Estado de alerta por un caso de correos electrónicos falsos
Quienes usan la casilla de correo electrónico saben de qué se trata: mensajes que venden medicamentos para mejorar el rendimiento sexual, que piden un cuenta bancaria para depositar un premio por 141 M de euros, o que solicitan la difusión de imágenes de chicos perdidos y ponen un número de teléfono inexistente son cosas de todos los días.
Ahora, cuando el tema afecta la relación de clientes con empresas, la situación toma otra dimensión.
Es lo que le sucedió a Fibertel, propiedad del grupo CableVisión, en los últimos días. Algunos abonados al servicio de acceso a Internet recibieron un correo, supuestamente de parte de la empresa, en el cual se les advertía sobre su comportamiento: estaban enviando spam pornográfico.
Los clientes, sorprendidos por tal recepción pues se los acusaba de una práctica que, de ninguna manera, se estaba realizando, llamaron a la empresa pidiendo explicaciones. Y allí se les aclaró la situación.
"Hemos detectado que algunos clientes de Fibertel han recibido en las últimas horas un mensaje de correo electrónico atribuido a esta compañía con una comunicación falsa. Habría sido enviado con la aparente intención de obtener direcciones de correo electrónico activas para futuros envíos de e-mails no solictados", explicó Fibertel a través de un comunicado.
Tras aclarar que cuando se dirige a los clientes por la vía electrónica la empresa lo hace a través de las direcciones atencionalcliente@fibertel.com.ar y ceac@cablevision.com.ar, recomendaron a los abonados "no seguir ningún link que contenga el mensaje. Le sugerimos que lo borre de su casilla de correo sin más trámite". Y que, ante la duda, llamen al centro de atención al cliente.
En la Argentina el año pasado, el spam causó pérdidas corporativas por $150 M.