Emprendedores argentinos estudian en Bologna la experiencia del "Made in Italy"
Las ciudades italianas fueron pioneras en desarrollar el "lujo for export" como estrategia de marketing. Así, el sello "Made in Italy" se posicionó alrededor del mundo como marca insigne de los mejores productos de ese país, que lejos de agotarse en las pastas y las películas de Marcello Mastroianni, eran por sobre todo prendas de alta costura, accesorios y autos de alta gama.
De las filas de la industria italiana surgieron tanto las gafas de Borsalino como los autos de las escuderías Ferrari y Lamborghini. Valentino, Versace, Dolce & Gabbana y Gucci supieron adornar las pasarelas de Milán, aunque también hubo espacio para los modernos diseños de marcas como Diesel o Benetton.
Y si bien estos ejemplos suenan hoy lejanos a las posibilidades de las incipientes firmas de lujo en la Argentina, desde la Universidad de Bologna indican que son muchas más las similitudes que lo que dicta el sentido común.
"Italia tiene un poco más de tradición, pero las problemáticas que experimentan las pequeñas y medianas empresas de alta gama son similares a las de la Argentina", dijo en diálogo con Campus-iProfesional.com Berenice Conde, coordinadora del programa académico Gestión de las PYME de Alta Gama que dicta la representación de esa casa de estudios italiana en Buenos Aires.
Tantos son los puntos en común que el programa, que tiene seis años de desarrollo en Italia, desde hace tres ciclos que se dicta en el país, con muy pocos cambios.
"El objetivo de esta maestría era acortar la brecha entre el empresario y los diseñadores o artistas. Muchos de estos últimos no aprenden materias de gestión dentro de su formación profesional, al tiempo que a los graduados en administración o negocios les cuesta incorporarse al rubro de alta gama por contar con poca experiencia en el sector. Y esto sucede tanto en la Argentina como en Italia", expresó Conde.
Este fue el caso de Rocío Ros, emprendedora argentina quien actualmente se encuentra en Italia realizando una práctica profesional en Italia como parte de este programa. "Después de haber estudiado diseño de indumentaria y textil en la UBA y de trabajar en diversas compañías de este mercado, me di cuenta de que me faltaba una pata profesional, aquella relacionada con la gestión de empresas de diseño. En la Argentina no existía esta oferta donde la moda fuera estudiada como un negocio, con reglas de productividad y gestión, conceptos que ocupan más del 60% del trabajo de crear una marca", dijo Ros a este medio.
"Otro desafío de la maestría es incentivar la producción nacional de bienes de lujo pero con una visión hacia la exportación, para fomentar la internacionalización de las empresas", tal y como se hizo con el Made in Italy, apuntó Conde.
¿Pero por qué un emprendedor argentino de una empresa de alta gama puede beneficiarse de la experiencia de las PYME en Italia? "Me resulto muy útil conocer la experiencia ‘Made in Italy' ya que proviene de nuestros orígenes italianos. Saber cómo comenzaron y crecieron las empresas es una base importante para darse cuenta que iniciar una firma con base en lo genuino y volver a valorar nuestro es importante y constituye un marco para fortalecer nuestros productos", dijo Bárbara Bolsich, quien cursó el programa de la Universidad de Bologna en 2011 y hoy aplica estas herramientas aprendidas a su propio emprendimiento.
"Particularmente, conocer el "Made in Italy" me permitió ver una manera diferente de trabajo basado en la calidad, en procesos claros, tiempo velocísimos, contribuyendo a forjar una fuerte identidad de marca. El italiano es un mercado de pequeñas y medianas empresas con una gran tradición, fruto de más de 45 años de trabajo. Las PYME argentinas aun son jóvenes y están forjando su know how, aunque seguramente en unos años serán grandes compañías, ya que somos competitivamente iguales. Es cuestión de tiempo no de capacidad", añadió Ros.
Directo de Buenos Aires a Bologna
Es el tercer año que este curso ofrece en la Argentina la posibilidad de obtener el título internacional de maestría en gestión de pequeñas y medianas empresas de alta gama, que cuenta con créditos formativos universitarios.
La cursada se divide en tres etapas:•Primer período en Argentina: de febrero a abril de 2013•Segundo período en Bologna: de mayo a julio de 2013•Tercer período (prácticas profesionales en Italia o Argentina): entre septiembre y diciembre de 2013
En la sede de esta casa de estudios en el barrio porteño de Retiro, los alumnos toman cursos generales en administración y control, comportamiento organizacional y nuevas tecnologías, economía de la Pequeña y Mediana Empresa en Italia y en Argentina, marketing, management global, entre otros.
Una vez completado este tronco común, pueden elegir entre cuatro orientaciones: Made in Italy (design, fashion y de lujo); Retail Management; Food & Wine y Gestión de la Moda. Cada una de ellas incluye el desarrollo de tres proyectos empresariales, que permitirán tener un contacto directo con las problemáticas de las empresas de los respectivos sectores.
Luego los alumnos finalizan la cursada en Italia, en la sede de la Región Emilia Romagna, donde se ubica la universidad, el corazón territorial del modelo industrial de las PyME.
"Éramos un grupo de aproximadamente 60 estudiantes, italianos, argentinos, y de otras partes de Europa. La experiencia fue muy linda, regularmente en la universidad hay conferencias de destacados profesionales en las diversas áreas empresariales, y continuamente recibíamos a algún destacado personaje internacional", recordó Bolsich sobre su experiencia en Bologna.
Completan el programa con una práctica profesional de 500 horas que gestiona la universidad con una multiplicidad de empresas de origen italiano (aunque puede realizarse en Italia o Argentina).
Para aplicar al curso no es necesario saber italiano, ya que la facultad les ofrece un curso de idioma, de forma que puedan manejarse durante el período de cursada en Europa. "No obstante, siempre recomendamos a quienes no manejan el idioma que comiencen a estudiar con anticipación", aclaró la coordinadora de la maestría en la Argentina.
Las empresas asociadas a la universidad pertenecen a diversos sectores productivos, tales como el de automóviles de lujo, yates, motos deportivas, moda, diseño, en gastronomía, muebles y calzado.
La universidad ofrece además un cupo limitado de becas parciales para algunos de los candidatos interesados en cursar la maestría. "Para decidir sobre las becas, evaluamos junto con asistentes sociales los antecedentes académicos de los mismos, su situación económica y su experiencia profesional", afirmó Conde. Deben además superar el coloquio de admisión para postularse a estas asistencias.
Por otra parte, los estudiantes pueden solicitar un préstamo de confianza en Unicredit Bank, sin garantías personales, siempre y cuando sean residentes en Italia, es decir, que estén registrados oficialmente como residentes en un Comune italiano al momento de la solicitud.
La próxima inscripción para el curso de extensión con título italiano de maestría, cierra el 27 de noviembre. La cursada se desarrollará entre febrero y diciembre de 2013.