La Corte reabrió la causa por secuestro y asesinato de Bulacio

La Corte Suprema de Justicia reabrió la causa por la privación ilegal de la libertad y la muerte del joven Walter Bulacio, ocurrida hace casi 14 años, tras asistir a un recital del grupo musical "Los redonditos de ricota".

Así­ lo informaron fuentes judiciales, que precisaron que el alto tribunal, por unanimidad aunque con fundamentos disí­miles, dispuso devolver la causa a la Cámara del Crimen, que en noviembre de 2002 habí­a declarado prescripta la causa.

Según revelaron las fuentes, los ministros coincidieron en revocar la declaración de prescripción dictada por la Sala Sexta de la Cámara del Crimen, pero esgrimieron distintos argumentos sobre esa decisión.

Si bien todos hicieron referencia a un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que determinó que la "Causa Bulacio" constituye un delito de lesa humanidad y, en consecuencia, es imprescriptible, los ministros discreparon sobre los alcances de la decisión de ese organismo, dependiente de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Para el juez Antonio Boggiano, la decisión de la Corte Interamericana es de cumplimiento obligatorio, en tanto que para su colega Carlos Fayt ese fallo no es vinculante, pues el tribunal internacional puede condenar al Estado argentino mas no revocar sentencias de sus jueces.

Raúl Zaffaroni, por su parte, entendió que las demoras en la tramitación de la causa no pueden recaer sobre la situación procesal del único imputado, el ex comisario Miguel Angel Espósito, quien pese al tiempo transcurrido aún no tiene certezas sobre cuál es su posición ante el expediente.

La causa Bulacio se inició como consecuencia de la muerte del joven, el 26 de abril de 1991, después de haber sido detenido junto a otros 72 fanáticos de los Redonditos de Ricotta tras un recital en Obras Sanitarias, en el marco de una "razzia".

Bulacio murió como consecuencia de un aneurisma, que según sus familiares fue provocado por supuestos apremios ilegales en la Comisarí­a 33, donde estuvo detenido, pero que según los informes forenses se produjo por causas naturales. Los informes médicos indicaron, también, que el cadáver de Bulacio no presentaba signos de tormentos.

La investigación por tormentos seguidos de muerte fue sobreseí­da por la Sala Sexta de la Cámara del Crimen, sin que se hubiese dictado procesamiento alguno.

Sólo quedó en pie la causa por privación ilegí­tima de la libertad, pero la misma Sala sobreseyó a Espósito por 72 de los 73 jóvenes detenidos junto con Bulacio, y el 22 de noviembre de 2002 declaró prescripto el caso restante.

Con las firmas de los jueces Carlos Alberto González y Luis Ameghino Escobar, declaró "extinguida la acción penal en la causa respecto de Miguel Angel Espósito, por prescripción" y dispuso "el sobreseimiento definitivo con relación al hecho que damnificara a Walter David Bulacio".

Pero la Fiscalí­a de Cámara apeló la medida y en el interí­n, la Corte Interamericana resolvió que la causa era de "lesa humanidad", por lo cual el máximo tribunal argentino revocó aquella medida y devolvió las actuaciones a la Cámara del Crimen, que ahora deberá reanudar la investigación.

El expediente volverá así­, virtualmente, a fojas cero y casi 14 años después, deberá investigarse nuevamente. (DyN)