes e inscripción: neurologiamitre@gmail.com