Ex esposa de Chueco: "Estaba con miedo, se sentí­a traicionado por amigos"

Continúa en la zona de la Triple Frontera la búsqueda de Jorge Chueco, el abogado que luego de haber trabajado por años junto al empresario Lázaro Báez, desde el miércoles está desaparecido.  

Mientras los investigadores manejan la hipótesis de que habría salido del país, su familia está preocupada por el estado de ánimo del hombre, que había dejado en su hotel de Iguazú una carta de despedida y más de u$s40.000 para su ex mujer. 

"Jorge estaba con mucho miedo y también se sentía traicionado por algunos amigos", reveló Patricia Tendler, la ex esposa de Chueco.

La mujer contó que el domingo 10 fueron a Ezeiza a esperar a una hija de Chueco que volvía de Australia, donde estuvo trabajando los dos últimos años. "Del aeropuerto fuimos a su departamento y almorzamos todos juntos pero yo lo noté un poco raro. Me dijo que tenía que ir al estudio a trabajar y lo acompañé para tratar de saber qué le pasaba, pero Jorge era una persona muy reservada", agregó.

Tendler también advirtió, en diálogo con Clarín, que "estaba muy ojeroso y desde hacía varios días se lo veía preocupado, pero nunca me dijo por qué motivo".

En las notas que dejó en el hotel donde se alojó, en Puerto Iguazú, Chueco dio a entender que se quitaría la vida debido a un cáncer.

"Yo no sabía nada y a él no le gustaba ir a las consultas médicas", aseguró la ex mujer al respecto.

"En las notas que dejó, con una letra apenas legible, escribió que tenía un cáncer intestinal y que ese problema se acrecentó a partir del caso Lázaro Báez. También decía que si él hubiera estado conmigo no hubiera cometido ciertos errores", continuó Tendler.

"Él también escribió que entre sus amigos había algunos que no eran tales, que se sentía traicionado", añadió.

Patricia dijo que no sabía nada del trabajo profesional de Chueco y desconocía sus frecuentes viajes a Puerto Iguazú. "El miércoles me llamaron del Parque Iguazú para avisarme que lo habían encontrado descompuesto y que lo iban a llevar a la Comisaría para contenerlo. Me dijeron que físicamente estaba bien pero muy descompuesto. Cuando pude hablar con él se puso a llorar. Yo le dije que no se preocupara, que yo iba a viajar, que todo iba a estar bien. Ese mismo día fui al aeropuerto pero no conseguí boleto para ir a Iguazú", siguió.

Preocupada por Chueco, dijo que llamó varias veces al hotel Saint George y pidió que una enfermera cuidara a su ex pareja hasta su llegada. "Me tranquilizaron, me dijeron que lo iban a cuidar, que estaba durmiendo en la habitación. Cada vez que llamaba me tranquilizaban", insistió con la voz quebrada.

Tendler recuerda que casi no durmió esa noche y a las 3 fue hasta el aeropuerto para abordar el primer avión. "Se demoró el vuelo por la niebla y recién llegué a Iguazú a las 16, pero a las 9 volví a llamar al hotel y cuando fueron a su habitación ya no lo encontraron".

"Yo creo que él se registró en los dos hoteles porque se sentía perseguido. Iba de uno a otro para dormir aunque sea un ratito. Eso surge de las cámaras de seguridad", aseguró.

Más allá de las notas que Chueco dejó, Patricia insiste en que su ex pareja "jamás se mataría, era una persona que tenía proyectos, estaba por mudarse a un departamento más lindo".