Apple rectificó su decisión de retirar la norma ambiental conocida como EPEAT de sus productos.

La compañía ha asegurado que esa medida fue "un error" y que la norma del Green Electronics Council volverá a estar presente en los 39 productos de la empresa.

La semana pasada Apple decidió excluir sus productos de la norma EPEAT, la cual requiere que los productos sean fáciles de desmontar para los consumidores de forma que estos puedan eliminar fácilmente los componentes tóxicos de los dispositivos, como por ejemplo las baterías, para que el equipo en cuestión sea considerado un "producto verde".

Ante esta decisión, la ciudad californiana de San Francisco decidió "bloquear" los productos de Apple en todas sus oficinas municipales.

En un primer momento la empresa con sede en la ciudad californiana de Cupertino reaccionó al asegurar que sus propias normas ambientales eran "más estrictas" que la propia EPEAT y que la compañía estaba comprometida con el impacto ambiental de los productos cumpliendo "las normas de eficiencia energética".

El revuelo ocasionado por esta decisión de Apple, incluso entre los usuarios de sus productos, que la compañía ha rectificado su decisión.

Según un comunicado publicado en la web de Apple por el vicepresidente senior de ingeniería de hardware, Bob Mansfield, Apple está muy preocupada por la "decepción" de los usuarios ante esa decisión tomada y considera que fue "un error", por lo que ha decidido nuevamente inscribir sus productos a la norma EPEAT.

La compañía ha asegurado que tras esta polémica su relación con la EPEAT "se ha fortalecido" y que continuará trabajando con ella, informó la agencia Europa Press.

"Esperamos con interés trabajar con el sistema de calificación de la y la norma IEEE 1680.1 estándar. Nuestro equipo de Apple se dedica a diseñar productos de los que todo el mundo pueda orgulloso de poseer y de utilizar", ha afirmado Mansfield.