Ricardo Rebelo: "No cambiaría a la Argentina por ningún otro país del mundo"
Se trata de una de las bodegas con más historia de la Argentina.
En efecto: hay que remontarse al primer centenario de la patria para dar con los orígenes de Finca Flichman, la compañía que hoy está presente en el mercado con líneas reconocidas como Dedicado, Expresiones, Paisaje y el renovado Caballero de la Cepa.
En este contexto, la bodega, tras una fuerte inyección de inversiones por parte del Grupo Sogrape, una de las más grandes empresas familiares europeas del sector, cierra un presente inmejorable: en 2010 espera alcanzar una producción de 1,4 millones de cajas y facturar 145 millones de pesos.
En este contexto, es clave su presencia alrededor del globo. No es para menos, dado que están presentes en más de 70 mercados -repartidos entre América, Europa y Asia-, donde destinan 7 de cada 10 botellas que producen, lo que la posiciona como la sexta bodega exportadora del país.
En diálogo con Vinos & Bodegas iProfesional.com, Ricardo Rebelo, CEO de Fincas Flichman, destacó que "este año pensamos terminar con un crecimiento del orden del 30% en ventas. Y esta suba está repartida de manera pareja entre el mercado interno y el de exportación, al que destinamos un 70% de la producción y donde tenemos un ritmo de expansión superior que el promedio de la industria argentina".
-¿Qué lectura hace de este crecimiento exponencial? -Hoy en día vemos que al consumidor le gusta darse un buen gusto, no comprar tanta cantidad y sí apostar por la calidad. Y eso va en sintonía con la filosofía de la bodega: hace siete años decidimos sacar del mercado algunas marcas que tenían un precio muy bajo y en las cuales era imposible agregar valor. Así, nos focalizamos en un segmento más alto, haciendo menos pero mejor y apostando al largo plazo.
-¿Qué línea de todo el portfolio destacarías? -Sin dudas, uno de los vinos que más satisfacciones nos da es Caballero de la Cepa. Pero nos también destacaría Parcela 26, un Malbec muy exclusivo, de alta gama, de una producción muy limitada y que está vinculado con nuestro objetivo de presentar todos los años una novedad.
-¿Qué características destacarías de este vino? -Es un Malbec hecho a partir de las uvas de una sola hectárea de la finca que tenemos en Tupungato, Mendoza. Además, pasó 18 meses en barrica de roble de primer uso. Se va a comercializar a entre 600 y 700 pesos y habrá menos de 1.500 botellas disponibles. Pensamos que va a traducir lo que entendemos debe ser un Malbec.
-Gran parte de tu vida personal y profesional transcurrió en Portugal, ¿cómo fue tu adaptación a la Argentina? -En el país estoy hace diez años y la verdad es que a la Argentina nunca la llegás a conocer. Todos los días nos trae algo distinto y diferente. Este es el placer de trabajar aquí. La verdad es que no cambiaría a la Argentina por ningún país del mundo. Trabajar aquí es una experiencia sin igual. Me siento muy cómodo acá, más allá de las situaciones adversas. Es un pueblo que tiene una actitud muy positiva y me parece que todos tenemos la responsabilidad de sacar a la economía adelante. Me gusta ser parte de ese proceso. Considero que están dadas las cosas para tener una mejor distribución de la riqueza, que la gente pueda tener más educación. En fin, creo que estamos aportando un granito de arena desde la bodega, porque llevamos invertidos más de u$s50 millones y damos empleo a 170 personas.
-En este contexto, ¿dónde te imaginás que estará Flichman en una década? -Nosotros queremos continuar fortaleciendo nuestra posición, que es muy buena. De hecho, somos una de las mayores bodegas en cuanto a facturación y volumen. Para seguir en esta línea, tenemos un plan de inversiones de acá al 2014, de 5 millones de dólares. En otro orden, buscamos ser una bodega relevante para los consumidores, que esté en la mente de la gente. Eso hoy es una realidad, pero vamos por más.