Los botines negros pasaron de moda y el color se adueñó del gol

“¿Botines negros? No, de esos no tenemos más. Deberías ir a un outlet, a ver si les queda un par de temporadas anteriores”. Respuestas como esa reciben, atónitos, los que hoy intentan comprarse un par de botines comunes y corrientes, esos oscuros con detalles blancos, discretos y sin pretensiones. Es que su tiempo pasó: condenados por la moda, en los estantes ya no queda lugar para ellos. Y los disponibles son en extremo llamativos. Un reflejo de lo que se está viendo en los partidos del Mundial.

Naranjas y amarillos flúo, verdes, blancos, violetas, celestes, dorados. Son sólo algunos de los tonos que las grandes marcas combinaron, con entramados exóticos, en los pares que lanzaron para Brasil 2014. De los simples, nada. Por ejemplo, en la imagen se ve a los costarricenses en el partido contra Holanda, utilizando cualquier tipo de modelos, menos el negro.

Algunos tienen más de cinco colores. Los que usa el “Kun” Agüero, por caso, son celestes en un pie y rosas en el otro. Los que calza Cristiano Ronaldo son naranjas, amarillos y negros, llegan hasta el tobillo y se venden a $3.500. Otros mezclan el clásico blanco y negro, pero con diseño tipo animal print y tres tiras naranjas.

Para las grandes estrellas, además, se crearon series especiales. El brasileño Neymar lucía hasta su lesión unos botines dorados diseñados en su honor por Nike. Y Adidas, para Lionel Messi, le desarrolló un modelo propio dentro de su línea mundialista Battle Pack, con un diseño que incluye el celeste de la bandera argentina.

Los que usa Messi, ultralivianos, salen $1.800, pero no están llegando al país. Sí se ofrecen unos parecidos que salen cerca de $ 800. “Se están vendiendo muy bien y los chicos los piden mucho”, contó Alejandro Reyes, gerente de Futbol de Adidas Argentina.

 “Ya no hay botines negros porque representan lo uniforme, lo popular y lo antiguo. Y eso vende menos que lo distinto. Por eso, las marcas los lanzan cada vez más diferenciados y personalizados. Hoy los botines son también objetos de moda y de glamour”, analizó Gerardo Molina, experto en marketing deportivo de la consultora Euroméricas Sport Marketing ante una consulta de Clarín.

Entre tanto colorido, hoy los jugadores que llaman la atención en la cancha son los pocos que aún usan botines negros: en Argentina, sólo lo hace “Chiquito” Romero.