La caída del consumo impacta en el sector de los electrodomésticos. En marzo, las ventas se precipitaron un 29% interanual, con picos que alcanzaron el 46 por ciento.

De acuerdo con un informe de GFK Argentina, la comercialización de notebooks, PC de escritorio y tablets se redujo un 41%; cámaras fotográficas, 32%; pequeños electrodomésticos (licuadoras, microondas), 18%; grandes electrodomésticos (heladeras, lavarropas, cocinas), 14%; celulares, 20%; y aires acondicionado, calefactores a gas, eléctricos y placas, un 9,9 por ciento.

Sectores industriales y cadenas atraviesan una coyuntura muy grave, aunque por razones estacionales como el comienzo de clases, las ventas comerciales de marzo, respecto de febrero último, subieron 6%.

En el análisis de los datos del primer trimestre del 2019, la retracción fue del 31,3% promedio frente a enero-marzo de 2018, donde la informática cayó el 46 por ciento. La industria electrónica, tanto del continente como de Tierra del Fuego, proyectan una agudización de la crisis para 2019, producto del descenso en el consumo por efecto del menor poder adquisitivo y del costo impositivo y tarifario para las empresas.

Sin embargo, como sucede en general en el mercado argentino, en marzo los precios de los electrodomésticos igualmente subieron, lo cual abre las puertas para una mayor reducción de las ventas mayoristas y minoristas con la consecuente crisis en el empleo. Como ocurre con varios sectores de la economía, en la Argentina la caída del consumo no hace bajar los precios.

Respecto a los motivos que impulsan los incrementos, desde la consultora Datos Claros señalaron que "la situación es muy evidente, similar a lo que ocurrió en enero y febrero y que se acrecienta con el correr de los meses" e identificó a los principales factores como "la devaluación y la inflación".