Viviendo bajo una gran roca: conozca el curioso pueblo español de Setenil
Como una pesadilla arquitectónica o un literal sobresalto geológico, algo así es Setenil de las Bodegas, un pueblo gaditano (de Cádiz, España) en el que sus habitantes viven literalmente debajo de una gigantesca roca.
Según palabras de Caballero Bonald, Premio Cervantes 2012, se trata de un lugar que "no le dejará indiferente, por cuanto a cada paso descubrirá algún rincón o paisaje aún más sorprendente si cabe".
Los que no se sorprenden y viven con toda la tranquilidad del mundo bajo toneladas de piedra son los 3.051 ciudadanos de Setenil, quienes se sienten orgullosos del turismo que recibe a diario la localidad, según describe una nota del medio español El Economista.
Las paredes del interior de sus viviendas son de roca sólida y muchas calles se encuentran por debajo de un impresionante techo rocoso.
Aunque parece que Setenil de las Bodegas hubiese sido aplastada por un meteorito, en realidad, su inusual arquitectura obedece a un original proyecto defensivo que aprovechó al máximo la geografía local.
Su historia se pierde antes de la época medieval, que es de cuando data el primer asentamiento urbano bajo la enorme roca, que cubre además casi la totalidad de este pueblo de 82 km2 situado al nordeste de Cádiz.
¿Cómo empezó todo?Los orígenes de Setenil son aún un enigma. Según afirman en lainformacion.com, "la enorme roca era el techo de las cuevas donde posiblemente encontraron un refugio natural nuestros primitivos congéneres".
Cuenta la leyenda que un descendiente de Isabel La Católica murió a las pocas horas de nacer en Setenil, su nombre iba a ser Sebastián. Precisamente, en ese mismo lugar fue donde se construyó la iglesia de Setenil llamada Iglesia de San Sebastián, que recibió dicho apelativo porque nombraron a ese personaje como patrón de la hermosa villa andaluza.
La protección y seguridad que la ciudad de Setenil recibió gracias a su particular ubicación, la convirtió en una fortaleza casi inexpugnable y en uno de los últimos bastiones del dominio moro en España. Fueron necesarios siete intentos por parte de los cristianos (desde los tiempos de Juan II de Castilla hasta el reinado de los Reyes Católicos) para poder tomar finalmente el control de la ciudad en 1484.
A su vez, la historia de este pintoresco rincón gaditano ha sido considerada por varios historiadores como fundamental para la recuperación del territorio granadino, pues el camino hacia ese reino quedaba prácticamente abierto.
Sus edificaciones más antiguas se encuentran en el interior de la falla, en tanto que las viviendas de construcción más reciente se apoyan sobre las laderas de las montañas.
El principal atractivo de Setenil lo constituye el propio municipio, debido a la belleza y originalidad de su entramado urbano, que en elevada pendiente baja desde el castillo adaptándose al curso del río Guadalporcún, afluente del Guadalete, lo que le confiere una singular disposición con diferentes niveles de altura.
En la parte baja, los vecinos aprovecharon el tajo creado en la roca por el río para construir sus casas. Y allí viven, en un original y apreciado Setenil, al abrigo de las rocas, que con su sombra acarician y protegen la localidad, concluye la nota de El Economista.
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