Sorpresa en Buenos Aires: ¿Por qué desapareció la punta del Obelisco?
Los porteños y turistas que transitaron este lunes por la avenida 9 de Julio se encontraron con una imagen inusual en la geografía de la ciudad, al ver el Obelisco decapitado, sin su cúpula.
Desde las primeras horas de la mañana todos los que pasaban por el lugar realizaban la misma pregunta: ¿Sacaron la punta del Obelisco? La imagen del icónico monumento de la ciudad sin su parte superior llamaba poderosamente la atención de los habitantes de la capital y de los turistas.
Las respuestas eran de las más variadas, como que sacaron la punta del Obelisco por una cuestión de mantenimiento o que se había roto y la iba a reparar. Las peculiares fotos con el Obelisco cortado se reprodujeron en las redes sociales durante todo el día.
En realidad, se trató de una intervención del artista argentino Leandro Erlich, especialista en el artificio visual y conocido por sus instalaciones.
El trompe l'oeil (engaña ojo) resulta un artificio de seducción irresistible que lo ha convertido en un argentino universal, el más internacional y demandado de la última década. Con un sistema de paneles espejados, ocultó al ojo humano la parte superior del monumento de 67 metros inaugurado en 1936.
Desde Shanghai hasta Nantes, desde Seúl hasta La Habana, las obras de Erlich se exhiben en los principales museos del mundo, integran colecciones públicas y privadas, y tiene por lo menos seis galerías que lo representan urbi et orbi. Erlich es un artista conceptual argentino exhibido internacionalmente, que nació en la Capital Federal en 1973.