iProfesionaliProfesional

Las "escorts" también se bajan de la cumbre de los móviles en Barcelona por miedo a contagiarse el coronavirus

"Hay miedo a contagiarse en un servicio, pero con que venga una persona enferma y se suba a un taxi ya estamos todos expuestos", advirtieron
12/02/2020 - 07:46hs
Las "escorts" también se bajan de la cumbre de los móviles en Barcelona por miedo a contagiarse el coronavirus

El Mobile World Congress es una semana de fiesta mayor para el sector de la prostitución en Barcelona. Es la feria más rentable del calendario, un encuentro que los empresarios y también las "escorts" esperan debido al gran volumen de trabajo y al alto nivel de gasto de los clientes.

Por eso la crisis del coronavirus, que amenaza con suspender la feria, prevista para el 24 al 27 de febrero, ha caído como una bofetada. Entre los empresarios, por el riesgo de perder cientos de miles de euros. Entre las prostitutas, por el miedo a ser contagiadas.

"Nunca nos hemos enfrentado a una situación parecida. Hay que improvisar un poco y valorar los riegos, ver si es viable para ellas. Algunas chicas ya nos han dicho que no quieren tener contactos con clientes de estos países", informaron al medio español El Confidencial desde Omnia Escorts, una de las agencias más importantes de Barcelona, en referencia a los participantes asiáticos del Mobile, particularmente chinos.

"Hay miedo a contagiarse en un servicio, pero con que venga una persona enferma y se suba a un taxi ya estamos todos expuestos. Es algo que no podemos controlar. Hay un poco de chinofobia, pero es absurdo", explicaron.

La respuesta de Omnia a las "escorts" que les han transmitido su miedo es sencilla: "Ellas eligen a sus clientes, son sus propias jefas. Si se sienten más seguras sin tener contactos con asiáticos, son libres de hacerlo. Eso no impide que un cliente alemán que haya tenido contacto con asiáticos en el Mobile las pueda contagiar. Nadie está libre de contagio".

Donde no pueden escapar a la histeria del coronavirus es en los locales de ocio nocturno. Los clubs con "pool dance", música y chicas son los más demandados durante la feria por los asiáticos, por encima del servicio privado de "escorts", más popular entre europeos y norteamericanos.

Cada cierre de jornada en la Fira de Barcelona, decenas de furgonetas con los cristales tintados recogen a los asistentes llegados de todo el mundo y los reparten por los clubes más exclusivos de la ciudad. Los locales pagan, en su mayoría, comisión a estos chóferes. Casi todos estos clubes se concentran en la zona alta de Barcelona, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi.

Los clubs y salas de masajes optan por el silencio ante la crisis que se avecina, como la sala Bacarrá, referente de la prostitución de alto nivel en Barcelona, que declinó pronunciarse sobre el efecto del coronavirus entre sus trabajadoras.

"Cuando llegue el Mobile veremos qué pasa. Si las chicas se asustan, lo más probable es que no vengan a trabajar, en ese caso ya veremos cómo lo afrontamos", explicaron desde La Vie en Rose, un hotel de lujo con servicio de "escorts".