Mercado de la nanotecnología puede llegar a u$s1.000 M
En un laboratorio sin ventanas dentro del centro de investigación Almaden de IBM al sur de San José, California, un microscopio de barrido de efecto túnel (STM) llega casi al techo, y rebasa por mucho la altura de Andreas Heinrich.
"Se trata de ver las propiedades de un solo átomo", dice Heinrich. "Partimos desde los componentes más pequeños".
Heinrich está experimentando con nuevas maneras de crear semiconductores y dispositivos de almacenamiento de datos. Capitalistas de riesgo, atraídos por descubrimientos potenciales en las áreas electrónica, médica y textil, están dirigiéndose a los laboratorios en busca de inventos basados en la nanotecnología: el estudio y manipulación de partículas más pequeñas que 100 nanómetros. Un nanómetro equivale a una milmillonésima parte de un metro.
Tras decenios de agitación y falsos comienzos, la Fundación Científica Nacional pronostica que productos derivados de la nanotecnología por mil millones de dólares estarán en el mercado para el 2015.
Este año las empresas y gobiernos gastarán más de 11 mil millones de dólares en investigación sobre nanotecnología, según Cientifica, una consultoría londinense. Los capitalistas de riesgo están ansiosos por formar empresas para luego registrarlas en el mercado accionario. El año pasado, empresas de capital de riesgo invirtieron 496,5 millones de dólares en compañías relacionadas con la nanotecnología, 21 por ciento más que en el 2004, según Lux Research, que estudia la nanotecnología.
Fondos en aumento
"La nanotecnología ya dejó de ser sólo una novedad", dijo el máximo responsable de Lux Peter Hebert. "Está incorporándose a la cadena industrial".
Wall Street está vadeando la nanotecnología. Los bancos de inversión Punk, Ziegel & Co. y WR Hambrecht & Co.. Están contratando a personal con doctorado para estudiar los desarrollos y asesorar a clientes. En marzo, Global Crown Capital LLC estableció un fondo de cobertura especializado en nanotecnología con 250 millones de dólares, el primero en su tipo.
Los índices están empezando a observar empresas de nanotecnología que cotizan en bolsa, como FEI, de Oregón, que fabrica microscopios para investigación en el área de nanotecnología. El índice Lux Nanotech de 26 empresas había subido 53 por ciento desde su creación, en junio del 2003, hasta la semana pasada.
En octubre del 2005, PowerShares Capital Management LLC estableció un fondo que cotiza en bolsa para monitorizar el índice Lux. El fondo había subido 4,8% hasta la semana pasada. Las acciones de FEI han subido 12 por ciento este año a 21,95 dólares el viernes pasado, porque la empresa empezó a vender sus nuevos microscopios Titan, que permiten a los científicos ver partículas de menos de una décima parte de un nanómetro de tamaño.
Veeco Instruments, otro fabricante de herramientas de nanotecnología, subió 26 por ciento a 21,92 dólares hasta la semana pasada por el aumento en la demanda entre fabricantes de productos electrónicos ansiosos de explorar nuevas formas de manufacturar dispositivos con materiales diminutos. FEI y Veeco son dos de alrededor de dos docenas de compañías relacionadas con la nanotecnología cuyas acciones cotizan en el Nasdaq.
"Los inversionistas están aguardando pruebas de que las empresas van a convertir a la tecnología en un negocio rentable", dice Jay Ritter, profesor de finanzas de la Universidad de Florida en Gainesville, que estudia salidas a bolsa.
Desde cero
Heinrich y su equipo de IBM están intentando utilizar la nanotecnología para crear nuevos tipos de productos electrónicos desde cero. Hace cinco años tomaron un puñado de moléculas y construyeron un sistema minúsculo que tenía una lógica similar a la de un circuito de computadora.
Experimentos que utilizan la nanotecnología podrían resultar en nuevas maneras de lidiar con cosas del día a día, como las manchas de salsa de tomate o llevar a dispositivos microscópicos que detectan y tratan el cáncer, dice Hebert.
Los capitalistas de riesgo están investigando moléculas que desintegran petróleo y limpian los derrames, fibras textiles tratadas con diminutas partículas para reparar tirones y paneles solares baratos producidos con materiales recién inventados.
¿Cómo el boom de Internet?
Aspen Aerogels, que produce aislantes acústicos, contra incendios y térmicos, y NanoOpto, desarrollador de semiconductores ópticos, podrían probar sus perspectivas en los mercados públicos en uno o dos años, dice Hebert. Quizá se dé un frenesí entre los empresarios y los bancos de inversión similar al que se dio con las compañías de Internet. "Hay mucha gente esperando", dice.
Charles Harris agrega que está intentando convencer a los inversionistas de que pueden ganar dinero con la nanotecnología. Desde sus oficinas en Nueva York dirige Harris & Harris Group, que entre sus 12 empleados tiene a dos personas con doctorado que visitan los campuses de universidades para detectar proyectos prometedores.
En mayo Harris hizo una inversión de 7,5 millones de dólares en Innovalight de California. La empresa, que surgió de la Universidad de Texas en Austin, está manipulando partículas de silicio que miden 2 a 10 nanómetros. Con ese tamaño, las partículas se vuelven solubles, lo que les permite absorber y almacenar energía solar con la meta de producir electricidad.
Desde el 2002 Harris & Harris ha hecho 30 inversiones en empresas que se especializan en lo que llama "diminuta tecnología". Harris & Harris es la única empresa de capital de riesgo que cotiza en bolsa especializada en nanotecnología solamente. Y para que quede bien clara su especialidad, cambió el ticker de la compañía en el Nasdaq a TINY.
Las acciones de la compañía han subido a más del doble desde que la empresa cambió su ticket el 27 de marzo del 2002, a 9,76 dólares la semana pasada desde 4,89 dólares.
Harris dice que se convenció de la nanotecnología tras la inversión de su empresa en 1994 en Nanophase Technologies de Illinois. Nanophase hace todavía más pequeñas y eficientes a las partículas existentes que bloquean los rayos ultravioleta del sol, y las aplica a productos que van desde bloqueador solar no pegajoso hasta preservadores para la madera.
Los capitalistas de riesgo, fondos de cobertura y empresas de Wall Street que están vadeando la nanotecnología están apostándole a que decenios de investigación harán de estas minúsculas partículas algo grande.
Fuente: Bloomberg